En plena tarde de Jueves Santo, acabo de levantarme del asiento, después de impartir una conferencia para el Centro de Formación Os Templarios, de Portugal. Una conferencia a la que han asistido docentes de las ciudades de Tomar y Abrantes. He bajado las escaleras para llegar al país vecino y luego las he subido para incorporarme a la vida familiar. Una forma de trabajo impuesta por la pandemia. He hablado sobre evaluación de los aprendizajes. Las familias, que acaban de recibir informes de evaluación de sus hijos e hijas, pueden tener interés en algunas de estas consideraciones.
En la escuela se evalúa mucho y se cambia poco. Algo falla. Eso quiere decir que no se practica la evaluación como una estrategia de comprensión, de diálogo y de mejora sino como un simple instrumento de medición, de selección, de comparación, de clasificación y de control.
Está claro que la forma de hacer la evaluación condiciona el modo de aprender. El profesor Juan Ignacio Pozo Municio, catedrático de Psicología Básica de la Universidad Autónoma de Madrid, especialista en psicología del aprendizaje, afirma que se le podría decir a cada docente: dime cómo evalúas y te diré de qué forma aprenden tus alumnos y alumnas. Tiene razón.
La evaluación condiciona el proceso de enseñanza y aprendizaje. Un proceso de evaluación pobre, propicia un proceso de enseñanza y aprendizaje pobre. El conocimiento que se adquiere en la escuela tiene valor de uso (por tantos motivos discutible) y valor de cambio. Es decir, que si demuestras que lo has adquirido, te lo canjean por una nota, por un certificado. Y el modo de obtener ese certificado es el éxito en la evaluación.
Desde que la investigación hace hallazgos sobre el aprendizaje y la evaluación hasta que se generaliza su implantación en las aulas pasa demasiado tiempo. Estoy viendo preparar a mi hija unos exámenes al estilo más clásico, aprendiendo datos y fechas “para el examen”. “Esto entra”, “esto no entra”. Si no entra, no merece la pena ni ser leído. Y me dice que si hay variaciones en las respuestas respecto a lo que dice el libro, no conseguirá una buena nota. No la veo disfrutar estudiando. No sucede lo mismo con los hallazgos de la ciencia en otros campos del conocimiento. Si se descubre esta tarde un abono eficaz para el crecimiento de los tomates, la comercialización generalizada es inmediata.
Me preocupa mucho que el modo de evaluación imperante siga siendo el de repetir fielmente lo que el alumno lee en el libro o lo que escucha al profesor.
Le oí decir en cierta ocasión a una profesora:
- Atención, esto es muy importante. Tenéis que aprenderlo de memoria para el examen. Bueno, y si alguno no es capaz de aprenderlo de memoria lo puede decir con sus propias palaras,.
Creo que en este planteamiento hay un grave error. Es más difícil decirlo bien con las propias palabras, creo yo. Es más fácil aprenderlo de memoria. Lo que debería decir la profesora es lo siguiente:
- Si alguno no es capaz de decirlo con sus propias palabras, que lo diga como un papagayo repitiendo lo que dice el libro. Aunque no entienda lo que dice.
Dice Doyle que en un aula puede haber tareas de memorización, algorítmicas, de comprensión, de análisis, de comparación, de opinión, de creación. Cualquier lector o lectora me diría que estas tareas están ordenadas por orden inverso a su complejidad intelectual. De menos a más y todas necesarias. Pero si preguntase de cuál hay más en los exámenes, probablemente se me diría que hay más de las menos complejas, de las menos ricas. Con lo cual se mostraría que se están favoreciendo con la evaluación las tareas intelectuales más pobres.
Acaba de editarse un libro en Chile del que he tenido el honor de escribir el prólogo. Se titula “Estrategias para desarrollar habilidades de pensamiento en la Educación Superior”. Lo coordina, entre otros, mi antigua alumna Margarita Aravena Gaete. Los diversos autores y autoras explican cómo trabajar estrategias para desarrollar el pensamiento complejo: la simulación, el diálogo, la comparación, el pensamiento crítico, el aprendizaje basado en problemas… Interesante aportación que puede ser aprovechada en otros niveles del sistema educativo.
Cuando de lo único que se trata en las evaluaciones es de repetir, sin garantizar que se haya comprendido, es fácil que se instale en la enseñanza y en el aprendizaje un pobre y aburrido mecanismo de reproducción. Lo cual da pie a disparates que, conocidos en superficie, dan risa pero que, analizados en su fondo, producen tristeza y preocupación. He de reconocer que, en algunos, no falta ingenio.
Tengo, al respecto, un anecdotario interminable. Hace poco me contaban que sobre un pentagrama el profesor había dibujado las notas de la escala musical. La pregunta era: Escribe el nombre debajo de las diferentes notas. El alumno había puesto su propio nombre debajo de las siete notas de la escala musical. Se había escabullido hábilmente de la demanda.
Hace unos días me ha llegado un mensaje con un examen de química en el que se le pregunta a un alumno por fórmulas diversas. En una de ellas se enlazan dos símbolos del cobre: Cu, Cu. Imagino al torpe o al divertido alumno, escribiendo a continuación en el espacio de la respuesta: cantaba la rana.
Me lo contaron en Chile. A un alumno se le pregunta en un examen de ciencias a qué se refiere la sigla ATP. En lugar de responder adenosín trifosfato, un nucleótido fundamental en la obtención de energía nuclear, escribe lo siguiente: Asociación de Tenistas Profesionales, sigla que le es mucho más familiar.
En otras ocasiones, el desconocimiento de la respuesta solicitada lleva al evaluado a buscar subterfugios para llegar a donde tiene algo que decir. Un alumno se estudia un solo tema de Ciencias Naturales, con la esperanza de que la suerte le favorezca: los gusanos. No es así. Porque el evaluador le pide que hable de los elefantes. El alumno, profundamente decepcionada pero aparentemente tranquilo, responde:
- Los elefantes son unos animales muy grandes, que tienen cuatro grandes patas, unas orejas enormes que casi les llegan al suelo, dos colmillos de marfil y una trompa en forma de gusano… Y los gusanos se dividen en…
Como digo, el anecdotario, es infinito. Hace años se publicaron varias antologías del disparate. Para reír y para pensar profundamente.
Un profesor de religión pregunta a un alumno:
- ¿Cómo mató David a Goliat?
Sorprendido por la pregunta, sin tiempo para pensar, contesta precipitadamente:
- ¡Con una moto!
- Pero, por favor, dice el profesor, ni siquiera existían entonces las motos.
El profesor repite la pegunta al compañero de pupitre.
- ¿Como mató David a Goliat?
Este, más atento, estudioso y aplicado, contesta.
- Con una honda.
- Muy bien. Se ve que has estudiado, dice el profesor.
El compañero, cariacontecido y enfadado dice a media voz:
- Qué injusticia, a mí me suspende solo por no saberme la marca.
Cuando aprobar se convierte en un objetivo más importante que aprender, lo único importante es el resultado. Y para conseguir un buen resultado, vale todo. Recuerdo la historia de una alumna a la que su madre ve la palma de la mano completamente llena de diminutas letras de bolígrafo. Sabedora de que su hija tiene un examen, no tiene la menor duda de que aquellas microscópicas líneas son una “chuleta”. Cuando le pregunta qué lleva escrito en la mano, la niña se mira la mano y, con un gesto de enorme asombro, dice:
- No sé. Me habré apoyado en un libro sin darme cuenta.
Estrategias tramposas que buscan el éxito. Más irracional aun es rezar para alcanzar del favor divino un aprobado. Así rezaba una perezosa adolescente:
– Señor, por favor te pido que Felipe II sea hijo de Carlos V. Es lo que he puesto en el examen.
