Hace unos días, llegué a casa ya entrada la noche. Tenía que preparar un largo viaje profesional. Preparé la maleta, los papeles y el power point de la conferencia, localicé el pasaporte, algo de dinero, cené algo y me acosté ya muy tarde.
Encendí la televisión y, repasando las diferentes cadenas (por cierto, me alarmó la cantidad de adivinos, de brujas, de tarotistas, de videntes y otros seres de extraño y diverso pelaje que pueblan la noche televisiva), me detuve en Intereconomía porque una bonita presentadora estaba dirigiendo un juego en el que ofrecía 18.000 euros por contestar una simple y aparentemente fácil pregunta.
– ¿Quién sabe el nombre de un ciudad española de nueve letras que coincide con el de una famosa orquesta?
En la pantalla se ofrecía una pista interesante. El nombre de la ciudad española empezaba por M y acababa en N. Y, entre ellas, las rayitas de las otras siete letras en blanco.
– ¡Por siete letras, tres millones de las antiguas pesetas!, decía la presentadora usando una deleznable expresión monetaria.
– ¿Nadie lo sabe? ¿Alguien que no esté durmiendo quiere llamar?, añadía, sorprendida de que el teléfono permaneciera en silencio.
En la pantalla se veía un cuadro de doble entrada con dieciséis letras entre las que se encontraban las que formaban el nombre de la ciudad y un teléfono negro. La mano de la presentadora sostenía el auricular haciendo el amago de que de un momento a otro iba a sonar y ella lo podría atender para entregar el generoso premio.
Pensé inmediatamente en la ciudad de Mondragón. Y, quise comprobar el engaño. El número, que resplandecía con una iluminación intermitente y que la presentadora repetía sin cesar era el 905505050, como se verá, fácilmente memorizable. Me dije, sabedor de que contenía una trampa: voy a llamar, voy a tocar con mis propias manos al gato encerrado. Supuestamente, al marcar, la presentadora tendría que levantar el auricular diciendo:
– Por fin, alguien ha llamado. ¿Conocerá el espectador la respuesta? Si es correcta, suyo es el premio.
Pero no, no sonaba el teléfono de la pantalla sino que respondía una voz que, a toda velocidad, decía el coste de llamada desde fijos y móviles (un euro con cincuenta, si mal no recuerdo, desde mi fijo) y te decía que volvieras a intentarlo, que estabas a punto de ganar, que era tu noche de suerte.
La presentadora insistía en la cuantía del premio y en la sencillez de la respuesta. Puso un reloj en pantalla que marcaba tres minutos mientras la presentadora invitaba a llamar. Pasaron esos tres minutos y no se acabó el juego. El relojito de marras apareció diez o doce veces. Mientras tanto, imagino, llamadas y más llamadas de los ilusos y codiciosos jugadores y jugadoras. ¿Cómo es posible que se mantengan esas trampas tan clamorosas, noche tras noche?
Dio como tope las tres y media. Pasó esa hora con creces. Y el juego seguía. Aumentó la cuantía a 20.000 euros y luego a 22.000. Y luego añadió un extra de 500 euros, enseñando un billete de esa cantidad en las manos. La presentadora fingía un diálogo con la producción del programa que acababa siendo ridículo. Un engañabobos absolutamente elemental..
Dio más pistas: otra letra era la G. Y la colocaba en su correspondiente lugar. Las tres primeras eran MON. Por si quedaba alguna duda dio el nombre del artista y cantante Javier Gurruchaga, ligado a la orquesta Mondragón. Después la presentadora dibujó un dragón en una pantalla, para dar pistas. “La última parte de la palabra es un animal que echa fuego por la boca”, decía. Ya sólo quedaban tres letras. En definitiva, que era imposible fallar. Estaban preguntando por el color del caballo blanco de Santiago. Volví a llamar, y volvió a salir la voz acelerada que te invitaba a seguir llamando. “Es tu noche de suerte”. “Estás a punto de ganar”. “Llama de nuevo”.
