Deportes acuáticos

9 Ago

Pronto la realidad cambiará de color y volveremos a ver la vida de color de rosa como en los tiempos de Urdaci cuando España iba bien. De hecho los que van a tomar las riendas de Televisión Española son secuaces de Urdaci y se deja adivinar que operarán en la misma línea.
Es lo que tocaba; el gobierno elimina las voces críticas de los medios, porque en esas críticas se llevan la palma y, tal vez, por piedad hacia el ciudadano medio. La dirección anterior de RTVE, declarándose de carácter independiente y sin confesión ideológica, presumía de dar una información rigurosa, objetiva, ofreciendo al público sólo la absoluta verdad; una terrible crueldad en estos días en que la verdad es tan brutal y, si bien tiene el falso prestigio de hacernos libres, arrastra la más certera consecuencia de hacernos desgraciados. Desde siempre el ser humano ha terminado odiando al amigo verdadero que le hablaba sinceramente con el corazón en la mano y prefiriendo a ese otro amigo falso que le decía mentiras con mucha más gracia. De acuerdo que uno así vive engañado, pero más contento, qué caray. Por eso, nuestros mandatarios han tenido el detalle de relevar de sus puestos a quienes tenían la desconsideración de soltarle al personal verdades como puños de esos que te dejan K.O. al primer asalto. En especial al parado que con todo el tiempo del mundo para ver televisión, tras cada informativo, le vienen ganas de tirarse por la ventana si es de natural melancólico o de tomar las calles por asalto si es de carácter colérico y si tiene hambre de justicia o en general, lo que no está reñido con ningún perfil psicológico, hasta de unirse a la tropa de bandoleros que capitanea Sánchez Gordillo, ese nuevo Curro Jiménez que cual Robin Hood anima al saqueo del Mercadona para alimentar a la famélica legión. Sobre la actuación de vandalismo obrero, ha dicho Diego Valderas que está de acuerdo con el fondo pero no con las formas, máxime cuando dichas formas incluyen mamporros sin discreción a ciertas empleadas del hipermercado, también obreras al fin y al cabo.
Por que tales ejemplos no cundan entre la población, cuya indignación jalean las voces críticas de los medios, nuestros gobernantes han decidido callarlas, alegando a su vez que hablaban por boca de la oposición y estaban, por tanto, muy lejos de ser tan neutrales e independientes como presumían, animando a la rebelión de las criaturas de a.pie contra el gobierno. Ojalá, pues le daban tal aire de veracidad a sus exageraciones que se diría que se tratasen de verdades absolutas. En cualquier caso, nada que nos convenga a los telespectadores que andamos más necesitados de mentiras piadosas que de verdades sin filtros. No hay quien se trague tanta cruda realidad sin ningún edulcorante; un poquito de fantasía, de velada mentirijilla, de verdad a medias; un algo de aliño, que así no hay quien viva. El gobierno que, si bien no parece tener solución a los problemas, sí tiene su corazoncito, rescata el estilo de Urdaci que, aún pasando por poco veraz, era optimista y nos subía la autoestima. La sinceridad, al fin y al cabo, también es una cuestión de planteamiento; “Nada es verdad ni mentira, todo es según el color del cristal con que se mira”, que diría Campoamor.
Y, dadas tales reflexiones, imagino esos nuevos telediarios que nos vuelvan a cargar las pilas de entusiasmo, anunciados por la melodía, por ejemplo, del anuncio de Cinzano Rosé: “Ponte las mágicas gafas de ver el lado bueno de la vida, con los amigos, en compañía, descubre el lado rosa de la vida. Mira a través de Cinzano Rosé, lo verás todo mucho mejor, con alegría y de otro color…”. Por financiar la producción de la pequeña pantalla y como modo de consuelo de masas, la publicidad vuelve a nuestros hogares y está bien. Nada hay tan bonito como saber que alguien piensa en nosotros, aunque sea para vendernos un producto. Al gobierno tampoco le vendría mal hacerse algo de publicidad que es un medio de persuadir a los pueblos que ha funcionado hasta en los regímenes más totalitarios. La parafernalia que montó Hitler en torno a su figura con su despliegue de escenarios megalómanos y esvásticas triunfales tenía a sus masas entusiasmadas y hasta Franco con un lema hizo creer a gran parte de su subditaje que la mísera España de posguerra era un imperio hacia Dios. A veces, nos basta con creer que vamos hacia alguna parte, que nuestros sacrificios sirven para una gran causa y que los que nos gobiernan saben lo que hacen y a dónde nos llevan. Sabiendo convencer, un gobierno lleva a su pueblo hasta a la guerra; es cuestión de poner en marcha el marketing patriótico que crea confianza ciega y del que Rajoy no encuentra el mando. Si nos encontramos perdidos, es evidente que él se encuentra más perdido que nosotros y así no hay manera. Pues se diría que es incapaz de decir que España va bien, ha contratado a los secuaces de Urdaci, a ver si son capaces de decírnoslo. Es necesario que alguien nos diga Viva España manque pierda y nos despierte el fervor patriótico que conviene a los pueblos sacrificados y austeros. Por el momento, nos vamos entonando con el himno español en las olimpiadas y el orgullo puesto en nuestra nueva raza de atletas. No remontamos en las cifras que nos tienen a pique del rescate, pero ¿y lo bien que nos va en los deportes acuáticos?