Es preciso reflexionar sobre la naturaleza y el sentido de la evaluación. Eso han hecho esta tarde los esforzados docentes portugueses. Después de hacerlo, es necesario tomar las medidas necesarias para enriquecerlo y convertirlo en un instrumento de mejora de la enseñanza y del aprendizaje. Tendríamos que hacer una evaluación educativa, es decir, que eduque a quien la hace y a quien la recibe.
Hay muchas cosas que mellaban la atención del estupendo artículo que acabo de leer en esta mañana de Viernes Santo.
– Que los profesores y profesoras de Portugal estén trabajando para su formación en una fecha como esta.
– Que, por lo que se dice en el artículo y por lo que vivir y sé, la evolución todavía esté arraigada engranes deficiencias.
– Las simpáticas anécdotas que se cuentan, que me han hecho sonreír y que son tan significativas.
– Lo mucho que tenemos que avanzar hasta conseguir una buena calidad del sistema educativo.
Un fuerte abrazo.
Y feliz Viernes Santo a todos y a todas.
Estimado José Luis:
En primer lugar, quiero aclarar por qué aparece hoy el artículo y no el Sábado Santo. En realidad ha venido siendo así en los 17 años de colaboración con el periódico La Opinión de Málaga. El Sábado Santo no hay prensa escrita. Por eso, algunas veces el artículo ha salido el domingo o el lunes. Pero ayer me llamaron para que enviare el artículo para el viernes.
Imagino que la mayoría de lectores y lectoras entrarán mañana para verlo.
Gracias,José Luis, por la lectura y por escribir.
Fue una experiencia hermosa la de ayer. El tema de la evaluación tiene mucha importancia porque condiciona ido el proceso de enseñanza y aprendizaje.
La colección de anécdotas de que dispongo es interminable. Unas vividas, otras oídas, otras leídas.
De todas se puede hacer su moraleja.
Tenemos, como dices, mucho que mejorar.
UN ABRAZO.
Muchas gracias.
Feliz Semana Santa.
MÁS
Hola Miguel Ángel.
He entrado por casualidad a ver si había algún comentario más en el artículo de la semana pasada (por si se había animado José Antonio o algún que otro comentarista habitual…) y me he encontrado hoy viernes tu entrada semanal, no sé si ha sido un fallo de programación temporal en el blog o que simplemente la has adelantado…
Te decía la semana pasada que cuando uno no domina un tema es mejor callar y aprender, pero en el tema de la evaluación sí que tengo, al menos, experiencia para opinar, otra cosa es que sepa llevarla a la realidad…
Es cierto que, desgraciadamente, la memorización es lo que impera en la mayoría de los exámenes que diseñan los docentes. Y me da la impresión que cuanto más alta es la etapa educativa en la que nos encontremos, más aún… Afortunadamente para mí, en Educación física, no hago que mi alumnado tengan que memorizar nada, en otros tiempos, sí que lo hice, aunque en aspectos muy testimoniales…. No obstante, hasta en Educación física existe la repetición, en este caso de gestos técnicos para llegar a automatismos motrices. Dicen que es menos rico este aprendizaje que cuando se realiza de una forma menos reiterativa y dejando libertad al alumnado en sus respuestas motrices…
Podemos preguntarnos por qué se produce este nexo causal (tema al que te referiste la semana anterior) entre la forma de evaluar el profesorado a su alumnado. A mí se me ocurren varias respuestas:
1ª Al profesorado le es más fácil diseñar una prueba y corregir (controlar) las respuestas que dan su alumnado a la misma.
En este caso se podría hablar de comodidad, es posible, pero quizás también de desconocimiento. Y esto me hace buscar un segundo nexo causal…
2º Posiblemente desconozcan la forma de diseñar instrumentos para poder evaluar los diferentes ámbitos cognitivos a los que haces alusión con Doyle y que no deja de reflejar distintos aspectos contemplados en la taxonomía de Bloom.
No es fácil diseñar pruebas para valorar las tareas intelectuales más ricas y menos aún la forma de interpretar los resultados. Con ello llego a otro nexo causal…
3º ¿Quién forma a los formadores?
Está claro que lo más fácil para un docente es repetir la forma de aprender y enseñar que ha ido recibiendo a lo largo de su vida como estudiante. Ha tenido un modelo repetido durante muchos años. Este modelo debe ser aniquilado, corregido o completado con otros modelos diferentes. Y esos modelos diferentes deberán ser enseñandos en las escuelas de magisterio (perdona, en las facultades de educación, me traiciona el subconsciente). Ya sé que en tu caso has pasado por todas las etapas educativas como docente, pero me da la impresión que eso no es lo habitual en la actualidad. Un avanzado alumno universitario, realiza su doctorado y entra como profesor doctor contratado por una universidad y eso le otorga de forma “mágica” una preparación adecuada para formar a los futuros docentes. Busco otro nexo…
4º. ¿El Plan de Estudios de las facultades de educación está al día con las corrientes pedagógicas innovadoras del momento? Si en el grado de maestro lo dudo mucho y son cuatro años de formación, ya no te cuento lo que puede aprender el que hace el master de secundaria para dar clases en un instituto (una de mis hijas está en ello)…
Como editor de revista, recibo artículos del mundo universitario, algunos de ellos de profesorado de ciencias de la educación, y veo sus propuestas didácticas (unidades, sesiones…) y dejan mucho que desear…Y precisamente no están en la vanguardia.
También veo otras propuestas innovadoras y vanguardistas tan complejas que son inasumibles en primaria. Y resulta contradictorio que el formador de primaria prefiera plantear unidades para secundaria en donde se ponen en acción metodologías activas y competenciales, ¿por algo será…?
5º Referido a lo que tu hija Carla y la mía, también Carla, se tienen que aprender del libro y lo que no. Esto ya empieza por un sistema de oposiciones a maestros en donde de 25 temas te salen tres bolitas para que el futuro maestro elija una y lo desarrolle. Eso supone, y está comprobado matemáticamente, que dejándote algunos temas sin estudiar tienes un alto porcentaje de probabilidades de que te salga uno de los que te has estudiado. Un opositor a maestro debe estudiar todos los temas, no puede haber “trampas” en una formación. Y desgraciadamente también, el futuro maestro tiene que aprender en una academia todo aquello que la facultad no le ha enseñado.
Seguro que hay más nexos causales, pero ahora sólo se me ocurren éstos. Ya sé que pueden ser arbitrarios, pero creo que la realidad los respalda.
Disfruta de lo que resta de Semana, Santos…
Un abrazo.
P.D. Cu cú, debajo del agua….
Querido Juan Carlos:
He explicado a José Luis (primer comentarista de hoy) la causa de que aparezca hoy el artículo y no mañana. El Sábado Santo no hay prensa escrita.Ayer me llamaron del periódico donde sale el artículo y me pidieron que lo enviara para hoy. Podía haberlo dejado para el domingo o publicarlo hoy en papel y hacerlo visible en el blog mañana. Decidí publicarlo en el blog el mismo día que aparecía en el periódico de papel. Esa es la explicación. Solo hay tres días sin prensa escrita: Sábado Santo, 25 de diciembre y 1 de enero.
Seguro que tienes opinión sobre todos los temas. Ya ves, ahora haces referencia a los nexos causales (bastante rigurosos, por cierto)-
Sobre el tema:
Me preocupa mucho. De mis 80 libros, hay 12 sobre evaluación. Y cada vez tengo más preguntas.
Tienes razón en tus explicaciones, creo yo.
