El título no habrá suscitado sorpresa, salvo la pequeña que surge de la identificación de la persona a la que, supuestamente, se refiere el nombre propio de Simona. Es probable, sin embargo, que ahora, al saber que es el nombre de una perra podenca de siete años a la que le falta la pata delantera derecha y que se trata de una tesis doctoral leída en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Oviedo, se produzca incredulidad y asombro.
Esa misma mañana de la lectura (siete de septiembre), en la sección de Sociedad del periódico La Nueva España se podía leer este llamativo titular: “Simona, la perra que se comió una pata para sobrevivir y que asistirá a una tesis”. La periodista M.G. Salas, que firma el artículo, cuenta la historia de esta perra a la que un cazador dejó atrapada en una trampa y que, para sobrevivir, arrancó a dentelladas su extremidad. Asombrosa reacción de resiliencia que, probablemente, estuvo reforzada por el hecho de que quiso salvar también a los cachorros que iba a traer al mundo, ya que estaba embarazada.
Rescatada por Marga, su salvadora, puesta en manos de un veterinario y operada con urgencia, salvó la vida, aunque perdió a sus cachorros y su pata delantera derecha. Todo esto sucedió en Chiclana (Cádiz) hace algunos años. Marga publicó la foto de Simona en internet donde fue vista y solicitada en adopción por mis queridos amigos ovetenses Noemí y Fran, amantes de los animales y, por consiguiente, personas de gran corazón. Como no se veía claramente en la foto, les informaron de que a la perra le faltaba una pata y ellos, que efectivamente no se habían percatado de ese hecho, dijeron que era un motivo más para la adopción. Ese hecho también define a mis amigos, que se desplazaron desde Oviedo a Chiclana para recogerla e incorporarla a la vida de la familia, donde ya había otros cinco perros.
Se preguntará el lector el porqué de la presencia de Simona en esa tesis doctoral. Lo explicaré brevemente a continuación. Beatriz Cimadevilla Alonso, la doctoranda, había presentado su trabajo titulado “Una nueva filosofía de la educación: la empatía animal”. En connivencia con Noemí Rodríguez, “mamá” de la perra y miembro del tribunal, pensó que sería un hermoso símbolo la presencia de Simona en el acto universitario de más alto rango académico.
En la presentación del acto, como presidente del tribunal, hice referencia a la presencia de Simona, animal no humano en el que podían estar representados todos los animales que sufren en este mundo nuestro, que es también su casa.
Simona asistió al acto con la tranquilidad que propiciaba un ambiente empático y sosegado que la hacía el centro de las miradas y de los afectos de los presentes.
La tesis había nacido hace cinco años, se había llenado de lecturas, de reflexiones, de búsquedas de experiencias, y habían cuajado en un texto de casi cuatrocientas páginas, de las cuales más de 60 eran referencias bibliogáficas utilizadas en la redacción del informe final.
La dedicatoria del trabajo es elocuente: “Esta tesis está dedicada a todos los animales no humanos que sufren; y a aquellos de mis hermanos animales no humanos que, sin sufrir, forman también parte de mi mundo”. Y, dirigiéndose a ellos, dice: “Vosotros estáis entre aquellos que dan sentido a mi vida”
Desde el Arte, el Derecho, la Filosofía, la Ética, la Política y la Pedagogía, Beatriz había elaborado un rico y apasionado discurso que se dirigía con rigor a las mentes, pero que también pretendía alcanzar el corazón de los futuros lectores y de los oyentes que escuchábamos su exposición.
Yo abogo por tesis que aborden temáticas que contribuyan a la mejora de la sociedad. No me gustan tanto (aunque cualquier tema de estudio me parezca respetable) los ejercicios de diletantismo sobre cuestiones (¿cuál es el sexo de los ángeles?) que solo tienen como objetivo el alcanzar un título pero que en nada puede afectar a la transformación de las personas y de las sociedades. No hay conocimiento útil si no nos hace mejores personas.
Conozco un caso en el que un miembro del tribunal preguntó al doctorando para qué servía la investigación que había realizado durante tanto tiempo y con tanto esfuerzo. La contestación no tardó en llegar, de boca del mismo doctorando: Para nada.
En este caso se pretendía argumentar por qué y cómo había que evitar a toda costa el maltrato de seres no humanos sintientes, sea para experimentación, recreo o capricho y, sobre todo, por qué y cómo despertar y cultivar la empatía con los animales no humanos a través del curriculum escolar.
