No es lícito que el promiscuo exija eterna fidelidad a su pareja. Quien visita muchas camas ajenas, peligra en lo más posible, con encontrar su propia cama ocupada algún día de regreso al hogar. IU ha confundido tanto a sus votantes con sus flirteos a siniestra e incluso a diestra, que, al final, casi se arrojan en brazos de un amante más fiable.
La izquierda pura se ha visto traicionada por los escarceos disolutos e indiscriminados de un partido que, a la postre, pacta a placer bajo el sol que más calienta y, hasta en imposible coyunda, se a-lía con el PP en comunidades y ayuntamientos, cuando le aprietan las ganas de poder. Luego dicen que no son exactamente pactos, sino otra cosa, así como aquel al que pescan infraganti en pleno refocile adúltero bajo las sábanas conyugales:
-Cariño, no es lo que parece.
Si los votantes de izquierda pura ya digerían mal que su voto fuese a parar en el oficio de servir de palmeros a una izquierda que no era la suya, qué sería verse durmiendo con su enemigo.
No está tan claro como dicen que los tradicionales votantes del PP y del PSOE desvíen su voto a Podemos y lo que sí, es que muchos de los desengañados votantes de IU aguardan su despechada revancha en las urnas a favor de la nueva promesa de la izquierda. Eso significa también la suma de las papeletas de quienes ya se habían resignado a la abstención. Votar por Podemos es apostar por una incertidumbre, pero lo cierto ha sido tan desolador que paraliza las voluntades. Será que es iluso creer en quien todavía no se conoce, pero más iluso resulta creer en aquel de quien ya hemos conocido la traición:
-Espera, cariño, yo voy a cambiar, te lo prometo.
Pero, quién se lo cree, a estas alturas. Un acto de fe siempre es más posible hacia un desconocido que hacia quien ya se conoce demasiado. Confiar en el probado promiscuo es abusar demasiado del síndrome de Estocolmo. Ahora le ha tirado los tejos a Podemos y Podemos no ha querido compartir sus favores, bien sea porque representa este partido el individualismo de los nuevos tiempos o porque los coquetos, dada su reputación precedente, no dan ninguna garantía para un seguro maridaje.
-¿Cómo voy a creer en tu fidelidad si te vas con todos?
Muy a continuación del fracasado escarceo, llegó la defenestración de Errejón y se habló de un despegue de IU. Mira tú por donde.
Resulta que el partido resucita de sus cenizas como el ave Fénix y lanza nuevos productos al mercado. Chicos guapos, jóvenes y revolucionarios que pueden plantarle cara a Pablo Iglesias. Se habla de Álvaro García Mancheño que va a sustituir a Sánchez Gordillo en el Parlamento Andaluz y vuelve a sonar el nombre de Alberto Garzón como futuro líder de IU. Él está poniendo en duda la labor de la vieja cúpula del partido y va a estremecer sus cimientos. Pues vale, eso está bien, pero ¿por qué monta este revuelo precisamente ahora y no antes?
Los dolidos votantes de IU recuerdan que le pagaron la beca con su voto en el 2011 para que se fuese al Congreso de los Diputados a fomentar el impulso del 15-M. El primer día que fueron a hacerle una entrevista, cuentan los periodistas que no lo hallaron pues estaba desayunando, de lo que se deduce que se había integrado bien en las costumbres cosmopolitas.
A ver, ya sabemos que el chico es discreto, que no le gusta hacer ruido, ¿pero no es demasiado silencio durante tantos años?
Desde luego, no hay mejor estímulo que la competencia. Por la competencia, tuvimos Siglo de Oro, al menos, en las letras. Pablo Iglesias si no sirve como presidente, va a servir para que todos los viejos partidos se estimulen y saquen sus mejores galas. También para que se reconcilien las dos Españas como nunca. Jolín, PP y PSOE gobernando en coalición. Es tierno, pero, a la vez, un poco triste, como si una pareja madura intentase resolver sus crisis matrimoniales un fin de semana en un parador nacional. Aceptan sus rutinas, sus mutuas manías y sus celulitis, porque, al fin y al cabo, es lo que hay.
Sé que no contribuyo demasiado a la esperanza de este país con tamaño escepticismo, que también abarca a Podemos. Se me figura que Podemos es un invento para justificar con el temor, la falta de programa. El programa común de todos parece que es ahora meter miedo para no votar a Podemos, que nos va a llevar a la República bolivariana, menuda tarandilla.
Pero, dentro de todo, voy a dar una buena noticia. Hoy es doce de diciembre y son dos años que sobrevivimos al fin del mundo, según los mayas. Y aquí seguimos al borde del Apocalipsis, como siempre.
Es que si Izquierda Unida, tras lo acontecido en Madrid con la pareja de Pablo Iglesias y lideresa de esta formación política, Tania Sánchez – repartiendo viviendas subvencionadas a gogó para toda su familia y parte del extranjero, como si Madrid fuese Andalucía – no toma sus medidas y, previo barrido en profundidad, hace mesa limpia, será muy difícil que alguien, que no esté metido en tal pesebre, le dé el voto. Y sí, como mal menor, lo desvían a Podemos, creyendo votar “izquierda” (tratándose de España hay que ponerla entre comillas) a sabiendas de que la misma ETA pide a los suyos no votar Amaiur sino a Podemos… Item más, a los cinco eurodiputados de Podemos (que dijeron venir a terminar con la “casta”) se les reconoce como grandes beneficiarios de los famosos Sueldos Opacos, de suyo tan criticados. En fin…
Personalmente, teniendo a Venezuela e Irán entre sus principales puntos de referencia y como ejemplos de gobernanza a seguir, no seré yo el que vote a Podemos. Que tal vez la cosa vaya de farol, pues también. Pero no se le puede negar tirón, sobre todo en parte de la juventud y en aquellas cabezas donde, aun conscientes, la inteligencia se pone al servicio de la fuerza bruta.