Y es verdad que en algunos niveles se hace mal porque en los niveles siguientes se va a seguir haciendo así para tener éxito. En lugar de preparar para la guerra, ¿por qué no acabamos con la guerra?
También influye el hecho de que con unas pruebas objetivas es más fácil explicar a la inspección o a las familias que el resultado es incuestionable.
Bueno, querido amigo, mi hija me reclama para llevarla al centro.
Tengo que dejarte.
Felices días de Semana Santa.
Gracias de nuevo.
Un abrazo.
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En qué he sido riguroso ??
Querido Juan Carlos:
Pues creo que has hecho afirmaciones cargadas de lógica y fundadas en la experiencia y en una argumentación clara:
– Se puede afirmar (y creo que la investigación podría confirmarlo) que es más fácil elaborar una prueba y controlar el resultado que hacer una evaluación continua y cualitativa.
– Hay pruebas que falta formación para elaborar instrumentos que permitan evaluar con rigor capacidades intelectuales complejas.
– Es cierto, a mi juicio, que la formación de formadores es clara y ampliamente memorable.
– El Máster de Secundaria no es un marco suficientemente ambicioso para conseguir una buena formación de los docentes de ese nivel de enseñanza tan complejo.
– Es cierto que para el profesorado es más fácil repetir las rutinas que innovar.
Quiero decir con estos ejemplos que has hecho afirmaciones que tienen un apoyo experimental y argumental claro y preciso.
Un cordial saludo, querido jienense.
MÁS
Pensé que al decirme que había sido riguroso es que me había pasado cuatro pueblos en mis opiniones…
No entendí bien tu comentario al respecto…
Gracias por tu explicación querido leonés malagueño… 🙂
Querido Juan Carlos:
Hablando se entiende gente.
¿Qué hubiera pasado si hubieras preguntado por lo que había querido decir? Y yo me hubiera quedado tan tranquilo.
Tus críticas son fundadas, a mi juicio, y están expresadas sin acritud. Con respeto y afán de mejorar.
Yo veo muchos problemas en la formación de los formadores.
Y uno de ellos lo planteas con brevedad y contundencia: ¿Quién (y cómo) forma a los formadores y formadoras?
Un abrazo en Sábado de Gloria.
MÁS
Foi um prazer emocionante ouvi-lo ontem! Somos muitos a sentir que avaliar não é classificar, memorizar, seriar…mas o caminho para sair dessa zona de conforto é longo ainda! O processo de flexiblidade curricular tem pouco mais de três anos e veio demonstrar que os processos de avaliação, como parte integrante do triângulo de ensinar-avaliar-aprender em sala de aula exigiam reflexão e alterações, algumas urgentes, se não queremos que escola se torne numa obrigação sem significado real. A escola é para os alunos, para os ajudar a crescer! Não é um depósito de jovens onde lhes tentamos encher cabeça de coisas mais ou menos importantes até poderem ir fazer ouyta coisa qualquer.
A onda está a crescer e sou otimista! Vamos conseguir mudar para ajudar os nossos alunos a melhorar! Cada vez mais professores procuram e desejam estas alterações. Depois de ontem temos ainda mais “convertidos” 🙂
Nota: a assistência era essencialmente de Escolas de Tomar, Ourém e Ferreira do Zêzere. Abrantes era para ter sido no ano passado, mas foi cancelado.
Feliz Páscoa!
Até breve, espero!
Querida Judite:
Muchas gracias por la invitación de ayer.
Me hubiera gustado seguir participando en el evento, primero escuchando las experiencias y después aprendiendo de mi querido amigo Domingos Fernández.
Hermosa iniciativa que muestra la interés por mejorar de muchas comunidades educativas y de muchos docentes.
Sabes que me hubiera gustado disponer de más tiempo para conversar con los asistentes, pero el tiempo es limitado y la jornada era muy extensa.
Fue un placer verte en pantalla y escuchar tu voz.
Gracias por acceder al blog, por leer este artículo y por tu estupendo comentario.
Yo también soy optimista respecto a la mejora.
Muchos profesores y muchas profesoras están muy comprometidos con su tarea.
Gracias por el ejemplo que ma brindásteis ayer.
Besos.
MÁS
Miguel Ángel, como siempre tus artículos son una invitación a la reflexión.
Ahora me sirven conceptualmente. Ya no las puedo aplicar.
Yo, referente a la evaluación, solo entiendo la evaluación continua, a través de la cual se ve el progreso del alumno. Las contestaciones memorísticas, sin su comprensión, no es necesario decir que es una perdida de tiempo.
Para evaluar debemos tener criterios bien formados. Personalmente me preocupa la evaluación que hacen de mi los que me son cercanos. No es una evaluación pedagógica, pero no deja de ser una evaluación.
También me preocupan las evaluaciones que socialmente se hacen sobre los acontecimientos de actualidad: hay quien evalúa el covid19 por el dinero que hemos dejado de ganar; otros, por las vidas que hemos perdido.
Bueno, son otras evaluaciones, pero no dejan de serlo.
Querido Miguel Ángel, si algo importante me ocurriera, te informaría o te informarían. El día 7 por fin me vacunan.
Gracias, como siempre, por tus reflexiones.
Saludos a todos.
Querido Joaquín:
Me alegra mucho saber que te vas a poner a salvo de la pandemia. Ya era hora. Yo no tengo noticias todavía.
Me toca esperar.
En cuanto a la evaluación me gusta hablar de la que es INVISIBLE (no genera ansiedad), CONTINUA (no se hace al final), AUTÉNTICA (encaminada a la mejora) y EDUCATIVA (que educa al que la hace y al que la recibe).
Ha de ser también RIGUROSA Y JUSTA.
Evaluamos constantemente. Y somos evaluados.
No solo se evalúa en la escuela, como dices.
Y me parece muy bien tu llamada atención para que hagamos evaluaciones racionales y justas.
Un gran abrazo.
Feluz Semana Santa.
Y gracias.
MÁS
Muy buenas Miguel Ángel!
Jeje..alguien se ha adelantado un día…y no quiero señalar. Para nuestro amigo Kant, un hombre de costumbres fijas, hoy sería domingo.
Fenomenal artículo y excelente tema la evaluación. Fué de los primeros que me impactaron escucharte en directo, una experiencia en la tercera fase.
Somos como evaluamos?
La evaluación como aprendizaje es uno de tus libros que más me marcó, he prestado y regalado a docentes. No he encontrado vía más rápida para cambiar un centro y que entre la innovación. Ese libro está bendecido por la Meigas o tiene baraka..no sé, ya me dirás. Por cierto, campeón, has sido injusto al no mencionarlo en tu artículo…aunque no llegaré al clásico “no te lo perdonaré Carmena”
A muchos nos encantaría saber cuándo bajas las escaleras para “viajar” y poder escucharte aunque sea on line. Podrías avisar enviando enlace por wassap (haciendo un grupo de Santos Guerreros) con un envío nos llega. En caso de duda tecnológica,preguntar a Carla, yo lo hago con mi hija también.
Gracias por el humor que nos ha hecho recordar muchas anécdotas. Desayunar con una sonrisa no tiene precio.
Antes de pasar a la nube o ponerme el pijama de madera me encantaría ver a nuestra inspección educativa exigiendo una evaluación como aprendizaje. Lo llegaremos a ver…. Dios dame paciencia…..pero Ya!
Un inmenso abrazo al completo de ésta familia también Guerrera.
Abrazos.
Ya queda menos para poder vernos!!
Querido Miguel/Querida Gema:
Hay tres días en el año que no tienen prensa escrita: Sábado Santo, Navidad y Año Nuevo. Es un acuerdo, no sé si escrito, que se viene aplicando desde hace muchísimos años. Una tradición de la prensa.