Eso exige, según la autora, la necesidad de formar docentes empáticos ya que nadie puede dar lo que no tiene. Permítaseme repetir una vez más: El ruido de lo que somos llega a los oídos de nuestro hijos y alumnos con tanta fuerza que les impide oír lo que decimos.
Recuerdo que la familia de una amiga de mi hija recibió del Colegio una carta informando de que su hija había pisado y aplastado una lagartija en el patio de recreo. No sabían los profesores que el padre de la criatura tenía en el sótano de la casa un enorme museo con piezas de caza mayor disecadas que eran el fruto de sus frecuentes cacerías a África.
Para mejorar la calidad moral de la sociedad es necesario superar una visión especista que considera a los animales no humanos como cosas que se pueden usar y tirar. Hay que acabar con tanto sufrimiento gratuito ya que los animales no humanos son seres sintientes que merecen respeto y cuidado. Hace unos minutos acabo de escuchar en la televisión las palabras del alcalde de Tordesillas tachando de “terrorismo social” el intento de prohibir el Torneo del Toro de la Vega. Qué barbaridad. Terrorismo es divertirse con el sufrimiento (hasta no hace mucho también la muerte) de un animal inocente en la vega del río Duero..
No es el momento de plantear las exigencias técnicas que ha de tener una investigación doctoral. El tribunal calificó el trabajo con sobresaliente y dejó, como es preceptivo, la concesión del cum laude al resultado de la votación secreta de los miembros del tribunal. Solamente citaré la primera de sus diecisiete conclusiones:
“Debemos educar en valores que incluyan a los seres vivos. Para ello podemos (debemos) partir como de un principio clave de la crítica de cualquier sociedad que participe del especismo y la cosificación y construir desde aquí una alternativa”.
Al iniciar el acto académico, la prensa escrita y televisiva dejó constancia de la actividad. Hoy, en el telediario de una cadena nacional, se han destinado unos minutos a la noticia. Me parece estupendo que los medios de comunicación se hagan eco del fenómeno educativo no solo cuando se produce un escándalo, un conflicto o una agresión.
La tradicional comida que la ya doctora quiso ofrecer generosamente a los miembros del tribunal tuvo lugar en un restaurante vegano. No podía ser de otra manera. Simona también asistió. Y compartió nuestra comida de manos delDirector de la tesis, mi admirado profesor de filosofía José Antonio Méndez.
Sobre este tipo de comida he expresado alguna vez mis reservas.
No me parece razonable que los miembros de un tribunal que desde una situación de poder, hacen intervenciones duras y hasta crueles (no era este el caso, por supuesto) tengan que ser invitados a comer por quien, por razones obvias, no ha podido defenderse o replicar. No me refiero a críticas respetuosas y fundadas, claro está. No hace falta añadir que el doctorando, que ha hecho un esfuerzo económico importante para llegar al final de ese largo y complicado camino tenga que añadir un gasto notable pagando una comida en un restaurante de postín. Otra cosa sería tomarse unos vinos en la cafetería de la Facultad. El diálogo podría fluir en ese espacio igualmente sin que a uno le costase tan caro.
Mi enhorabuena a la Facultad de Filosofía de la Universidad de Oviedo por albergar esta tesis, a Beatriz por el trabajo que la ha convertido en doctora, a José Antonio por la dirección de la tesis, a Noemí y a Fran por la adopción de esta maravillosa perra y, por supuesto, a Simona por su ejemplo de resiliencia y de bondad.
Querido Maestro:
Hoy voy a ser breve, por el compromiso que he adquirido con mi ojo operado.
!Todo un éxito como vaticinó!
Me encontré en el hospital un equipo joven pero altamente profesional sencillo y muy humano. Me he sentido muy arropada.
En cuanto al texto de hoy me parece insuperable.
Le diré que el otro día me encontré un abuelo emocionado poniendo un cartel de búsqueda porque a sus nietos se le había pedido un gato, y lo querían mucho.
Hay gente buena amable de los animales.
Lo que cuenta de la perra un auténtico milagro.
Feliz y leve semana.
Besitos.
Querida Loly:
Haces bien en cuidar tu vista.Y nadie puede hacerlo por ti.
Me alegro mucho de que todo haya ido bien.
Qué hermosa historia: el abuelo tratando de recuperar el gato al que sus nietos quieren como un miembro más de la familia.
Sí, hay personas que quieren a los animales, los respetan y los cuidan. Son admirables
Todos deberíamos imitarlas.
Besos, que mejores y gracias porque, a pesar de tu situación visual, no hayas interrumpido la costumbre de leer y de escribir en este blog.
Feliz semana.
MÁS
Buenas Miguel Ángel!
Emotivo y muy interesante.