Luego dijo la presentadora que había cinco líneas abiertas. Y poco después diez líneas abiertas. Como si el problema fuese de líneas. Al cabo de una hora de dilaciones llamó alguien desde Bilbao. Una tal Edurne. Dio la respuesta correcta. Sin dirección, sin comprobación, sin garantía alguna de que la llamada no fuera falsa.¿Quién garantiza que esos organizadores no preparan la llamada de un tío, de un sobrino, de un amigo o de alguien que está en el estudio? ¡Como para fiarse!
Qué robo, Qué mentira. Qué engaño. Qué timo. Qué sinvergüenzas. ¿Cómo no se denuncia este tinglado? Yo voy a dirigirme a la OCU para ver qué se puede hacer. Lo que se pretende (y se consigue, me imagino) es que se produzcan cientos y miles de llamadas inútiles para el que llama y muy rentables para el programa.
Claro que nadie te obliga a llamar. Pero no hay duda de que se trata de un negocio fraudulento. No hay duda de que el juego está sustentando en una cadena de trampas.
– No es verdad que nadie llame (y dicen que nadie llama)
– No es verdad que sea el último minuto (y dicen que lo es)
– No es verdad que si llamas te van a escuchar la respuesta (y lo dicen)
– No es verdad que suban el valor del premio porque nadie llame (y lo dicen)
– No es verdad que haya cinco o diez líneas abiertas (y lo dicen)
– No es verdad que la presentadora tenga la mano en el auricular para recibir la llamada (y lo hace)
– No es verdad el tiempo que dicen que va a durar el juego (y que reiteran y cambian a su antojo)
¿Cuántas llamadas se habrán producido durante el juego? Miles y miles. Hagan números. Es muy fácil. Me pregunto cómo hay gente que sigue y sigue llamando.
Estar educado es tener un buen detector de trampas instalado en la cabeza. Pero no sólo es eso. Estar educado es sentir un compromiso con la sociedad y hacer lo posible para que esas trampas disminuyan o desaparezcan. Si uno es capaz de descubrirlas conseguirá no caer en ellas, pero es preciso que nos duela que caigan en ellas los demás. La educación tiene un componente ético esencial. La educación no pretende solamente que cada uno viva mejor sino que podamos vivir juntos en un mundo justo, hermoso y habitable.
Don Miguel… la realidad esta llena de “trampas” y la prevencion, sin ninguna duda, es la educacion, pero la educacion confiere, como bien dijo al presentar ayer, en Rosario,”Pasion por la escuela”… un sentido critico y un sentido etico de la vida.
Gracias profesor por hacernos sentir importantes y por compartir su optimismo de un mundo mejor… “Y cuando haya algun fracaso, algun tropiezo, alguna decepcion, hay que saber construir, con dos signos menos, un signo mas.”
Hasta pronto!
Y, ¿Qué está haciendo Zapatero para acabar con estos indeseables canallas estafadores y estafadoras? ¿Qué están haciendo Zapatero, Rajoy y demás políticos por la educación? ¿Pactar leyes educativas? (Ni esto último siquiera) Los actuales políticos acostumbrados a estafar y a vivir (bien) de la estafa, no mueven un solo dedo por la educación (mal puede educar un maleducado), por la buena educación, puesto que así les va bien, ¿Hasta cuándo?
¿Por qué no intervienen ese programa y encarcelan inmediatamente a sus responsables todos: director o directores, productores, presentadores, electricistas, etc.? ¿No encuentra suficientes motivos la policía? ¡Yo veo tantos!
Estimado Señor Santos:
Sigo de vez en cuando sus atinadas reflexiones y, en esta, como en tantas, no podría estar más de acuerdo. Pero no sé si se habrá dado cuenta de que la propia publicidad de su blog es engañosa: en estos momentos en los que escribo estoy leyendo un banner en la parte superior del blog que dice que he sido seleccionado como ganador de un iMAC, de un iPHONE o de un iPAD,…¡? Todo ello sin concursar ni nada.
Y es que estamos rodeados de gente que nos sigue ofreciendo duros a cuatro pesetas y, a veces, la desesperación de la gente le hace caer en estos encantamientos.
Gracias por sus reflexiones y si realmente le interesa este tema, mírese la publicidad que difunde, o quizás mejor, le difunden.