Al no haber periódicos el sábado, me pidieron que enviase el artículo el jueves (para publicar el viernes en el periódico) y decidí que apareciese también en el blog, aunque podría haber esperado al sábado para colgarlo en el blog.
Alguna vez se ha publicado el Domingo o el lunes de Pascua.
No ha habido confusión sino adecuación a la costumbre de la prensa.
Yo también me sonrío con tus comentarios. Tienes chispa para provocar incendios cotidianos.
Y siempre con mucha razón en el fondo de lo que dices, como cuando hablas de la innovación eficaz que supone transformar la evaluación en su racionalidad y en su justicia.
El libro La evaluación como aprendizaje tiene su historia. Se ha editado en Argentina (Ed. Bonum), en Portugal (Ed. ASA) y dos veces en Narcea. Cuando digo su historia me refiero al título porque la palabra diana (“una flecha en la diana”, o “cuando la flecha impacta en la diana”) no tiene equivalente en Portugal o en Argentina. Allí Diana, solo es la diosa Diana. Y a nuestra diana le llaman blanco.
Por eso en Portugal se tituló Uma flecha no albo. Y en Argentina Una flecha en el blanco, como subtítulo.
Gracias por tu valoración de su contenido.
No sé a qué velocidad avanzamos.Porque lo que estoy viendo con los exámenes de Carla me hace temblar.
A ver si te mando algún enlace. El 21, si mal no recuerdo, tengo una conferencia en Navarra sobre atención a la diversidad.
Un gran abrazo en el que quepamos las dos familias.
Y gracias, amigos.
MÁS
Querido Maestro!
Hoy me he dormido en los laureles como se suele decir!
El tema de la evaluación al que ha presentado súper bien , es muy complicado a mí entender.
A mi me parecería más justo tener en cuenta el resultado global de las actuaciones del alumno y no la de una prueba.
Hay casos y anécdotas que hacen duro creer que se debe sentenciar a una persona por una evaluación o un examen.
Una vez presencié como en un principio de curso se le había puesto a un alumno el signo de vacío o lo que es lo mismo que no tenía posibilidades.
La dureza de aquel agravio comparativo permanece aún en mi memoria.
También y de signo contrario se de grandes personas que con su hacer y decir ayudan a los alumnos a seguir adelante en la consecución de sus sueños.
Hay de todo en este mundo de la educación!
Y pasa igual en la vida familiar.
Te evalúan, te critican , te suspenden cuando tú no vas al compás de los demás.
Cuando tienes tus propios criterios y por encima de todo está tu dignidad y tú salud mental.
Estoy muy agradecida a sus benditas palabras en comentarios anteriores que siempre me dan un montón de fuerzas y esperanzas para seguir viviendo.
Creo que después de tantos años colaborando me va conociendo.
Permítame también opinar que tiene una hija con un gran corazón y una madurez excepcional que quiere a su padre de verdad.
Y con esas cualidades seguro que será una persona con una gran honestidad y lealtad y que le encantará estudiar.
Y ya para terminar decir, que yo con una vez que lo oí me enganché a su manera de pensar, les pasará lo mismo a todos los que escuchen sus ponencias.
Sin más por hoy, me despido hasta la próxima, deseando que hayan pasado y disfrutado de esta semana Santa diferente.
Besos y abrazos cordiales para todos.
Querida Loly:
Tú nunca te duermes.
Llegas siempre a tus compromisos, como es el
caso de este sábado.
Tienes experiencia de evaluadora. Y cuentas una experiencia de las que verdaderamente inquietan. Me refiero a esas descalificaciones
que se producen desde el principio y que se convierten en una condena para el alumno.
Eres una magnífica y eso
te hace ver a las personas desde la bondad de tu corazón.Así ves a mi querida Carla.
No sé si conoces mi libro EVALUAR CON EL CORAZÓN. Creo que es muy importante pensar que evaluamos a personas.
Tú me escuchaste una sola vez y la semilla creció. Eso habla sobre todo de la calidad de la la tierra que recibe la semilla.
Feliz fin de esta Semana Santa tan especial.
Espero que te vacunes pronto para estar a salvo estar a salvo.
Besos.
Y gracias por tu perseverante fidelidad
MÁS
Hola Maestro.
Me ha encantado ,como padre, como da en la diana en este tema tan delicado de la evaluacion y que tantas y tan variopintas opiniones genera entre el profesorado y los propios alumnos (“me merezco mas nota” ) , y respecto a nosotros ,los padres, con nuestros hijos (” mi hijo se lo sabia, y le ha puesto menos de lo que aparece en el famoso boletin de Notas…”). .
Siempre va a ser dificil acertar y nunca nos llegaremos a poner de acuerdo los padres y los docentes porque siempre pensamos que llevamos nosotros toda la razon y nunca “son justos ” evaluando ,como bien dices, solo conocimientos, materias, temas ,fechas ,etc y no otras cosas igualmente importantes, p.ej. INTEGRACION CON LOS DEMAS ALUMNOS, APRENDIZAJE DE LA VIDA, CUALIDADES QUE HAY QUE SEMBRAR EN ESOS AÑOS TAN IMPORTANTES, y un largo etcetera.
Me gustaria que, si tuvieras tiempo , nos comentara para todos tus lectores de esta columna ,lo sucedido hace unas semanas con aquel joven docente de un pueblo de Toledo, creo, y cuyo nombre no recuerdo creo, cuyo paso por el Instituto está siendo muy comentado ,precisamente ,porque en sus evaluaciones hace sentidos homenajes a sus alumnos ,aportandoles una dosis extra de MOTIVACION, AGRADECIMIENTO, RECONOCIMIENTO DE SU TRABAJO Y ESFUERZO……….(en una de ellas le llego a poner a su alumna ” que habia sido un PRIVILEGIO haberla tenido entre sus alumnas desde que llego a él hacía cinco años y que le auguraba un futuro muy prometedor y ,sobre todo, humano en el campo de la Medicina donde queria ejercer …… …”) , y ,que , como es logico y esperable , le es doblemente correspondido por todos sus alumnos ,porque ellos mismos se ven reconocidos y animados a seguir hacia adelante en un competitivo mundo del aprendizaje gracias a esas palabras de admiracion de un docente que no se limita a poner un numero evaluador sobre un examen (él dijo en la corta entrevista que le hicieron que, para él ,eso era lo de menos, ,que lo importante era lo otro, y que lo mismo que le transmitió un docente en su día a él, él tenia la obligacion de transmitirselo a sus alumnos de Secundaria ……”porque algo seguro que calaría en sus corazones……”.
Ya le digo ,podia extenderme bastante en este docente, pero me gustaria que nos hiciera reflexionar aun mas sobre este tema y que fuera vd quien pusiera una bonita guinda a este docente y su labor diaria.
Un cordial saludo .
Jose Luis Jimenez.(Malaga)
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Querido José Luis:
Gracias por este estupendo comentario.
Y por la lectura y valoración del artículo.
Sí, los padres y las madres tenemos un importante papel en la forma de afrontar los procesos y los resultados de la evaluación.
Cuando fui director de un colegio en Madrid enviábamos a las familias una carta con los informes d evaluación. Se titulaba: CÓMO LEER EDUCATIVAMENTE EL INFORME DE EVALUACIÓN DE SU HIJO/A…
Respecto a la experiencia que cuentas (que no conozco) creo, por lo que dices, que es un ejemplo de actitud positiva hacia la tarea de evaluar. Ese profesor está convirtiendo la evolución en un proceso de motivación, de diálogo, de ayuda, de comprensión, de educación….Está haciendo una evaluación que educa.