Aquí en casa, tienes a la parroquia muy contenta ya que son del club lechuga precisamente por empatía animal. De las 4 de casa, tres son veganas y yo Flexivegano.. (todavía amamanto al cromañon que llevo dentro)
Gracias a la LOMLOE, por primera vez entre los fines del sistema educativo, se incluye la formación en valores que favorezcan “el respeto hacia los seres vivos y los derechos de los animales”.
La educación integral incluye la empatía y el respeto hacia todos los animales incluso los humanos aunque a veces quede un poco disimulado.
Nos encantaría poder leer la Tesis. Sabes si la va a publicar? 0 donde conseguir el pdf.
Con la ilusión de vernos pronto
Un fuerte abrazo animal.
Os Queremos
Querida familia:
Así que tienes tres personas veganas en la casa. Eso supone que tú también lo tienes que ser en muchas ocasiones. Así te contabilizo como uno más.
En la tesis se hizo mención de la LOMLOE. No podía ser de otro modo.
Te voy a mandar el pdf del texto. No nos enviaron el documento en papel. Hay que ahorrar papel.
A ver si cerramos nuestra cita.
UN gran abrazo osuno.
Gracias por la lectura…¡y por la escritura!
MÁS
Una verdadera acción llena de empatía desde su simiente, es hora de mostrar amor a los alumnos, interés, preocupación, amor propio, amor por el de al lado y sobre todo respeto por la vida. Instituciones donde un docente tiene 520 estudiantes a su cargo no le puede estar enseñando estos valores, una institución que hace esto con sus docentes, claramente no son los estudiantes su preocupación, su alumno es sólo un número y lo personal se perdió, que pasó con el VERDADERO SENTIDO DE LA ENSEÑANZA PARA LA VIDA. Nos hemos alejado mucho del verdadero resultado y del camino de dejar huella positiva en una vida … Que Dios… La Madre Naturaleza y El Universo NOS PERDONE!
Querida Sonia:
Gracias por tus hermosas palabras.
Este mundo es la casa de todos los seres vivos.
Tenemos que hacer una casa en la que no haya maltrato y, más aún, en la que la empatía con los animales (con los humanos también, por supuesto) sea la exigencia ética insoslayable.
Tenemos que educar para la empatía.
Besos.
MÁS
Que interesante artículo Dr. Santos Guerra.
Me doy cuenta que la gran variedad de temas que abarcan sus artículos, es lo que me tiene pegado e interesado en lo que cada semana publica y esperando cada nuevo libro que saca a luz pública.
Siempre me han gustado los animales no humanos, pero fue hasta que me casé que en verdad les día la importancia que siempre debierían haber tenido siempre. Cuando nació mi niño, que es un amante de los animales no humanos, me hizo redireccionar el respeto y amor hacia ellos. En mi caso, nunca pensé que cambiaría mi forma de ver a los animales no humanos, hasta que con cariño y ternura me enseñaron que también sienten, que también sufren y también luchan por cuidar lo que es suyo. En el encierro por la pandemia, nuestras mascotas fueron nuestro escape, al encontrar siempre en ellos una compañia amigable y cariñosa; estrechamos aún más el vínculo que nos unía a ellos y reafirmamos el hecho de que son seres maravillosos que nos enseñan amar sin prejuicios, ni malas intenciones.
Aplaudo que una tesis doctoral trate este tema y que ayude a cambiar el paradigma académico. Deberíamos enseñar más temas relacionados con el cuidado de los animales no humanos en las escuelas, eso también es formación valoral y moral, para mejorar la convivencia en este mundo que no solo es de los humanos, sino de todos los demás seres vivos.
Saludos cordiales.
Estimado Misael:
Es cierto que durante la pandemia los animales no humanos desempeñaron un papel de extraordinaria importancia. Pero también lo hacen en circunstancias normales.
La tierra es la casa de todos los seres vivos. Los animales humanos no son cosas que se pueden usar y tirar. Y, sobre todo, hay que evitar el maltrato.
El espectáculo de los toros es un ejemplo de barbarie. Miles de personas reunidas para disfrutar del sufrimiento y la muerte de un animal inocente. A mi hija le regalé un cuento que se titula FERDINANDO EL TORO. Un cuento que habla de un toro manso que es elegido para una corrida y, como es manso y no embiste, es devuelto a la dehesa.
Comparto contigo la idea de que el curriculum debería incorporar estas cuestiones porque eso permitiría que pudiésemos construir un mundo mejor. Esa es la idea central de la tesis sobre empatía animal.
Muchas gracias por tu estupendo comentario.
Un abrazo.
