La profundidad del mar amarillo

22 Feb

La profundidad del mar amarillo
La profundidad del mar amarillo

Las historias que componen este libro de relatos están ambientadas en lugares del medio oeste y sur de Estados Unidos, pero sobre todo en el interior de las personas que ejercen como protagonistas.

Los lectores que busquen al Nic Pizzolato de Galvestone en esta sucesión de pequeños relatos o cuentos, no lo van a encontrar. No se equivoquen, es él, pero en sus inicios, ya que con estos cuentos entró de lleno en el panorama literario estadounidense a través de sus publicaciones en diferentes revistas. Fue precisamente la revista Poets & Writers quien lo llega a considerar entre los cinco mejores nuevos autores de ficción del año, además de postularlo como candidato al Frank O’Connor International Short Story Award.

Las historias que componen este libro están ambientadas en lugares del medio oeste y sur de Estados Unidos, pero sobre todo en el interior de las personas que ejercen como protagonistas. Personajes que tienen algo en común: su identidad, de dónde proceden, cómo la educación ha marcado el carácter o como los progenitores influyen en éste. Aun así existe una diferencia entre los personajes masculinos y femeninos, ellas tienen la certeza –por haberlo llevado en su vientre– de que su hijo es suyo y por tanto asumen que el niño llevará su genética.

Sin duda la fuerza de los relatos se basa en los personajes, pues el autor es especial en la delimitación del protagonista, mostrándonos todo su interior, sus dudas, sus carencias, su destino –como si fuera predicho desde antes de nacer– y sus miedos.
Un libro que fue recopilación de aquellas historias en 2006 y donde sólo aparecerá el germen de Galvestone pero nada que ver con él. Sus narraciones, como he mencionado antes, basadas en sus personajes terminan de redondearse y se crecen en los escenarios. Tan es así que hay un lirismo y una poética que subyace en ellas, en sus descripciones y en su forma de ser contadas.

Puede parecer que a veces, al final de haber leído el relato de turno, el autor no ha contado nada, pero lo cierto es que es capaz de transmitir los pensamientos más angustiosos o banales del personaje y rodearlos de un excelente marco. La vida se hace real, los blancos, negros y grises son exactos, tal cual son las cosas y no hay mayor artificio literario que el no-artificio.

La soledad, el vacío, la falta de comunicación, la irresponsabilidad, los escenarios sórdidos y sobre todo el universo personal de cada uno, en su interior, son las herramientas que maneja nuestro autor para contarnos todo este microcosmos individual de cada uno de los personajes.

Recomendado para amantes de cuentos alternativos, de los que gustan de cierto lirismo narrativo en escenarios duros y para todos aquellos que quieran conocer al anterior Nic Pizzolato de True Detective o Galvestone.

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