Saludos de un compañero de a pie de pupitre.
Mi querido Miguel Ángel, ya veo que te has caído de un guindo. Ha tenido que ser la casualidad la que te abra los ojos para ver la cantidad de bazofia televisiva que nos están dando de comer. Lo trágico es que en la mesa también comen de esos platos muchos niños y niñas en este país. Sin embargo aún es más descorazonadora la existencia de tanta gente que “colabora” en esta especie de autodestrucción ética y moral. Gente que, día a día, participa y engorda el share de esos programas. Gente que, tras la frustración de no conseguir su premio o ante los comentarios, insultos y barbaridades que con su escucha fomenta al final gritará:
¡La culpa la tiene Zapatero!
Es increible que se intalen tan impunemente engaños en la televisión sin que se prohiba por parte de la justicia o de la política. Parece que vale todo con tal de ganar dinero. Habría que proteger a los ciudadanos de estos ladrones.
Si, es increíble y hermoso que los habitantes del planeta tierra aún conservemos rasgos de ingenuidad…
Días pasados recibí un mensaje en mi celular que me estaba por quedar sin saldo. Me sorprendió porque había cargado mi cuenta el día anterior. Pero igual marqué el numero para controlar cuanto saldo poseía. Y así supe que es una forma más de recaudar dinero de las empresas telefónicas en esa llamada que se hace casi de forma automática para consultar… Es increíble la capacidad intelectual que se utiliza en pro de recaudar dinero ilícito…
Y por mucho que sepamos siempre nos pescan desprevenidos.
Ja ja son unos genios y siempre terminamos cayendo…
Aunque no tenga nada que ver, como en este foro escriben muchas argentinas, y aquí se festeja el día de la madre.
para todas ellas mil felicidades, que ser madre está entre las mejores cosas de la vida.
Bueno, es obvio que existen estos programas de televisión, pero aún más evidente es que desde todos los frentes, desean timarnos a diario. Si en los programas que se mencionan en el artículo aprovechan la debilidad humana como resorte (una presentadora con unos senos descomunales, preguntas triviales….), en la vida cotidiana nos enfrentamos, más allá de nuestra ingenuidad, a nuestra propia impotencia para un mercado neoliberalista que tantos estragos nos ha causado a los ciudadanos. Si queríamos comprar un piso, por ínfimo que fuera en tamaño, nos encontrábamos con el precio por metro cuadrado más caro no ya de toda Europa, sino de la OCDE. Precio, con el visto bueno del equipo de gobierno (de cualquier signo político) de la localidad correspondiente y de cualquier jerarquía política por encima de dicho equipo. Si vamos a comprar, nunca dejo de asombrarme como “la cesta de la compra” (a ver si me sale ya de una vez por todas ese “dientista” que cantaba María Jiménez) se encarece progresivamente, a años luz por encima de nuestros sueldos. Y hablando de dientes… ¿por qué España es el único país europeo donde cuesta una fortuna tener una dentadura sana?. Misterios insondables. Pero, además, me pregunto… ¿por qué la electricidad sube y sube mientras nuestros sueldos bajan y bajan? ¿Por qué la mujer sigue estando tan mal vista en los cargos directivos? ¿Por qué, cuando pido la hoja de reclamaciones en cualquier negocio se ríen de mí? Voy a parar… pero no. ¿POr qué en toda Europa la única voz que se ha escuchado -clara, fuerte, sincera y llamando a las cosas por su nombre- en contra de las políticas de inmigración de Francia fue silenciada al día siguiente? No seamos ingenuos/as: a diario, en todas nuestras acciones, estamos siendo “timados” por aquellos que pueden timarnos. Y qué impotencia. Voy a dirigirme yo también a la OCU, Miguel Ángel. Estoy segura que me van a hacer caso. Abrazos.
¿Usted se ha sorprendido? Aquí en Argentina, pasadas laS 00 hs, hay un montón de canales que tienen exactamente el mismo jueguito. Están armados para robar, para engañar. Aunque sea por curiosisdad creo que todos hemos caído en la tentación de hacer una llamadita, pero siempre te dicen: SEGUÍ PARTICIPANDO.
