Coger la realidad con las manos, como si fuera carne picada, y estrujarla, y divertirnos con ella, y hacer que un programa de radio sea la vida pero una vida vivida a tope.
Esta semana, hemos cumplido seis años. Sí, nosotros, los de la radio, los de El Despertador, los de Radio Victoria…, y hemos hecho un ultra-programa, en vivo y en directo, desde el patio del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria con decenas de invitados (artistas, cómicos, músicos…), colaboradores, vecinos, despertanos… La idea era fácil: que todo el mundo llevara un kilo de comida (o más) para donar a Rincón Contigo y el Economato Social de La Cala del Moral. Lo llamamos la OPERACIÓM COMIDA.
Hemos echado cuentas: seis años de El Despertador son 1.435 programas de radio, más de 4.300 horas en directo, cientos y cientos de invitados, decenas de colaboradores, millones de ondas hertzianas de ilusión… Estos son sólo algunos de los números de nuestro morning-show, nuestro programa, el decano de la radio municipal de Rincón de la Victoria, que cumple 6 años.
Nuestro programa, admitámoslo, es un error del sistema, lo sabemos, un Error 404, un pequeño milagro cada mañana. Un tipo con la voz profunda (broncínea voz, dicen algunos) y acento fino de Madrid, jugando a la pelota con un grupo de locos, muy locos, cada uno de su cosa. Sí, en El Despertador cualquier cosa puede pasar y, por lo general, pasa (se lo puedo asegurar).
Al lío. El caso es que esta semana hemos cumplido seis años, y hemos hecho un radio-show en directo con Natalia Roig, Manolo Media y Javier Vallespín, músicos como Carlos Bravo, Fran Camino, María de La Voz, y muchos amigos y compañeros como Zenaida, Nanai, los chicos del 2.0, Rubén y Chris, Bosco y FJ (los infantes terribles), Bollero, López y Contreras (los periodistas), Pepi y Vicente (nuestros queridos mayores), y muchos oyentes, despertanos, como Toñi, Gema, Amelia, Celia, Sara…, y asociaciones como AMIRAX o Amanecer de la Torre, y todos los políticos de todos los grupos con representación en el consistorio… (Ah, y Kiko Guerrero en la sombra). En fin, que nos hemos juntado unos cuantos, todos buena gente, claro.
Pero lo más importante, lo más emocionante -y la vida es emoción- es la cantidad de kilos de comida que recaudamos para el Economato Social de La Cala y Rincón Contigo. Muchas bolsas, muchos carros, mucha gente conocida, y desconocida, que al escuchar nuestra llamada se acercaron hasta nuestro estudio de radio ambulante para dejarnos algo. Ya lo dijo Donoso Cortés, una frase que me gusta y suelo utilizar: “no hay que unirse para estar juntos, sino para hacer algo juntos”. Lo podemos decir bien alto: LA OPERACIÓN COMIDA FUE UN ÉXITO.
Hacer radio para hacer algo más. No quedarse en las palabras y en el eco de las palabras. Hacer algo que transcienda, juntarnos todos, hacer algo juntos, celebrar que seguimos adelante, siempre adelante, disfrutar mucho, hacer que un programa sea la vida pero una vida vivida a tope, y demostrar que tenemos un arma cargada de futuro…, la radio.