10 respuestas a «Deportes acuáticos»

  1. Humm, sí, vamos al agua patos, che la sabbia bruccia e fa un caldo da morire. Pero, en todo caso, tocaba eliminar, como es costumbre ya ancestral en España, las voces críticas del PSOE contra el PP, como así hizo el primero en tiempos de Zapatero. Están pues en paz, que aquí no se libra nadie. Y, jajaja, que me troncho como caña de maíz, personaje de Lorca dixit, el Sánchez Gordillo y sus aforados ya pueden darse de juergas en versión ligth de terrorismo ramplón y andaluzado. Lo que no sabe nadie es el dudoso destino de lo robado (plas) Pero es que un ayuntamiento como el de Marinaleda, a diferencia de todos los demás, da para mucho, según me pasan:

    “El alcalde de Marinaleda, cobra 70.367 € al año,

    El 1er Tte. de Alcalde 52.739 €

    El 2º Tte. Alcalde 47.000 €

    La secretaria del Alcalde 36.259,- (Prima de éste)

    El responsable de prensa 38.388,- (Cuñado)

    El consejero jurídico del alcalde 50.024 €. (Un ruso del antiguo CCCP que no sabe castellano)

    El jefe de la policía municipal cobra 68.000 €.”
    etc, etc…

    Hala, así cualquiera se va de fincas, de súper y, a sabiendas que no entrará en el trullo, gritar a los cuatro vientos “¡estaria muy orgulloso de ir a la cárcel…!” Pue cohone ya, con la España que alborea.
    Será el ferragosto, pero el cotarro andaluz no sale de su eterno círculo. Que se lo digan a aquel filósofo de hace cuarenta años, inmerso en plena crisis existencial, cuando preguntó al bueno de Vivar, ese campesino andalú, consciente de su cruz…Por recordar al que fue gran cantautor malagueño, José Mª Alonso:

    http://www.youtube.com/watch?v=KKTeXgjSmmY

    Saludos en la canícula para tod@s

  2. Tal vez no se escuche bien. Aquí la letra.

    Un sombrero de palma, un candil
    el silbar de un chiquillo feliz,
    una hembra, un borrico, un barril
    con aceitunas.
    El orgullo de ser andaluz
    una fe invulnerable en la cruz,
    y el arrullo del viento del sur,
    son su fortuna…

    Vivar, Vivar, si me enseñas a creer en tu Dios,
    yo te enseño la Biblia, el Catón
    y a escribir poemas
    Vivar, Vivar, si me enseñas como haces crecer
    esa espiga te enseño francés
    y a hacer tus cuentas…

    Oiga amigo, perdóneme usted,
    “pa” qué quiero aprender yo a leer,
    si no tengo más verso, ya ve,
    que el de mi arado.
    “Pa” qué quiero yo hablar en Francés,
    si como hablo me “tien” que entender
    el tasquero, el amo, mi mujer,
    el buey y el carro…

    Y allá se fue Vivar con su borrico y su cruz,
    su sombrero, su acento andaluz y su sonrisa.
    Y me quedé con mis libros y mi poca fe,
    sin saber cómo se hace crecer
    aquella espiga.

    Vivar, vivar,…

    Saludos.

  3. Lo digo con todo el respeto: quien no vea la manipulación execrable que hace cada partido de “su” televisión, o está ciego o es un sectario del carajo. A mí, como andaluz que soy, la que me “pone” siempre es Canal Sur. Qué arte. Y como podio olímpico histórico de la democracia española, le daría la medalla de plata del fanatismo sectario a Urdaci y la de oro, sin duda, a María Antonia Iglesias (cuando fue jefaza de RTVE).

  4. ¿Entonces no creeis que RTVE haya sido nunca neutral e independiente? Luego aquello fue un lavado de imagen y tenían razón los populares que se quejaban de que, pese a haber ganado las elecciones, la televisión pública seguía en manos del “enemigo”. La verdad es que para ser neutral el ente, sacaba demasiadas series y documentales sobre la Guerra Civil, la posguerra y casi, en resumen, lo malo que era Franco, que es como decir que por mal que nos fuese ahora, con el “chaparrito” siempre nos fue peor y, de este modo, disuadir del voto a la derecha. Ejem, ¿no?
    Sí, recuerdo a ese Vivar que se parece al señor Cayo de Miguel Delibes. Todo ese toque rústico de vuelta a las gentes sencillas y las raíces de la España rural era muy de la transición y aquí y allí proliferaban los grupos musicales de pseudo-hippies- aunque con tono de coro parroquial- como “Aguaviva” “Vino tinto” y hasta “La Banda del Mirlitón” (“Era de latón, de latón, de latón era, era de latón el cacharro de la abuela”) y estaban de moda los garitos con cortinas alpujarreñas y aperos de labranza colgados en la pared, cacerolas de cobre y demás. Un horror para mi gusto.
    En cualquier caso a mí el elogio del campesino analfabeto pero de sabiduría milenaria entonces tan en boga me parece algo alienante y con toquecillos de recochineo, es como decir que cada cual está bien donde está y para lo que está y así el sabio Vivar estaba tan contento trabajando como un borrico y con su cruz a cuestas, que era lo suyo. Pues vaya.

