El fachita

31 Oct

No voy a hablar de fachas. “Estamos hartos de rojos y de fachas”, ya lo ha dicho hasta Ian Gibson, que de eso entiende un rato. Facha es un término viejuno, demodé, desfasado y, en todo caso, despectivo. Esa guerra ya no es la nuestra, se acabó, hay que apostar por lo nuevo. Y lo nuevo es “el fachita”. Un personaje al que nótese que nombro, desde el cariño, con la carga juguetona y afectuosa del diminutivo que le pone su toque pequeño, peludo y suave, que se dijera todo de algodón, que no tiene huesos. Dejemos los huesos tranquilos en sus fosas o venerados por sus obeliscos – tanto da cuando están lirondos- para los arqueólogos de la memoria histórica. Allá el juez Garzón y sus literatos, acullá Pío Moa y sus teorías delirantes.

Vayamos al aquí y al ahora, al “fachita”, que no tuvo abuelos en el frente, que surgió de la tierra sin raíces, que se crió, en dos días, lustroso como un pepino. No le duele el pasado, porque no tiene, y se entrega al futuro como un valor emergente, como un lindo perchero donde se cuelgan vagamente ciertas poses imitadas de sus padres o de los padres de otros. Su pensamiento es una frase bien corta a pie de imagen como se lleva ahora y en la imagen da de campeonato. Nace con una predisposición genética a las camisas del caballito, el cinturón de Spagnolo, el jersey sobre los hombros con las mangas anudadas y la gomina por todo credo espiritual. Da el pego, que es lo que cuenta, en estos tiempos de vacuidad.

El fachita es una ilusión de JASP (joven aunque sobradamente preparado) que se queda en ilusión fotogénica como todo. Pero basta con que sea listillo para ponerle el relleno mediático. Los trepillas granujientos y divertidos enganchan más que los sabios solemnes que, con sus verdades incómodas, tocan las pelotas del gentío.

Y ahí estaba él, en su punto, como un cochinillo de Segovia, justo lo que necesitaba el PP para servir caras nuevas de primer plato. No era registrador de la propiedad, no era nadie, pero, puestos al tirón, habría remontado como líder al tristón de Rajoy, que ahora se desgarra las vestiduras y pide perdón por los pecados de su tropa, con lastimero tono de profeta Jeremías.

Y aquí no gustan los arrepentidos, sino los sobrados como pudo gustar el pequeño Nicolás de no pararle los pies.  

Convenía en la edad dorada del selfie, del narcisismo de morritos que se besa a sí mismo ante la cámara del smartphone, un líder cargado de autoestima. Los tipos que, a fuerza de educación judeocristiana, se vendían a sí mismos como un desvencijado gusarapo, han pasado de moda. La humildad es un valor en franca decadencia que sólo le vale al Papa Bergoglio cuando, dicen, que va por Roma en autobús.

La humildad era un gran valor, pero ahora los grandes valores están en out. Es el momento de las cosas pequeñitas, del pequeño Nicolás, del fachita, en contrapunto al rojete como cachorro entrañable.

El rojete tiene coleta y un arete en la oreja, también una tía, que fue hippie y madre soltera y ahora se jubila cultivando cebollas en una granja ecológica. Aprendió sus principios vagamente cuando, de chiquitín, su barbudo padre lo llevaba en hombros a las manifas y su mamá a los conciertos de Serrat, en la edad dorada de los porros y los mecheros en alto. Tal vez el rojete tenga ideas, pero sólo le conocemos las consignas.

En España ya no hay dos grandes bandos como en la Guerra Civil, a lo sumo, dos banditos. Tampoco hay rojos y fachas, en todo caso fachitas y rojetes, muy cuquitos todos. Al fin y al cabo, sin esfuerzo de la memoria, han aprendido ellos lo poquito que les han querido enseñar.

Nuestro futuro político cabe en la casita de Pin y Pon, es como una réplica diminuta de otros tiempos, como cuando te figurabas el siglo XVIII en el teatro, al ver en el escenario un salón burgués de Moratín.

Y los columnistas, integrados en el ambientillo, nos vamos haciendo plumillas. No escribimos artículos de fondo porque el fondo es poco y nos centramos en la forma de la anécdota chiquitita, ese grumito que le sale, cada tanto, a la actualidad; el imberbe Nicolás, cosas así.

