Cuentan que una amiga le preguntó, en cierta ocasión, a Leo Messi: “Siendo tan tímido, ¿cómo podés salir a la cancha y hacer lo que hacés delante de cien mil tipos que te están mirando?”. Messi sonrío, levemente, y contestó: “No sé, no soy yo”. Reviso el último gol de Leo Messi en la final de Copa. Lo veo otra vez, y otra vez, lo intento analizar, lo disfruto. Me pregunto si, cuando corre la banda, es él o es el personaje. Otro doblete para el Barça. Como escribió Galeano, “Messi lleva la pelota dentro del pie”. Messi es un genio, quizás el genio más genial.
Viene a la radio Jon Rivero. Un indio cántabro que se vino a Málaga por amor. A Jon le gusta titular raro. Jon es uno de esos raros que me cautivan. Titula, por ejemplo, “La identidad temporal de los protones”, “Constelación hiperbólica”, “La atmósfera de la luna”… Benditos los raros. Jon ha estado en Microteatro Málaga con “Caña de pescar enchufable en Porto Venere”. Otro título raro. Jon ha visto 409 veces Parque Jurásico. No es broma, o sí. Jon es un provocador.
Me preguntan por el título del blog: control C + control V, copiar y pegar. Respondo que desde los palimpsestos grecolatinos, hasta la novela pulp, pasando por el arte gótico, el teatro clásico, la poesía en general, la obra de Borges…, todo, en general y en particular, es copia y endogamia. Luego, me pongo un bitter gin.
Leo “Pórtate bien”, de Noah Cicero, traducido por mi buena amiga, Teresa Lanero. “Pórtate bien” es un retrato de nuestra generación en la implosión capitalista. Jóvenes licenciados, con trabajos de mierda, que no dejan de mirarse el ombligo. Me gusta. Me parece acertado como retablo de lo que somos. Lo llaman Alt Lit, o la vida vista desde las cosas mínimas. Les seguiremos la pista.
Leo una entrevista de María Blasco en El País. María es investigadora, bioquímica, bióloga molecular y directora del CNIO. María Blasco dice que “el límite biológico del ser humano son 120 años”. Pienso, como escribió Abraham Lincoln, que “desear la inmortalidad es desear la perpetuación de un gran error”.
Vienen a casa un grupo de amigos. Comemos, bebemos, hablamos de las elecciones, de las llamadas “fuerzas emergentes”, de las salidas de emergencia y los nuevos aires. Hablamos del tono de Carmena distinto, amable, nada exasperante, frente al delirio de Aguirre. Hace meses presagiamos un 2015 total y no nos equivocamos. España está cambiando y deberíamos saberlo, todos. Cuando terminamos de hablar, se ha hecho casi de noche.
Alguien, obviaré su nombre, publica unos puntos suspensivos en su muro de Facebook. A esta hora, 72 personas le han dado a Me Gusta. Cuando no hay nada nuevo que decir es mejor no decir nada.