MUCHAS GRACIAS.
UN ABRAZO.
MÁS
Estimado Miguel Ángel, un artículo para enmarcar, hasta el título es sugerente e ingenioso, como no podía ser de otra forma, viniendo de ti.
Las anécdotas mencionadas son un ejemplo de personas creativas que se resisten a adecuarse al sistema educativo, cuyas respuestas son tan ingeniosas que solo merecen puntuación doble, por mostrar Creatividad, la competencia de las competencias del presente y del futuro.
Me encantó la respuesta de una niña ante un problema visual, Había una caja vacía y perros fuera, ante la pregunta ¿Cuántos perros salen de la caja? La niña responde: “No he visto cual ha salido de la caja y cual no”. Respuesta magnífica, razonada y coherente, esta niña sigue viendo los problemas y todavía no se limita a las operaciones matemáticas.
Cuando enseñó al alumnado a trabajar cooperativamente, les planteó el siguiente problema “En mi casa tengo un pequeño jardín donde se posan muchos pájaros y me encanta escucharlos por las mañanas. Pero tengo un vecino que me ha denunciado a la comunidad porque solicita que corte el árbol ya que le molestan los pájaros. Por supuesto, su queja no ha sido escuchada. Muy cabreado mi vecino, un día saca una escopeta y mata a la tercera parte de los 15 pájaros que ese día había en mi árbol ¿Cuántos pájaros quedan en el árbol? Este problema me sirve para averiguar el pensamiento divergente de mi alumnado y es curioso que la repuesta correcta sólo la dan el alumnado que no se ajusta al sistema educativo, el alumnado que sigue viendo pájaros volando.
El Sistema está diseñado para calificar “¿Por qué le llaman evaluación cuando quieren decir calificar?” Coincido contigo en lo que estás viviendo con tu hija, …mis hijas también me los dicen “Cuánto mejor se ajuste a lo que dice el libro, mejor nota sacarás”…y yo añadiría y olvidarás…Sufro mucho la supuesta evaluación que vivo como madre y como profesora. El otro día me dijo mi hermano algo curioso…”Lo que se aplica en la Escuela es el Método “MEO”…Memorizo, examino, olvido…curioso método: “Expulsar”.
“Actualmente se enseña a no recordar y por eso constantemente se nos invita a almacenar, Todos los dispositivos que acompañan nuestras vidas son almacenadores: archivos digitales, nubes online, galerías de fotos, cadenas de mensajes, apps compartidas…Pero la memoria no es solo un archivo. Es la actividad que hace que el archivo siempre vivo de nuestras huellas tenga y renueve sentido, para nosotros mismos y para otros” (Marina Garcés)
En la formación inicial y las oposiciones se deberían dar supuestos prácticos y reales, como “Si una alumno con un CI de 150 y un gran potencial creativo suspende 6 asignaturas en la primera evaluación y 8 en la segunda evaluación? ¿Debería repetir este niño? ¿O es que no es lo suficiente listo?. Lo planteé en el twitter y me dio vértigo…por los debates enriquecedores que se generaron (772 me gustan, 156 retwitts y 62 comentarios de todo tipo). Lo que está claro es que con esta Pandemia el alumnado de Altas capacidades con suspensas y bajada de notas ha aumentado. En la vida y especialmente en la adolescencia todo es más complicado de lo que aparentemente parece. Hay personas que se resisten al sometimiento. Prefieren perder antes que seguir el camino marcado. Es una forma de reivindicar algo a lo que tiene derecho: la personalización de la enseñanza. Es clave analizar y reflexionar ante esta situación que está siendo dramática para todo el alumnado en general. Y si esto es así para alumnado con potencial, imagínate lo que está siendo para el resto de alumnado.
“¿Es la Escuela demasiado aburrida? Muchos de los saberes que se transmiten son poco relevantes para comprender la realidad fragmentada y difusa y compleja. Razón y emoción son inherentes a un aprendizaje motivador y duradero…Enseñarles a pensar . ¿Qué sentido tiene la Escuela si no ayuda a pensar en el mundo? Y para ello hay que enseñar a dudar, a hacerse preguntas, a contrastar puntos de vista y saber discriminar la verdad de la mentira” ( Carbonell, Izuzlkiza. Martínez). Solo así podremos evitar “Bulos Científicos”(López Borrull), en el que grandes referentes para nuestros jóvenes que pasaron por la escuela (youtubers con muchos seguidores) lanzan en la red que la tierra es plana y hasta el mismísimo Pedro Duque interviene en el debate sin mucho éxito de convicción. “Una verdad sin interés puede ser eclipsada por una falsedad emocionante” (Aldous Huxley)
“La Educación es el sustrato de la convivencia, el taller donde se ensayan las formas de vida posible…¿De qué sirve saber cuándo no sabemos cómo vivir? ¿Para qué aprender cuando no podemos imaginar el futuro? Estas preguntas son el espejo donde nos queremos mirar. El problema de la Educación es el de un reloj que hay que arreglar mientras no se puede detener. Su tiempo ya ha empezado y cada curso que empieza, así como cada vida que llega, ya está siempre en curso ¿Cómo puede llegar un tiempo diferente a un reloj que no se detiene?. ” (Marina Garcés. Escuela de Aprendices)
“Uno de los diagnósticos más habituales a la hora de explicar la situación de crisis del sistema educativo es que el ascensor social se ha detenido o está bajando. Es decir, que la escuela ya no es ninguna garantía de una mayor igualdad, ni de una movilidad social ascendente para las clases sociales más desfavorecidas. Entonces ¿Por qué ir a la Escuela? ¿Para que aprender cosas que no nos prometen un futuro mejor” (Marina Garcés)
EVALUAR CON EL CORAZÓN. Ya escribiste que “Lo que hacen los mejores profesores universitarios, Nunca atribuyen a sus alumnos las dificultades que encuentran en el aprendizaje”. Solo así pueden ser mejores docentes. Pero si solo se explican el fracaso aludiendo a la torpeza, a la vagancia, al desinterés o a la desvergüenza del aprendiz, nunca podrán mejorar” (Ken Bain). Asimismo destaco de tu libro Evaluar con el corazón en “Tatuajes en el alma:¿qué es lo más significativo que te ha pasado cuando te han evaluado en el sistema educativo? De las características comunes mencionas que la mayoría tiene un componente negativo, doloroso, amargo; los relatos se tiñen de sentimientos, hay plena hegemonía del examen como instrumento de evaluación, el rol jerárquico lo mantiene quien evalúa y se menciona el carácter homogeneizador de la evaluación”
Para terminar, he extraído un problema de pensamiento lateral (que deberían impregnar los exámenes que se diseñen para preparar al alumnado para vivir el presente y enfrentarse al futuro.)
“Matan a un profesor comenzando el año escolar. Los sospechosos son : el profesor de matemáticas, el jardinero, el profesor de educación física y el director.El profesor de matemáticas dice que estaba corrigiendo exámenes de último año, el jardinero dijo que estaba cortando las flores, el profesor de educación física dijo que estaba haciendo ejercicio y el director que estaba en una reunión de trabajo ¿Quién lo mato?”
PD: Comparto la Misión que vamos a llevar a cabo “Buscando a la creatividad. ¿Tú la has visto? Esperando que algún día los exámenes sean creativos.
http://misionesdegrupo.blogspot.com/2021/04/10-buscando-la-creatividadtu-la-has.html
QUERIDA María José:
Esperaba tu comentario, que siempre es un segundo artículo.