Quien quiera grandeza, se tendrá que ir a añorar la España imperial como Juan Manuel de Prada. Nuestra historia ya no es una historia con mayúsculas. Ahora se escribe con minúsculas, como todo en Internet. A lo sumo, es una historieta.

13 respuestas a «El fachita»

  1. Dice vd bien, seña Lola. A dos banditos han quedado reducidos los dos grandes partidos políticos españoles, surgidos ambos trozos – cachos del peazo animal transicional que nos dejó en herencia la España unida, uncida, ungida…Pero traduzca, traduzca literal, aguda y libremente, como cualquier comentarista deportivo cuando suelta “ el /los tifosi…” y verá que el diminutivo cariñoso, plural y español, “banditos” es igual a “banditi”, o sea, dos bandos plagados de bandidos. Claro que igual lo ha dejado caer aposta…
    A mí me da un poco de grima constatar ese reduccionismo gradual que se ha producido en los dos bandos, desde la Transición hasta hoy. Eso es cortarse la coleta, hombre. A diferencia de aquellos fach – orros (órridos, con permiso de F de Herrera) y de los r- ojos (¡ojo!), de mediados de los setenta, diferentes pero iguales, soltando su recia masculinidad por todos los poros, a Gog y a Magog, los actuales f- achita y r –ojete parecen sacados del guiñol.
    Y no era eso, evidentemente, si, incidiendo en lo anecdótico, por aquellos años, viendo una actuación del grupo musical gallego Los Tamara, en Lausana, durante un entreacto saltó al escenario una pareja, chico y chica, españoles, melena, barba y guitarra él, falda maxi, jersey negro de cuello vuelto, ella y acometieron la canción “Gallo Negro, Gallo Rojo”, que, la verdad sea dicha, tampoco venía al caso, en un ambiente festivo-familiar, de mayoría gallega. A la que se escuchó “si en España gobernara el gallo rojo, otro gallo nos cantaría…”, más o menos, la troupe gallega y otras, niños incluidos, fueron todo y uno gritando ¡fuera, fuera…! y ¡viva Franco, viva España!. Tuvo que salir por piernas la parejita.
    Por eso digo que ahora es todo como muy de laboratorio, previsible, ordenado, se sabe la respuesta y la gente se atiene a la correción (o no) política, sin dejar por ello a un lado – y menos en noviembre – los recordatorios, las flores, las tapias y la Santa Compaña…

    Storie e Storiette. Saludos. Buenos días y buen finde para tod@s

  2. En este tiempo hórrido ( nos entenderá la hache muda “El Divino”), los cambios han convertido a los gallardos y altaneros de otrora, en amilanados de retaguardia que han cavado su trinchera para protegerse de la propia explosión que ellos mismos han generado, aunque terminan yendo a la cárcel ( a la vista está). La Transición tuvo como necesidad forjar un acuerdo casi en falso como farsa, para construir así un nuevo estado de convivencia en un nuevo Estado tardío democráticamente respecto a Europa, pero tardofranquista, tardonodemocrático respecto de sí mismo. Hubo la necesidad de un modus híbrido que a estos idus no sabemos dónde está (¿ubi sunt?), y que significó una especie de renuncia de lo “yo” para que no esté siempre en guerra civil ad infinitum contra el “tú”. Y tan pintiparada estuvo la plaza, que todos aprendieron de todos, la homogeneidad fue tal que el mangue dio con su sistema como funcionamiento, haciendo de las diferencias una causa insólita, vamos que a robar tó dios. Y del todoplanito se pergueñó, sin querer, la llegada de un Podemos, que quizá no va a poder, pero que con el tiempo se quedará transido, transitivo o en transición, como la que fue en los setenta y hoy nos brinda sus réditos, y pecarán de lo mismo. Es el eterno retorno de lo idéntico, el círculo que no se detiene. AMÉN.

    Aquélla Transición tuvo su fama
    por su modo de pactar contra el jindama,
    porque Franco había caído tres días antes
    y hasta después de muerto nos llevaba por delante.
    Que aquél café para todos, aun siendo torrefacto,
    supúsole al búnker del franquismo
    quedar fuera del acto,
    y sin embargo, un hórrido febrero
    aquélla Transición se echó en el suelo.
    Fue en el Congreso, fue con Tejero,
    ahora quieren sentarse los de Podemos..