Lo bueno es que hasta los niños, alumnos de los primeros grados que manejan de taquito la tecnología, saben que son todas trampas para sacarte el crédito. Lo triste es que más de un alumno bajito me ha dicho: Seño,yo descubrí una trampa para cargar una tarjeta en mi celu sin pagar.
Y bueno, quien roba a un ladrón tiene cien años de perdón.(No se puede, no se debe predicar eso),pero lamentablemente es lo que ciertos sectores de la sociedad están gestando.
Cada niño es una hoja en blanco. ¡Ay, si pudiéramos escribir en ella sólo cosas buenas y sanas!
¡Feliz día para todas las madres argentinas y de todo el planeta!
La ingenuidad de la gente también tiene tela. Creo que la educación consiste en ser capaz de descubrir las trampas que nos tiende la sociedad en general y los medios de comunicación en particular.
Y, cuando la buena educación nos permite descubrir al estafador, ¿Qué hacemos con él, le damos un premio? Por lo que veo, siguen tan campantes por las calles y despachos cometiendo sus fechorías.
Estoy convencida que la educación todo lo puede, educación que emancipa, libera,que ayuda desnaturalizar , a cuestionar lo dado, ayuda a resistir y a reflexionar. Una vez más quisiera expresarte mi admiración, sos un potencial de optimismo, los que tuvimos el placer de escuharte una vez más en Rosario salimos reconfortados en lo conceptual y en lo actitudinal.Saludos cordiales. Hasta pronto!
Pingback: Aporte educativo
Ahí está en juego el conocimiento que los académicos ponen al servicio de la estafa y la manipulación mediática. Aprovecharse de los televidentes, y continuar tan campantes con esos programas que llenan el espectro televisivo de muchos países, acá lo relalizan las grandes empresas mediáticas y hasta diversifican los juegos. Por más que los televidentes se quejan no ha pasado nada, además que los “defensores de los televidentes” cumplen una función de darle la razón a la cadena televisiva que los contrata, y de responder y poner en debate este tipo de cosas en horario sin A (sin audiencia).
Nuestra responsabilidad es continuar emplenado los medios a nuestro alcance para develar a estos pícaros televisados.
en argentina, (creo que en muchos paises tambien) pero hablo de lo que conozco, en muchas oportunidades estamos siendo estafados y es muy dificil saber cuando, pero cotidianamente, te llaman para ofrecer un plan para comprar un auto por una determinada cuota y resulta que despues era…(en letra chiquita lo decia)… mucho mas de lo que se publicaba y con los telefonos mopviles????? … 27 centavos el minuto… pero claro faltaba agregar los impuestos… que se suponia que los ibamos a pagarrr??? son estafadores como los hay en todos los paises y no menosprecien el suyo, cada uno tiene que sumar para su pais y no se trata de que los encarcelen se trata de abrir nuestras cabezas y estar atentos y enseñarlo tambien
supongo que hablan de un programa en España?, en la Argentina, mi país, pasa lo mismo, que lastima que ocurran estas cosas, los medios tenian mucho poder, eran creeibles lamento que hayan caido de esta manera….
Mi estimado profeso Santos… un abrazo desde Colombia y a ver cuando regresa por estas tierras para nutrirnos con estas reflexiones… en cuanto al tema de su columna,,, totalmente de acuerdo… aca no hay uno sino tres o cuatro de estos jueguitos y hace unos meses al igual que ud llamé y obviamente descubrí la trampa… en verdad que incluso el trabajo debe ser una cuestión de ética y el saber vivir de los otros y con los otros requiere de un compromiso más que con los demás… con la propia conciencia
Cuando más dinero se gasta este país en educación, más profesorado hay, la ratio es más reducida, se aumentan los Equipos de Orientación Educativa, se regalan ordenadores portátiles a los alumnos, existen más recursos en las aulas… menos educados estamos, o así parece ser.
Resulta muy difícil competir con los medios de comunicación, puesto que media hora de televisión es capaz de echar al traste años de educación.