No te veas obligada siempre a ser tan excelente. Porque a veces no hay tiempo, no hay ánimo o hay otras prioridades.
Un granito de arena es una aportación. No siempre ha se ser una montaña.
Lo que más me llama la atención es la inspiración del comentario, su espíritu, su enfoque…
Interesantes tus anécdotas, las citas de Marina Garcés, las referencias…
Gracias por las alusiones a Evaluar con el corazón.
Me preocupa, como dices, lo que queda al día siguiente de un examen memorístico…
Me alarma lo que veo que exigen a Carla. Nombres, títulos y fechas de poetas, pero no el disfrute de una poesía. Ella se sorprende cuando le digo esto. ¿Le están haciendo amar la poesía o a aborrecerla?
Creo que tengo la solución al problema que propones (y tiene que ver con el tema del artículo) pero voy a esperar otras propuestas.
Interesante la Misión que compartes.
Hace poco prologué un libro de Francisco Menchén, que se titula El ADN del aprendizaje creativo. Este autor tiene una larga obra sobre creatividad.
Espero que hayas descansado y disfrutado.
Besos.
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PD: Hoy he recibido la primera dosis de la vacuna Pfizer.
Sin duda una muy buen noticia estimado Miguel Ángel que ya tengas la primera dosis. Yo esperando la segunda de AstraZeneca. Un fuerte abrazo
Querida María José:
Como veterano, me ha tocado la Pfizer. Estoy pasando un b buen día, sin efectos secundarios.
Espero que lo mismo te haya pasado a ti.
¿Cuándo te toca la segunda?
En mi caso hay que esperar 21 días.
Ojalá que pronto llegue a toda la ciudadanía. El ritmo es desesperadamente lento. Debería haber turnos de mañana, tarde y noche.
Besos.
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Muy buena noticia, Miguel Ángel, y espero que el único síntoma que notes sea el deseo de que pasen de prisa esos 21 días, y pronto, muy pronto, dejar de bajar la escalera y coger la maleta. Después de tanto tiempo, puede que te marees un poco al volar, o te dé pánico escénico encontrarte ante tanta gente deseosa de escucharte, no sé, pero creo que algo raro vas a sentir, y lo raro no tiene por qué ser malo.
Y ya que estoy por aquí, quiero aprovechar para recuperar unas palabras tuyas. He dado tus saludos a mi amigo Alberto, y, educadamente, me dice que te los devuelva. No me preguntes por qué me he acordado en este momento de él.
A lo que iba:
“El aprendizaje por competencias es una reacción más que justificada a la existencia de un aprendizaje memorístico, teórico e inerte. Es la materialización del rechazo a los aprendizajes academicistas, mecánicos, memorísticos y estériles. Pretende dar al aprendizaje coherencia y funcionalidad.”
“El inconveniente en el que se ha incurrido es que se ha adulterado el concepto y se ha vuelto a los objetivos de Mayer o a las taxonomías de Bloom, multiplicando y desmenuzado las competencias y generando luego, de forma peregrina y contradictoria, subcompetencias y más subcompetencias.”
“No se puede olvidar el problema que constituye el lenguaje. Porque el lenguaje es como una escalera que sirve para subir a la comunicación y a la liberación, pero por la que se baja a la confusión y a la dominación. El problema no es que no nos entendamos, es creer que nos entendemos cuando decimos cosas diametralmente opuestas con las mismas palabras. Sucede con el término competencia, como con otros dentro de sistema educativo como calidad, evaluación, participación.”
Saltando a otra cosa, Miguel Ángel, permíteme que te haga una corrección (y ahora te imagino comiéndote las uñas y preguntándote: a ver éste con qué me sale). Tranquilo, no te estoy evaluando y tampoco entraba en el examen.
Me dices en mi última participación escrita: Tus visitas al blog son escasas, pero son siempre importantes.
En mi opinión, te confundiste en la colocación de los adjetivos. Mis visitas al blog son importantes (en cuanto al número), pero escasas (en cuanto a valía). Realmente, ni siquiera lo visito. Yo vivo en el barrio y me entero de todo lo que pasa en él.
Un fuerte abrazo para todo el mundo, para ojeadores y opinadores, para los amigos y para los conocidos. Todos y todas estamos aquí, y eso, a mi entender, es algo bueno.
Querido José Antonio.
No te lo podrás creer, pero es la tercera vez que escribo el comentario y que, antes de enviarlo, se me pierde.
Increíble.
Pues sí, ahora me toca esperar los 21 días. Hasta el momento, ni el más mínimo efecto secundario.
Pero no soy tan optimista respecto a los viajes. De momento hay que seguir con todas precauciones: mascarillas, distancia, restricciones… Para viajar hace falta que esté bien tu país y el de destino.
Tengo un billete comprado para viajar a Colombia en junio, pero no sé si podré viajar.
Lo que sí tengo es mono de aviones y actividades masivas y presenciales.
Importante el discurso sobre competencias…
Utilicé correctamente los adjetivos para referirme a tus visitas al blog. Me reitero en ellos.
Como solo tú eres mi puente para llegar hasta Alberto, solo a través de ti puedo llegar a él. Nuevos saludos.
Un gran abrazo, querido y veterano amigo.
Sabes que siempre eres bienvenido al blog.
MÁS
Estimado amigo telemático Miguel Ángel.
Me encanta que escribas este artículo y el tema que tratas. Porque es un tema que me emociona mucho por el impacto tan grande que me produjo comprender que una de las partes más importantes y necesarias del proceso de enseñanza-aprendizaje se utiliza para provocar la selección en esta sociedad neoliberal en la que vivimos.
Debo reconocer que en mis años de facultad en Málaga estudiando Magisterio y Psicopedagogía con tus ex compañeros de trabajo D. Francisco Murillo Mas (“Kiko”), D. Miguel Sola, D. Nieves… y otros profesionales del departamento de didáctica y organización escolar la evaluación educativa entendida como proceso que ayuda a conocer, comprender, cambiar y mejorar fue un completo golpe emocional para mis esquemas de lo que hasta entonces yo entendía como evaluación. Fue un cambio tremendo para mi y muchos de los que en su día estudiamos allí. (la única pena que me queda y siempre lo digo es no haberte tenido como Profesor…) Entonces entendía la evaluación como dices como moneda de cambio, como proceso que conduce a la consecución de un título que te permite seguir estudiando o presentarlo para un trabajo. Para mi la evaluación se reducía principalmente a una calificación, pobre y muy a menudo injusta que provocaba la selección. Un instrumento, absolutamente diabólico, pues carga de la responsabilidad de los resultados obtenidos en esas calificaciones sobre los propios alumnos/as, sobre ellos mismos para convencerlos de que no sirven con unos resultados que lo excluyen de nuevas metas y horizontes reservados normalmente para el alumnado clase media y alta de la sociedad. Por tanto, la enseñanza programada que actualmente siguen llevando a cabo miles de colegios, institutos, conservatorios, escuelas de idiomas etc… tiene en la evaluación su herramienta más poderosa que se utiliza para seleccionar al alumnado y dejar fuera del sistema educativo a todos los alumnos/as que no respondan aquello que el Profesor/a pide o quiere escuchar… No es solo como dices un proceso pobre que tiene en cuenta acciones simples de memorización y repetición sino sobre todo un instrumento que sirve para la selección.
Es entonces cuando hay que preguntarse la función que tiene la escuela en la sociedad y podemos preguntar a quién sirve, que busca, qué función cumple. Si ayuda a compensar las desigualdad social o por el contrario la fomenta. He leído algunos libros al respecto como el de R.W. Connel “Escuelas y justicia social” que supongo que conoces… a mi me encanta este libro.