MÁS
Magnífica experiencia.
Es imprescindible hacer algo para acabar con el maltrato.
Ahí tenemos estos días el caso del Toro de la Vega.
¿Cómo se puede mantener ese espectáculo que consiste en divertirse a costa del sufrimiento de un animal?
El alcalde que califica de terrorismo social podría ocupar el lugar del toro, a ver qué le parecía la risa.
Saludos.
Querida Raquel:
No todas las tradiciones son respetables. Las escenas del espectáculo son bochornosas. Ver al pobre toro alanceado (en otros tiempos muerto) para la diversión de la gente me parece inadmisible.
Tordisellas sería conocida, si se acabase con esa barbarie, por la dignificaci´çon de la convivencia.
Me parece muy sugerente tu propuesta sobre el alcalde.
Besos.
MÁS
Querido Miguel Ángel:
Tu amor por los animales es conocido, la Miluca forma parte de la familia y Carla tuvo y tendrá, creo, un gran amor por los caballos.
Bien sabes lo que pienso yo de los animales. Lo que pienso al respecto es que nunca los animales pueden ser objeto de maltrato para divertirse o para ver cómo reaccionan frente a la crueldad humana, como cuando los muchachos pegan fuego a un gato para ver qué hace. Pues como es un ser sintiente hace lo que haríamos nosotros en esa situación.
Para mí, las corridas de toros, con el cruel sacrificio del animal, es algo inhumano, troglodita, propio de una sociedad primitiva y tenerlo como fiesta nacional, qué vergüenza!!! Ya dije una vez que para mí es la VERGÜENZA NACIONAL.
Lo del Toro de La Vega, otra crueldad semejante, gratuita.
Personalmente entiendo que los toros, los cerdos, los conejo, pollos y todo el sin número que vemos muertos en los mercados sean para nuestra alimentación, pero nunca sacrificados por diversión. Y ahí también me opongo a la caza por diversión, no por otras razones.
Los corazones que aman, aman a toda la naturaleza y saben discernir el abuso y la crueldad de las prácticas razonables de control.
Un abrazote y saludos a todos.
Querido Joaquín:
No me ha sorprendido en absoluto tu comentario. Conociéndote no podía esperar otra argumentación.
No se puede plantear una disyuntiva: o amas a los animales no humanos o a los humanos. Lo que suele pasar es que quien ama a unos, ama a otros.
Y en ese sentido, lo primero que hay que hacer es evitar tanto maltrato, tanto dolor, tanta destrucción…, fruto de una visión especista de la sociedad que considera a los animales cosas de usar y tirar.
Pero hay más y es lo que plantea Beatriz en su tesis: educar para la empatía animal. La presencia de Simona (una perra que yo conocía desde hace años) fue un hermoso símbolo..
Miluca disfruta de nosotros y nosotros disfrutamos de ella, Carla dice que es el mejor regalo que ha recibido de nosotros.
Los caballos han sido para Carla seres maravillosos.
UN gran abrazo, querido amigo.
Muchas graias por estar siempre ahí.
MÁS
La experiencia ha tenido que ser fantástica. Ver allí a Simona ha sido un testimonio excelente de EMPATÍA ANIMAL.
Nada más elocuente para hacer visible la idea central de la tesis.
Gracias por compartir la experiencia.
Estimado Juan:
Pue sí, fue emocionante.
Yo ya conocía a Simona y a sus dueños. De hecho, tengo alguna fotografía con ella.
Creo que el tema de la tesis es innovador y necesario.
Todavía nos hace falta recorrer mucho camino hasta hacer de este mundo una casa feliz para todos los seres vivos que lo habitamos.
Gracias.
Un abrazo.
MÁS
Me hubiera gustado asistir a esa tesis,
Quiero felicitar al Departamento, al Director, y a la Doctoranda.
Y agradecer a los miembros del tribunal su actitud abierta, flexible y sensible.
Estos ejemplos nos hacen avanzar en la buena dirección.
Grzacias.
Gracias por tu sensibilidad.
No me cabe la menor duda, por tus palabras, de que eres una persona que amas a los animales.
Creo que la educación tiene que hacerse eco de esta necesidad apremiante: hay que cultivar la EMPATÍA ANIMAL.
TODAVÍA NOS QUEDA MUCHO CAMINO POR RECORRER.
Lo primerito de todo es quer nos comprometamos a eliminar el maltrato.
Besos.
Gracias.
MÁS
Tu historia me produce muchas emociones. Da el verdadero sentido de la vida docente. No hay otro artículo que pueda tocar mis sentimientos como el tuyo.