Los medios de comunicación nos muestran la antieducación, programas trampa como el que usted menciona, programas basura con altas audiencias donde se nos cuenta las vidas de gentes irrelevantes y que ocupan todas las franjas horarias televisivas, debates donde no se respeta el turno de palabra, donde se menosprecia y descalifica al contrario, donde se dan razonamientos ilusos…
¿Esto es lo que pide la audiencia? ¿Esto es lo que pide la sociedad? Pues señores políticos si las leyes son producto de las necesidades e intereses sociales, tal y como se manifiesta en el prólogo de la LOE, me parece que o cambiamos la televisión o cambiamos la educación, porque algo chirría…
En este asunto se conjugan dos problemas:
a. La caradura de algunos
b. La ingenuidad de otros
Pero, claro, no deberían ser impunes quines de forma tan visible y tan constante engañan a los demás. La justicia debería intervenir.
Los pillos, los sinvergüenzas, los caraduras van a prosperar en la medida que les dejemos. Todos tenemos que hacer frente a esta ola. Los ciudadanos de a pie, los jueces, los políticos, los peridistas, los profesores. Hay que impedir que los sinvergüenzas hagan lo que les de la gana impunemente.
Mi querido Maestro:
Y yo ilusamente pensaba que solo en Argentina se estafaba a la gente!!!
Veo que en un país del primer mundo, como España sucede lo mismo.
Comparto una vez más con Ud. realmente!Qué sinverguenzas! y coincido con varios comentarios de esta nota…Si no logramos con la Educación, cambiar estas realidades, pues no lo haremos nunca con nada!!!
Lo lamentable es que la Educación, también esta terriblemente insfectada de estas realidades: las familias no se preocupan por sus hijos, los docentes estamos cansados de ser maltratados, por el gobierno, la sociedad en general y ni hablar de los padres que solo pretenden desligarse de su paternidad responsable. Siempre me pregunto antes de partir cuando lo decida Dios, vere otra realidad que me refuerce la esperanza en la Educación???
Mi respeto y admiración de siempre.
Estimado profesor, me hago solidario y eco de su denuncia. Tambien, de todos aquellos que notan a diario como se burlan en su propia cara; con el mensaje que, mas que participar en su evento, nos restrega indolentemente, que no poseemos las virtudes necesarias para hacerle frente a tales amenazas, realizadas muchas veces, bajo la protección de nuestras autoridades. Venezuela no escapa de este mal, y es más, quiero comentarles que actualmente, la escuela es usada como centro de adoctrinamiento politico, a la mas vulgar manera, que un centro de adiestramiento de animales; y no estoy exagerando! Los Directores de las escuelas son colocados a dedo, por su participación política, y no por su curriculum o trayectoria en educación, contradiciendo lo que estipula la Ley; así vemos, directores con 10 o menos meses de graduados en educacion, cuando tienen el título o algún componente relacionado con educación, como los que toman la rienda del quehacer educativo de una comunidad, sin tener la mas mínima idea del trabajo a realizar; peor resulta cuando no es ni graduado en un area relacionada, ni remotamente, al area educativa (ejemplo: secretarias, enfermeros, etc, por no nombrar más) y no lo hago por desprestigiar a estos trabajadores, sino como una crítica a algo que parece, no estar en su lugar (Yo me imagino haciendo una neurocirugía) Que barbaridad! También, un docente que, desvalorizado, desmotivado, amenazado, y sin un futuro seguro, se rinde ante un aparato burocrático, que le dictamina la prosecusión o no de su contrato; ya que la figura del docente fijo, estipulada en la ley, está en contra de los intereses del gobierno. Me uno a los miles de docentes en el mundo, que como el profesor, hace un llamado a la sociedad, y que tiene fé y optimismo, en que todo cambiará en la medida en que despertemos de nuestro letargo. Saludos respetuosamente desde Venezuela, Estado Táchira. Siga Así!
Ante tanta reflexion me es imposible no maldecir a los que timan y a los que asumen los timos como naturaleza del hombre. Mi entorno ha sido timado con estos programas televisivos. Como solucion al problema esta claro, odiar tanto a todo este montaje, que cualquier persona que trabaje de esta manera se muera, de golpe digo, ya que en vida ellos ya saben que son malos y estan ya muertos. Dejar de ver la television es la unica solucion.