Lo más triste Miguel Ángel es comprobar cómo después de convencernos en la Facultad de que hay que ir a contracorriente como las truchas en este tema (como tú bien dices)… realizando una evaluación educativa que trate de ayudar a mejorar el proceso de enseñanza sin tener que calificar, sin tener que seleccionar, buscando lo contrario de lo que persigue la enseñanza programada… luego ves a muchos compañeros Maestros/as que califican numéricamente y reproducen lo que hicieron a su vez con ellos cuando eran alumnos/as. En cierta forma nos obligan a poner una calificación en nuestro trabajo y como algunos piensan que total es más fácil hacer lo que hacen todos…
He tenido y tengo muchos problemas en mi trabajo día a día porque yo en mis evaluaciones en inglés no pongo nota, sino que el resultado de una prueba para mi es ver lo que se ha hecho mal y corregirlo… y ya está. Los alumnos/as me piden que les diga la nota, igual que los demás Maestros/as y los Padres/Madres… Así que no suspendo a nadie… pero también tengo problemas con esto… Porque no entienden que la evaluación no es calificar… es un proceso que ayuda a conocer, comprender, cambiar y mejorar… y nada más.
Como siempre digo, muchas gracias por escribir querido amigo y Maestro D. Miguel Ángel.
Desde Ronda me despido con un afectuoso abrazo. Que suerte poder participar en este blog.
Seguiremos siendo trucha aunque me cueste más nadar.
Feliz semana.
Fdo. Juan Francisco.
Querido Juan Francisco, ilustre maestro rondeño:
Me alegra saber que tu formación universitaria (citas a mis queridos amigos y compaleros Kiko, Sola, Nieves…) hayas adquirido un concepto rico profundo de evaluación.
También a mí me apena no haberte tenido entre mis alumnos. Impartí durante muchos años la asignatura de Evaluación
Me preocupaba que muchps de ellos, después de compartir tantas ideas pudiesen ser absorbidos por una cultura escolar obsoleta.
Criticaban los exámenes y yo me preguntaba si ellos los reperirían en sus prácticas futuras. La experiencia me dice que sí
En la enseñanza obligatoria debería estar desterrada una evaluación punitiva, autoritaria, clasificadora…
Hay que ir contracorriente muchas veces, aunque sea más difícil que dejarse arrastrar.
No me extraña lo que me cuentas de tus alumnos. Dice mucho de cómo haces la evaluación.
Un gran abrazo.
Gracias por interesante aportación.
MÁS
Apreciado Dr. Santos Guerra, lectores y comentaristas, saludos.
Como siempre estupendo el artículo y los análisis.
Confieso que me arrebato el corazón con el título maravilloso para decir qué pasa con la evaluación educativa = a cu cu, cu cu. Y saliendo un poco del tema, es la canción preferida de mi sobrino, de 1 año y 4 meses, así que me arrebato una sonrisa y pensé que coincidencia. Y regresando al tema, me parece que la evaluación de ser un verbo, una acción, lo llevamos al plano de lo inerte, y a veces con satisfacción solo mostramos indicadores, números, y luego ¿Qué más es posible con ello?. Y viene mucho al caso eso de cucu… Así que pienso que las pausas educativas son parte de lo necesario, porque en juntas de academia se habla de los resultados de la evaluación, se conversa, se intercambia, pero terminando esto a seguir con el ritmo, y entre lo que se justifica es que el tiempo no alcanza, y entonces por qué no hacemos pausas educativas. En este sentido usted dijo algo importantísimo, el tiempo es de las cosas que no te pueden regresar, Entonces ¿Qué calamidad, de lo que menos disponemos es de tiempo y encima lo usas para juntar a otros, tener acuerdos que poco aplicas y luego no te lo pueden regresar? ¿Por qué pesara tanto hacer una pausa educativa? Si la por ciencia nos indica que es necesaria. Ya ve con esto de la continuidad educativa y la salud ante la pandemia, yo veía como el mundo se aterro por hacer una pausa, había que hacer algo, pero pensar en parar nunca, y entiendo, pero… en fin. Por otro lado, en la evaluación deberíamos tener lo que Usted ha dicho en varias charlas y en las líneas de sus textos cuando de evaluación se trata, porque siempre preguntamos ¿usted qué sabe sobre esto? En lugar de cuestionar a los otros ¿Usted que siente sobre esto? Y ahí es posible que nos metan datos y serpia mas provechosa la evaluación. Recuerdo en su artículo de 2010 en la revista arbitrada de la educación, y mire el tiempo 11 años atrás y ahí plantea unas interrogantes que preocupa que siguen siendo similares, pero qué nos impide hacer la modificación, y la posible acción se torna para lo inerte. También, planteo el problema de los efectos secundarios. Y todo para llegar a dar respuesta hacia la certezas y entre mayor acercamiento mejor. Nunca se me olvida cuando le escuche en esa maravillosa conferencia de Chihuahua 2018, y todo lo que comentó, así que lo registré todo, lo envié como reseña y afortunadamente quedo en una revista arbitrada, es de los textos más preciados, y siempre que alguien me pregunta sobre evaluación, les comparto sus textos que tengo en red o les posibilito las entrevistas que me concedió y que se publicaron en diarios y le digo ahí encontrarán muchas respuesta, no quiero ser teléfono descompuesto como Usted dice, porque luego vaya a pasar que omita algo necesario. Por cierto, le contaré quien me va a dar una entrevista, se lo escribo por mail, porque seguro le dará gusto. Gracias por todo y por ser una guía importante para mí, siempre lo recuerdo siempre con mucho aprecio y mucho respeto a su sabiduría. Gracias Dr.
Querida Lourdes:
Me ha alegrado mucho verte por aquí después de tanto tiempo.
Siempre digo que hay que tener libertad para escribir y para dejar de hacerlo.
Qué coincidencia: ver la canción preferida de tu querido sobrino en el título de mi artículo. Sorpresas gratas de la vida.
Desde luego que me alegra saber que algunos de mis textos y conferencias te han parecido interesantes.
Gracias por difundir las ideas a otras personas.
Avanzamos, pero con excesiva lentitud.
Besos y gracias por tu participación.
MÁS
Querido Profesor:
El año 2020 tuve la oportunidad de conocerle en una clase magistral de FLICH en Chile, habiendo ya leído anteriormente sobre usted, me declaro desde ese día su fiel seguidora. Me entretiene y educan mucho sus artículos y por sobre todo esa sabiduría que nos transmite a quienes hoy seguimos luchando en esta hermosa tarea de educar. Digo luchar, porque realmente en Chile e imagino también en otros países del mundo, sigue siendo un enorme desafío para los docentes enseñar y evaluar desde la virtualidad. Yo soy directora académica de un colegio y veo a diario a mis docentes comprometidos por “enriquecer sus proceso de enseñanza y evaluación”, camino que en Chile se ha coronado con una nueva normativa llamada decreto 67,que ha sido un gran impulso para este camino de mejora. Sin embargo, ninguna normativa ” nos puede cambiar desde afuera”, creo que las reales transformaciones ocurren cuando el cambio comienza “desde adentro” es decir en nosotros/as mismos, por eso necesitamos que la evaluación nos eduque a nosotros también .Por otro lado, los docentes en Chile, vivimos tensionados, puesto que aún existe el SIMCE y evaluaciones estandarizadas que nos categorizan como institución educativa en un 67%, lo que nos hace como docentes y escuelas vivir en un constante frenesi. Por ello ruego, que las políticas educativas existentes mejoren y nos ayuden realmente a “Evaluar para aprender” . Un abrazo
Querida Carolina:
Qué hermoso comentario. Muchas gracias por enviarlo.