  3. Decís bien, “todos los animales son iguales pero unos más que otros”.
    Si al poder llega el humano
    su credo se muta en vicio,
    que se vuelve bien marrano
    y en su dominio porcuno,
    todos se vuelven chorizos
    en el momento oportuno,
    que en esta granja siniestra,
    cuando llegan a las manos,
    tanto da por arrimar la derecha
    que la izquierda,
    pues se trata de robar
    y el que no se suma al acto
    teniendo oportunidad
    bien lo tratan de tontuno,
    ¿decidme por caridad,
    si existe el gran ideal,
    en lo otro y en lo uno
    que no guste el capital
    en las tarjetas de bankia,
    los cruceros a ultramar,
    ese lujo a todo trapo
    de medrar
    a costa del gusarapo,
    que un día los fue a votar,
    que, al final, tontos del bote
    con sus tretas, nos venden sus papeletas
    y se nos queda esta cara de tremendos carajotes.

  4. Y aquí robamos todos
    o no roba más ni Dios
    debiera decir el pueblo
    sufrido pueblo español
    el momento ha llegado
    (es inútil, no se enteran)
    de parar ante el barranco
    o pedir olmos a las peras
    Aquí no se mueve nada
    dijo una vez un gobierno
    sin atender los consejos
    que llegaban de Canarias
    ¡y Canarias estaba lejos!
    donde Franco conspiraba
    llamado después tío Paco
    que venía con las rebajas
    Pueblo a precio de saldo…
    ¡ése es el pueblo español!
    y su guerra de guerrillas
    -si aparece Napoleón –
    y sus eternas rencillas
    y su enemigo interior…
    esperando una vez más
    como angelito querube
    alguien que lo salvará
    mas no sabe si vendrá
    o vendrá entre las nubes…

    Clásico siempre será
    “por no hacer mudanza en su costumbre”

    Saludos

  5. Pues tendremos el querube
    que bajará de las nubes,
    el pueblo ya está por Pablo
    y, aunque otras lenguas murmuren
    que es el mismo diablo,
    lo suben a los altares
    desde Madrid a Linares,
    no puede ser una errata
    que tenga nombre de Papa
    y de histórico sociata
    y, al final, la fe atrapa
    que, en busca de su profeta,
    ciega la patria razones
    y se vuelve tururata,
    en las Iglesias de Pablo
    el pueblo se pone en cola
    a la espera del milagro.

  6. Acabará siendo alabado
    y musa de los cuarteles
    tan denodado insumiso
    ya bordado de caireles
    al militar hace guiños
    lo tiene por necesario
    si rebuscas ya aparece
    buscón llamado Pablos
    que en esto no difiere
    gran cosa del Vaticano
    Siendo barato el soñar
    es juvenil el derecho
    de hacer eso realidad
    y no es cosa prudente
    en el yerro continuar
    ni dejarse más llevar
    por idus de Carcagente
    el lobo en el matorral
    acechando irreverente
    por un decreto secular…
    Mejor dejarlo de lado
    anteponiendo al aullar…

    ¡hasta aquí hemos llegado!

  7. Por qué Podemos incluye,
    en primera del plural,
    a gente que no le ha dado
    placet ni conformidad.
    ¿Por qué se llaman Podemos?
    Mejor les pega Pobremos,
    que de pobrezas habrá.
    Y si les gusta Creemos,
    tampoco lo veo mal,
    que un poco de religión
    religa por el lugar.
    Y ya puestos a cambiar,
    hasta se puede variar
    la nómina de este blog:
    “Los escritos de Lolemos;
    su escudero, Winspector”.
    Si existiera Garcilaso…

  8. Estimada Lola;

    Desde SPAGNOLO nos gustaría demostrarle a usted que nuestra marca no nació bajo un sentimiento hacia una guerra civil que tuvo lugar en España hace muchos años y que ninguno de los hermanos que creamos esta marca vivimos. Nuestra marca nació bajo una idea de crear una moda de calidad con un toque español, ya que creíamos que casi todo el producto de moda con calidad que se vendía en España venía de marcas americanas, inglesas, francesas, etc y no tenían todo el colorido o alegría que aquí tenemos y nos gusta. Además, en este país hemos visto cómo muchísimos españoles llevaban prendas que destacaban en sus logotipos banderas de USA o de Inglaterra, y detectamos de que hay mucha población que en vez de llevar una bandera de otro país prefería llevar la del suyo.

