(Nota 1. Extracto del discurso que escribí para la boda de dos amigos, despertanos, oyentes de la radio, que se casaron, de nuevo, este fin de semana, Fabi y Andrés, y con los que pasamos, junto a otro gran grupo de amigos despertanos, un día inolvidable).
(Nota 2. Despertanos es el nombre con el que se define a los oyentes y amigos que siguen nuestro programa de radio, El Despertador).
Amigos, despertanos, he estado recordando…, pero nada. Me gustaría saber, de alguna manera, cuándo, cómo surgió todo esto, pero me resulta imposible saber. He rememorado, revisado el facebook, echado para atrás la memoria para saber qué día, de qué manera, con qué palabra, quién fue el que encendió la chispa definitiva para traernos hasta aquí…, y nada. Lo siento, no he llegado a ese dato, no he obtenido ningún resultado.
Las amistades, supongo, se forjan con el tiempo, se construyen con montañas de gestos y verbos, con miradas, guiños, espacios, silencios… Nosotros, los despertanos locos, aquellos que nacimos a la vera de un programa de radio, en la estepa nívea de facebook…, nosotros no somos distintos de otras relaciones.
Somos parte del universo y la dedicación, el resultado matemático del tiempo y los detalles. La amistad lo es todo. La amistad vale más que el talento. Vale más que el gobierno. La amistad vale casi tanto como la familia. El sexo es divertido, sí, como el fútbol, o la comida, pero la amistad es el último metro de tierra que te impide caer al abismo.
Me gusta llegar a la radio, y a las 8 en punto de la mañana publicar nuestra entrada en las redes, y ver cómo vais llegando, cada uno a su manera, con sus palabras y modos, cómo os expresáis, llenos de afecto y confianza. Me gusta, a veces, cuando acabo de trabajar tarde, mirar vuestras publicaciones en los despertanos locos; me gusta cómo batimos récords de comentarios, 100, 200, 300, 500, 1.000 comentarios…, y cómo nos divertimos cantando una canción loca para un grupo de despertanos locos convertido en el himno más loco del mundo. Me gusta ver las fotos de unos y otros, yendo, viniendo, aquí, allá, en Rincón, en Málaga, en el Spa de Sol, en la playa, y siempre sonriendo…, y juntarnos por cualquier evento: la exposición de Oscar Lugo, el último monólogo de Álvaro Carrero, el teatro de nuestro querido Bosco Vida… Me gusta ver la solidaridad, y los gestos, cuando de una forma discreta alguien echa una mano a otro para seguir adelante, siempre adelante.
Hay una teoría infalible sobre la amistad: siempre hay que saber qué se puede esperar de cada amigo. Lo bueno de los despertanos es que nacimos sin esperar nada grande, los unos de los otros, ni milagros, ni alabanzas… Espero que todo siga así. Sin esperar gran cosa, dejando que la vida nos lleve hasta donde dispongamos y nos haga mejores.
Sol, me pidió una líneas sobre los despertanos, y esto es lo que me ha salido. Lo sé, no es gran cosa, es lo que es, lo que sale, lo que hay… Gracias a todos por estar ahí, cada mañana, cada día, cada vez que me echan de un programa de la tele, cada vez que abro el facebook… Gracias por darnos de comer con todos los sentimientos vivos, generosos, atentos… Gracias a los que empezaron esta locura, a los que la siguen, a los que se van uniendo, a los que llegarán… Gracias!!!
Una última cosa. Ayer, justo, cuando acababa estas líneas, me dio por entrar en el grupo de los despertanos locos en facebook, y alguien nombró a Serrat, aquella canción de “Cada loco con su tema”, y entonces me vino a la cabeza el inicio de la canción, y pensé que era el mejor broche para este discurso:
Cada loco con su tema
contra gustos no hay disputa
artefactos, bestias, hombres y mujeres
cada uno es como es,
cada quien es cada cual,
Para terminar diciendo, cantando, riendo, como queráis, pero acabar diciendo aquello de…
Antes que nada soy… partidario de vivir.
Pues eso, amigos, a VIVIR, A VIVIR, A VIVIR…
Ainsssssssssss Roberto, eres la alegría de nuestras mañanas..Gracias a tí, los locos despertanos nos hemos unido y ahora no somos muchos somos un, un solo corazón que se mueve gracias a todos esos latidos que aportamos cada uno de nosotros..Como tu dices, la amistad está por encima de todo..Gracias por hacernos sentir..que grande eres Don Roberto..