Gracias también por tus palabras sobre nuestro encuentro en FLICH. Fue una experiencia hermosa y estimulante para mí.
Conozco bien el Decreto 67 y lo he trabajado en algunas conferencias en Chile cuando la actividad formativa podía ser presencial.
Tu comentario muestra un poderoso compromiso con la educación.
Claro que hay que luchar y seguir luchando.
Creo que la escuela tiene que ser hoy una institución contrahegemónica. Y también sus profesionales.
Muchos besos.
Muchas gracias.
Mucho ánimo.
Gracias, Professor.
Muita sabedoria em tão pouco tempo…
Estimado Joâo:
Muchas gracias por tu comentario.
Tú sí que has sido elocuente en tan pocas palabras.
Gracias,Profesor.
Un abrazo.
MÁS
Devemos sempre, como o Professor fez e faz usar a palavra certa, “le mot juste”. O resto está a mais.
Gracias, uma vez mais. Parecia conhecer as nossas escolas…
Gracias de nuevo, querido profesor:
Sí, el lenguaje es una escalera por la que subimos a la comprension y a la liberación y por la que bajamos a la confusión y a la dominación…
Amo mucho vuestra tierra, la he visitado siempre con admiración, cariño y respeto, tengo entrañables amigos y he aprendido mucho de los docentes portugueses…
Un abrazo.
MÁS
Gracias, Professor, por usar uma língua que não tem vergonha das suas raízes e que é fiel à sua história.
Aprendi muito consigo e apreciei muito o seu sentido de humor.
Un abrazo cordial,
João Barroca
Querido profesor:
Soy un enamorado de mi lengua. Somos lo que hablamos.
Todo lo aprendemos entre todos.
Mañana escribiré en el blog un artículo sobre la necesidad del buen uso de la lengua por los políticos, a raíz de un documento de una Consejera de Educación que está plagado de incorrecciones.
El sentido del humor es una forma de bondad que deberíamos perfeccionar.
Un abrazo.
MÁS
Caro Professor Miguel Ángel,
é sempre um prazer imenso ler ou ouvir as suas sábias reflexões.
De facto, em Portugal, na sequência das atuais políticas educativas que estimulam as escolas a uma gestão mais autónoma e flexível do currículo, temos sido levados a refletir sobre o(s) sentido(s) da avaliação.
Neste contexto, estou a colaborar na organização de umas jornadas da educação que se realizarão no início de setembro de 2021, num município do Norte de Portugal. Gostavamos muito de contar com a participação do Professor Miguel Ángel. Assim, para que possamos verificar a sua disponibilidade, peço-lhe o favor de partilhar o seu contacto de email para: danielcmrocha@gmail.com.
Desde já muito grato pela sua atenção e por ajudar-nos a acreditar que é possível uma escola com (de) sentido(s).
Um abraço
Daniel
Estimado Daniel:
Muchas gracias por tus palabras.
Estaré encantado de participar en elemento que estás preparando para septiembre.
Te dejo mi correo particular para que precisemos las cuestiones necesarias.
Un cordial saludo.
MÁS
Correo: arrebol@uma.es
Qué tal, Miguel Ángel:
He estado leyendo este artículo o resumen de una conferencia de José Gimeno Sacristán. Tú estás aprobado, porque te conozco, y del tema vas sobrado. Pero, por si a alguien le puede interesar o valer para mejorar su comprensión y velocidad lectora, yo por aquí lo dejo. Anticipo unas pocas palabras un tanto descontextualizadas para la buena comprensión de su discurso. En un principio, quizás puedan chocar, o también provocar las ganas de leerlo todo. Interesante lo que dice sobra la selección de profesores universitarios.
http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/177721
“Cuando en reuniones con profesores me preguntan que cómo arreglaría la evaluación, les respondo que quitándola. En la educación obligatoria no tiene por qué evaluarse, salvo que sea para conocer mejor al sujeto y de esta manera ayudarle.”
“El acto de evaluación violenta los procesos más sutiles.”
“El éxito escolar no implica el éxito educativo.”
“Las instituciones escolares y los profesores no han cambiado en sus prácticas y comportamientos en la medida en que han cambiado las personas que acceden al sistema.”
“La información que el sistema escolar ofrece al sistema social aumenta a medida que las prácticas de evaluación se establecen y generalizan y se certifican los resultados de las mismas. Porque, como decía Foucault, una cosa es evaluar y otra dejar constancia de la evaluación.”
“En la práctica diaria continuamente se hacen evaluaciones, pero dejar constancia por escrito de lo que se evalúa ocurre en pocos casos.”
“La evaluación escolar se reduce a la toma en consideración de los resultados fácilmente constatables, ya que se sigue el criterio que lo constatable, lo registrable y lo plasmable en un expediente es lo que cuenta.”
“La evaluación hace una valoración de sujetos, de cada sujeto. Pero es una valoración que se basa en una parte muy reducida, muy elemental, de la realidad de ese sujeto. Ya que la realidad del sujeto y la actividad que desempeña son mucho más ricas y amplias que lo que observa, valora y registra el evaluador. Se habla de evaluación continua, formativa, integral,… pero de hecho se basa en aspectos e informaciones muy reducidos.”
“El inconveniente de este sistema numérico, que cuantifica y jerarquiza, es que anula otras posibilidades y no deja lugar a entender la evaluación de otra manera más racional, más humana y, por lo tanto, más cercana al sujeto. Giner de los Ríos decía que evaluamos porque no conocemos a los sujetos. El examen es una manera de discernir qué hace o qué ha hecho el estudiante cuando no podemos conocerlo personalmente.”
“Es decir, se sustituye el conocimiento personal por el conocimiento técnico, desconociendo al sujeto en una pretendida valoración más científica del estudiante.”
“Y es que el positivismo ramplón que orienta la tecnocracia pedagógica que domina el sistema ha llegado a ponderar más la evaluación “científica” que la informal.”
“La despersonalización de los procesos educativos supone la atribución de autoridad a los procesos técnicos de conocimiento del sujeto. Y la creencia que eso representa la objetividad muestra el triunfo de la ignorancia. Ya que esos procesos no son más que la arbitrariedad tecnificada. La despersonalización de los procesos educativos supone la atribución de autoridad a los procesos técnicos de conocimiento del sujeto. Y la creencia que eso representa la objetividad muestra el triunfo de la ignorancia. Ya que esos procesos no son más que la arbitrariedad tecnificada.”
“Todo se puede evaluar (sobre cualquier aspecto de la realidad se puede establecer un juicio), pero en educación no todo se debe evaluar. Hay elementos de la vida que no se evalúan. Los elementos más importantes son los que no se evalúan.”
Como dices tú, pero desde mi situación, un abrazo de norte a sur.
Querido José Antonio:
Conozco a Pepe Gimeno desde hace más de medio siglo.
Mantenemos desde entonces una estrecha amistad personal y de familias.
Compartimos de forma decidida el discurso sobre la escuela y, por consiguiente, sobre la evaluación.
Ya veo que has extraído algunos fragmentos significativos de su conferencia sobre éxito y fracaso escolar.
Y aun quedan muchas cuestiones: ¿y el que obtiene sobresalientes y utiliza el conocimiento adquirido y evaluado positivamente para destruir al prójimo?, ¿tiene éxito el que aprueba y acaba destruido en su autoconcepto por la experiencia escolar?, ¿¿y el que fracasa porque no le interesa tener éxito?…
Gracias por la referencias porque todas invitan a reflexionar sobre cuestiones importantes de la educación.
Un abrazo.
MÁS