  5. Touché. Cada cual está bien donde está y para lo que está, que todos hacemos falta en el mundo, desde las ballenas – por eso las salvan – hasta las últimas bacterias, que son enviadas al espacio para ver si logran salvarnos. Entonces vas tú, Lola, poveretta infelice y, saltándote toda regla a la torera, te pones a vivir por encima de tus posibilidades. Y no solo tú, que aparecerán más, según vaya avanzando la investigación. Como ya sois mayorcit@s para poneros cara a la pared, con chinillos en las rodillas y sendas Álvarez sobre los brazos en cruz, el castigo consistirá en un aumento de la incertidumbre ante el futuro, que irá reduciéndose con cada acto que conlleve un firme propósito de enmienda (salir poco, comer poco…en fin, de todo, un poco) Esto no incluye necesariamente dejar al margen del atrezzo a M Escobar cuando nombramos el Sacromonte o el Albaicín. Gracias a él, todo es posible en Granada. Pues eso.

    Enhorabuena a esas chicas por el bronce. Y feliz feria (el que pueda, según Rajoy)

  6. Yo sólo estoy esperando un MESÍAS, que los tenga bien puestos y acabe con tantos privilegios, mentiras, falsedadess,salarios indecentes por arriba y por abajo. Claro, que sólo durará tres días porque lo crucificarán. Amén, aunque nunca lo veré.

  7. Por comprar en el Mercadona no mucho, que una come poco, vestirse de rebajas y hacerse algún viajecillo en compañias de vuelo low-cost, yo como tantos otros, no hemos vivido sino dentro de nuestras más estrictas posiblidades. De este modo, sólo hemos hecho posible que otros como Pascual Sala, por ejemplo, viajen por todo el mundo en primera clase. Que no nos engañen nosotros no hemos robado, tampoco Sánchez Gordillo, por lo menos, en esta ocasión, si se observaban esos carritos con algunos paquetes de arroz y macarrones. Los que robaron se ocuparon de hacerlo a lo grande y no tan a las claras.
    A ver, Joaquín, si Gordillo va a ser tu Mesías. Lo único que pretende, según dice, es que los hipermercados en lugar de tirar los alimentos caducados, los entreguen a cinco días de la fecha de caducidad a quienes los necesitan. Para mí, que esta iniciativa se ha interpretado y desvirtuado en base a la anécdota, pero no carece de categoría. Por lo que sé, ha despertado conciencias más allá de nuestras fronteras. Desde mi educación católica, aprendí que tirar el pan es pecado ¿o no?

  8. Yo también estoy con Sánchez Gordillo. Ese sí que entiende el comunismo de verdad, como en los viejos tiempos. Viva la internacional y arriba los esclavos sin pan. Pan, pan.

  9. Salvando las lógicas diferencias (aquí todavía no hay favelas tan misérrimas como aquellas del Brasil de finales del XIX, que ya faltaría) en la figura mesiánica de Sánchez Gordillo puede encajar bien la del famoso Consejero, de la Guerra del Fin del Mundo, de Vargas Llosa, enfrentándose, él y su tropa de desheredados, a la implacable represión del ejército, a la postre – el sherif, al final, siempre gana – vencedor del Mal. Aunque, la verdad sea dicha, Gordillo y sus apologetas no transmiten hoy día, ni de lejos, iguales sensaciones de esperanza revolucionaria que aquellos barbudos de Cuba cuando los braceros de los campos españoles disertaban, por lo bajo y “en cachette”, sobre el tamaño de los c… de Fidel y de todos los demás comandantes…Cuestión de pelotas o así, que en esa disciplina somos los primeros (por ahora)
    Nunca hay que tirar el pan. Ni aun cuando se da en caridad al prójimo. Un padre reprendía de esta guisa al hijo, por haber lanzado un trozo de pan a un mendigo desde el balcón: “¿no te sonroja? la limosna no se arroja; se besa y se da en la mano.” Casi tod@s tuvimos esa educación católica, la que había. Pero lo ideal es que no hubiera nunca lugar a limosnas. Entonces nos acercaríamos a los dominios de la Utopía. Y esa sí que es una línea roja que nunca, nunca traspasamos. ¿Por ahora…? Marte ya queda a un tiro de piedra.

    Saludos y eso, feliz feria para tod@s.

  10. Creo que lo de Gordillo tiene toda la pinta de quedarse en una anécdota para alimentar los semivacíos periódicos del verano y no llegar a más. Así que no hay peligro de que esto se convierta en Cuba; allí acabaron vendiéndose por las limosnas del capitalismo.
    Por fin, llegamos a Marte, pero no parece que el lugar prometa mucho ¿Qué tal la feria?

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