    Decidimos reflejar la bandera en nuestro logotipo, y se decidió así porque a pesar de los difíciles momentos que estamos viviendo todos los españoles en la actualidad, nos sentimos muy orgullosos de pertenecer a este país y de todo lo que rodea nuestra bandera, que para nosotros, más que una guerra civil significa alegría, arte, simpatía, paisajes, gastronomía, vinos, ferias, carnavales, fallas, navidades, etc.

    Afortunadamente, hay mucha gente que piensa como nosotros, y por eso nuestras prendas tienen gran aceptación entre todo el público, independientemente de sus ideales políticos o de si han vivido una guerra civil (la gran mayoría de nuestros clientes son jóvenes entre 20 y 30 años que no conocen ni han conocido quien fue Franco).

    Por otro lado, se quedaría usted sorprendida de saber la cantidad de prendas que vendemos entre público “turista”. Extranjeros, a los cuales la combinación de moda, colorido, alegría y una bandera española le produce gran satisfacción. Obviamente, estos señores, no tienen ni idea de nuestra Guerra Civil y les gusta llevar una prenda con una bandera española porque no tienen esa presión que los españoles sí tenemos con respecto a llevar algún distintivo con los colores de nuestra bandera. Presión que afortunadamente está casi desaparecida, pero usted en su artículo volvió a revivir.
    Nosotros pensamos que no se debería dividir a los españoles ni crear trifulcas entre nuestros conciudadanos. Los únicos momentos en los que estamos todos unidos (ya seamos de izquierdas, derechas, altos, bajos, etc) han sido cuando nuestras selecciones nacionales han jugado un mundial en algún deporte, y ahí todos nos hemos puesto la camiseta, o hemos llevado la bandera con orgullo. ¿Por qué no puede ser así cuando no haya mundiales? ¿Por qué no podemos estar unidos durante todo el año? ¿Por qué para un partido de cualquier deporte llevar una bandera no es de facha, pero si la llevo en un cinturón cuando salgo a cenar pues si soy facha…?

    Con esto lo que le quiero transmitir es que posiblemente haya “fachitas” que lleven nuestra marca, pero no todos los que llevan nuestra marca son “fachitas”, y para demostrárselo de forma más detallada, nos haría usted feliz si tuviera la amabilidad de poder venir a nuestras instalaciones en Sevilla, donde podrá ver el corazón de esta marca, conocer a la familia que la creó, las personas que trabajan en ella, etc y podrá contemplar de primera instancia como ninguno en nuestra organización tiene ideales fascistas ni por asomo, lo único, es que estamos alegres de haber nacido en este país.

    Sin más, y esperando que pueda usted venir a visitarnos, le envío un cordial saludo además de un detalle de nuestra marca que le hemos mandado a las oficinas de “La Opinión de Málaga”, y que podrá recoger mañana mismo.

    Atentamente

  9. Claro que sí, Escribidor:

    “Si Garcilaso volviera
    Ud sería su escudero
    que buen caballero era…”

    Se trata simplemente de una P. Mas, concebida por el PP, fracasada. Y aplicada en su máximo exponencial por Podemos, sin nexo ni conjunción, triunfadora. – por ahora – al estilo de aquel cartel anunciando una barbería:

    Peluquería Paco Pijo Pérez, peluquero, perfumista; por poco parné previo pago, peino, pelo, pongo pelucas, peluquines, pestañas postizas; para pedicura pasar por piso primero, preguntar por portero Pascual Ponce Pilatos, pedir papeleta, poner “para pies”, p, p, p, p,….

    Poder sí que se puede y más si te allanan el camino de aquella manera
    Saludos

  10. Estimada Lola;
    Desde SPAGNOLO nos gustaría demostrarle a usted
    que nuestra marca no nació bajo un sentimiento hacia una guerra civil que tuvo lugar en España hace muchos años y que ninguno de los hermanos que creamos esta marca vivimos. Nuestra marca nació bajo una idea de crear una
    moda de calidad con un toque español, ya que creíamos que casi todo el producto de moda con calidad que se vendía en España venía de marcas americanas, inglesas, francesas, etc y no tenían todo el colorido o alegría que aquí tenemos y nos gusta. Además, en este país hemos visto cómo muchísimos españoles llevaban prendas que destacaban en sus logotipos banderas de USA o de Inglaterra, y detectamos de que hay mucha población que en vez de llevar una bandera de otro país prefería llevar la del suyo.