Me quedo con la sabia conclusión del oso de la fábula:
Un oso, con que la vida
se ganaba un piamontés,
la no muy bien aprendida
danza ensayaba en dos pies.
Queriendo hacer de persona,
dijo a una mona: «¿qué tal?»
Era perita la mona,
y respondióle: «muy mal».
«Yo creo», replicó el oso,
«que me haces poco favor.
Pues ¿qué?, ¿mi aire no es garboso?
¿no hago el paso con primor?».
Estaba el cerdo presente,
y dijo: «¡bravo! ¡bien va!
Bailarín más excelente
no se ha visto, ni verá!».
Echó el oso, al oír esto,
sus cuentas allá entre sí,
y con ademán modesto
hubo de exclamar así:
«Cuando me desaprobaba
la mona, llegué a dudar;
mas ya que el cerdo me alaba,
muy mal debo de bailar».
Guarde para su regalo
esta sentencia el autor:
si el sabio no aprueba, ¡malo!
si el necio aplaude, ¡peor!
Saludos
¿Y hay que resignarse entonces a votar a un partido con corruptos? ¿Será verdad qué UPyD es la única excepción? ¿Tú qué dices?
Digamos, en honor a la verdad, que los de UPyD, no habiendo gobernado nunca, quedan exonerados de toda culpa, pero no exentos del todo. A diferencia de otros, los trapos sucios, que los habrá, los lavan en casita y ahí también liman (o no) sus diferencias, que estos días se habla de un importante trasvase, de votantes propios, rumbo a Ciutadans…El problema: Rosa Díez. ¿Quién está contento con su suerte en esta bendita España, la tierra donde mejor se come y se vive o se debería…? ¿A quién habrá que derrocar, destituir, defenestrar y en qué número…?
Dicen los sagaces chinos: “el que tanto nombra al enemigo es el enemigo”. Pablo Iglesias, si no los tiene a mano, los busca y los nombra por todas partes, no importa el siglo. Y los señala, como en los albores del Führer se señalaban a los que arruinaban Alemania, esa peste…
Ahora, imbuido de clase y soltura, embiste diestramente. Hacia abajo y un poco al margen de los ya, de por sí, marginados, per saecula saeculorum…
http://www.intereconomia.tv/2014/12/16/el-clasismo-de-pablo-iglesias-esa-gentuza-de-clase-mucho-mas-baja-que-la-nuestra/
¿Quo Vadis, Paulus?
Buenas noches
Bueno. Winspector, yo me refería a que no está demostrado que hayan robado dinero público como otros y no a sus disensiones internas. Y, en fin, ¿tú crees como dicen algunos que Rosa Diez es menos votable, o sea, fiable para algunos por ser mujer? ¿Piensas que si en lugar de Diez estuviese de líder Sosa Wagner, por ejemplo, este partido, después de tantos años, tendría más peso? ¿Acaso no es Rosa la mujer diez?
Por eso, por eso, repito, UPyD queda exonerada de corruptelas. Si no ha tocado gobierno todavía… Pero la ruptura con Sosa Wagner, ¿no fue debida a la querencia – de Sosa – por Ciutadans y por ello fulminado…? Luego, yo me inclino más a creer que, de haberse llevado a cabo esa coalición con Ciutadans, ésta última habría absorbido (y tal vez desleído) a UPyD. A mí particularmente me cae bien Rosa, la considero una persona íntegra, luchadora, muy capacitada y a la altura de cualquier político varón. Mas, en España, esa igualdad, precisamente ésa, todavía choca. Existen prejuicios inamovibles, como la ausencia de complacencia ante el éxito de los demás o de una mujer que no se pliegue a otra circunstancia que al hecho de serlo (y mantenerlo) en un terreno demasiado abrupto aún, como es la política española, donde la presencia femenina, por tradición, queda relegada a imitar actitudes y poses propias de sus compañeros varones de partido, que es ir a lo práctico, soltar a veces alguna gracieta…Sin embargo, tratándose de Rosa, su proceder como lideresa es considerado autoritarismo. Precisamente ella, tan amante de las urnas…
Que no sea finalmente la soledad la que acabe con ese espíritu tan combativo, en un país tan dado a la desbandada.
Saludos
Bello tu comentario y muy valiente, Winspector. Por decir algo semejante, a Vargas Llosa casi le arrancan la cabeza. Bravo.
Pobre Vargas Llosa. Aunque se quedaron en el casi, igual que esos vicegoles, cuando el balón roza el poste y sale fuera, o aparece el puño de Kameni y lo desvía in extremis. Todo queda en un ¡huy!ruidoso,sí, pero efímero.
También se le puede espetar a esos “valientes” de la misma forma que la simple cerilla, cuando se dirige al mechero de yesca (esto es antiguo)con ocasión de una peleílla entre ambos: “Tira la piedra,cobarde; defiéndete como yo: con la cabeza”
Pues comme d’habitude, muchas gracias y buenas noches tenga usté, seña Lola.