    Decidimos reflejar la bandera en nuestro logotipo, y se decidió así porque a pesar de los difíciles momentos que estamos viviendo todos los españoles en
    la actualidad, nos sentimos muy orgullosos de pertenecer a este país y de todo lo que rodea nuestra bandera, que para nosotros, más que una guerra civil significa alegría, arte, simpatía, paisajes, gastronomía, vinos,
    ferias, carnavales, fallas, navidades, etc.

    Afortunadamente, hay mucha gente que piensa como nosotros, y por eso nuestras prendas tienen gran aceptación entre todo el público, independientemente de sus ideales políticos o de si han vivido una guerra civil (la gran mayoría de nuestros clientes son jóvenes entre 20 y 30 años que no conocen ni han conocido quien fue Franco).

    Por otro lado, se quedaría usted sorprendida de saber la cantidad de prendas que vendemos entre público “turista”. Extranjeros, a los cuales la combinación de moda, colorido, alegría y una bandera española le produce
    gran satisfacción. Obviamente, estos señores, no tienen ni idea de nuestra Guerra Civil y les gusta llevar una prenda con una bandera española porque no tienen esa presión que los españoles sí tenemos con respecto a llevar algún distintivo con los colores de nuestra bandera. Presión que afortunadamente está casi desaparecida, pero usted en su artículo volvió a
    revivir. Nosotros pensamos que no se debería dividir a los españoles ni crear trifulcas entre nuestros conciudadanos. Los únicos momentos en los que estamos todos unidos (ya seamos de izquierdas, derechas, altos, bajos, etc) han sido cuando nuestras selecciones nacionales han jugado un mundial
    en algún deporte, y ahí todos nos hemos puesto la camiseta, o hemos llevado
    la bandera con orgullo. ¿Por qué no puede ser así cuando no haya mundiales?
    ¿Por qué no podemos estar unidos durante todo el año? ¿Por qué para un partido de cualquier deporte llevar una bandera no es de facha, pero si la llevo en un cinturón cuando salgo a cenar pues si soy facha…?

    Con esto lo que le quiero transmitir es que posiblemente haya “fachitas” que lleven nuestra marca, pero no todos los que compran nuestra marca son “fachitas”, y para demostrárselo de forma más detallada, nos haría usted
    feliz si tuviera la amabilidad de poder venir a nuestras instalaciones en Sevilla, donde podrá ver el corazón de esta marca, conocer a la familia que la creó, las personas que trabajan en ella, etc y podrá contemplar de primera instancia como ninguno en nuestra organización tiene ideales fascistas ni por asomo, lo único, es que estamos alegres de haber nacido en
    este país.

    Sin más, y esperando que pueda usted venir a visitarnos, le envío un cordial saludo además de un detalle de nuestra marca que le hemos mandado a las oficinas de “La Opinión de Málaga”.

    Atentamente

  11. Ante todo, quiero pedir perdón a la firma Spagnolo por mi ligereza. Los columnistas buscamos escribir algo simpático para animar al personal que está muy mustio -no sin falta de razones- y nos vamos de superficiales por pre-juicios. Doy también gracias por esta carta que está cargada de razón y maneras elegantes, que es cosa nada usual en estos tiempos. Por cierto, que también muy bien escrita.
    Y, en fin, por demás, manifestaros lo satisfecha que me siento por la calidad literaria de los comentarios que recibo en este blog. Mis colaboradores están creando una edad de oro de la internáutica, ennoblecen las letras virtuales, sacándolas del cutrerío de las mayúsculas insultantes, las faltas de ortografía y la deformidad gramatical. ¿Qué puedo decir? Soy muy afortunada, me hacéis feliz y OS QUIERO!!!!

  12. No vendrá al caso, pero he visto en algún muro una foto del CD Málaga, celebrando el trofeo Costa del Sol del 63, ganado al Real Madrid en la final por 3-1, donde destacó el portero Américo. Creo que fue el único guardameta que paró un penalti a Puskas y lo hizo en ese partido. Alguien escribió después este poemilla, dedicado al momento de gloria malagueña.

    “¿Quién, al gran zurdo de Hungría,
    en una noche remota,
    con denuedo detendría
    el proyectil que partía
    como un rayo de su bota?
    ¿Quién, de penalti, el esférico
    en el aire paró fiero?
    El heroico cancerbero
    del Club Deportivo, Américo.”

    Digo esto porque igual lo puede adjuntar, seña Lola. Venga, saludos para tod@s en la noche, releyendo a J Cadalso, uuuhhh. Y gracias por esas flores violáceas.

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