¿Imágenes o sueños?

8 Abr

 

Nota previa : «El río Sandover» que ahí arriba vemos lo he fotografiado del «Libro de los Símbolos. Reflexiones sobre las imágenes arquetípicas.» En edición de Kathleen Martin, en TASCHEN.

La imagen que tiene ahí arriba es un cuadro pintado en 1989. El texto que se lee debajo de la reproducción dice :

El sueño de la artista Lily Sandover Kngwarreye. «El río Sandover», pintura. 1989. Australia

Como podrán observar en la imagen, las palabras que tratan de dar una cierta noticia u orientación sobre esta pintura australiana,  – que es contemporánea nuestra -, están ordenadas en dos líneas, aunque aquí nosotros las hemos citado de corrido, a fin de ganar espacio y dar una más nítida separación entre lo que es texto no propio, texto que reproducimos para los lectores, y el resto de lo que se escribe, que ya sí es algo nuestro, a salvo las oportunas citas literales que podamos necesitar.

Ahora nos podemos preguntar si el río que la artista australiana plasma en su pintura es algo el que recuerda de su visión directa del mismo, o es el que rememora de un sueño : lo que parece ser cosa más segura, si seguimos al pie de la letra lo que se nos dice en la edición de K. Martin. Pero sí que podemos, haciendo un ejercicio de generalización, dejar abierta de par en par las puertas de esta pregunta : ¿Son sueños las imágenes? 

La posibilidad de que un sueño sea similar a una imagen no debe, (casi diría mejor que no puede) descartarse, del mismo modo que tampoco debemos dejar la de lado la posibilidad de que muchos, o no pocos de los cuadros que el ser humano ha ido dejando a lo largo de la Historia de su vida en este mundo, pueden ser productos de sueños antes que un recuerdo : o memoria, viva en su mente, de algo visto en su vida de vigilia. Igual da que se trate de una manzana, un río, una calle o lo que fuere : casas de su ciudad, montes en invierno, el mar en su furia o en su tranquilo estar… Tenemos un infinito por delante.

Vuelvo un instante sobre la pregunta anteriormente recalcada y reitero lo mismo pero aclarando en qué sentido usamos ahora las palabras «sueños» e «imágenes» : si ambas cosas, lo que soñamos y lo que vemos, son «objetos mentales» que se forman en nuestro cerebro, los unos en la vigilia a través del órgano de la vista y los otros en el estado onírico del dormir cuando soñamos algo y lo recordamos luego, entonces la pregunta que hemos dejado ahí como una puerta de entrada a un mundo de elucubraciones tiene cierto sentido.

Aclarar estas cosas que se han planteado antes, sin entrar demasiado en la cuestión estrictamente científica del funcionamiento de nuestro cerebro, (cosa por lo demás fuera de mi alcance), ciñéndonos a lo que han dejado escrito pintores de la talla de René Magritte, o de Henri Michaux, ambos autores de muy sustanciosos escritos sobre el arte de pintar, nos va a llevar a trazar una línea que arrancará del origen mismo de la pintura, allá en la Edad del Reno o quién sabe si antes, y llegará hasta nuestros días.

En cualquier caso pensemos esto : salvo si el artista pinta con un modelo ante sí, como pueda ser en su estudio y previo acuerdo con un o una modelo, o bien en el medio natural, con su caballete y demás, todo pintor pinta lo que tiene en mente, lo que rememora, lo que vio y recuerda, o lo que imagina. Pero desde luego, pinta desde su mente. Por supuesto, dada una previa sensibilidad : no existe el arte ajeno a la sensibilidad humana.

Tendremos que volver sobre Magritte, a quien apenas nos hemos asomado, pero por ahora, y para dejar ante el lector esa reflexión con entera desnudez, me voy a limitar a citar unas palabras que podemos leer en la edición (que traduce y prologa Chantal Maillard) de «Escritos sobre Pintura» de Henri Michaux, en Colección de Arquitectura. 40. año 2000. He aquí las palabras de H. Michaux :

«Mientras estaba en el frío de las proximidades de la muerte, contemplé como por última vez a los seres, profundamente.

Al contacto mortal de esta mirada de hielo, todo lo que no era esencial desapareció.

Sin embargo hurgaba en ellos, queriendo retener de ellos algo que ni siquiera la Muerte pudiese desarticular.

Adelgazaron y se hallaron al fin reducidos a una suerte de alfabeto que hubiese podido servir en otro mundo, en cualquier mundo.»

( de «Alfabeto», en Épreuves, exorcismes )

 

 

 

5 respuestas a «¿Imágenes o sueños?»

  1. Tanto los «Escritos Completos» de René Magritte como los «Escritos sobre Pintura» de Henri Michaux, éstos últimos con prólogo de Chantal Maillard, nos van a servir para orientarnos en estos temas que, o mucho me equivoco, o forman parte del ser humano desde sus primeros pasos en esta tierra.

  2. ¿Podemos considerar que en gran medida el arte de la pintura está en los casos de los más grandes maestros unos pasos por delante del mismo «arte de pensar»? Dicho de otro modo : ¿Acaso la Pintura no es en muchos aspectos superior a la Filosofía?

  3. Debemos suponer que en el cerebro animal en general, y humano en particular, la formación de imágenes es un hecho en principio más útil y también más primario, más elemental, que la formación de pensamientos. Se pinta antes que se escribe.

  4. Hay «marañas de pinturas negras» en zonas de la Cueva que recuerdan aspectos centrales de cuadros modernos. Como si la pintura fuera en ocasiones un «arte intemporal».

  5. Cuando digo «aspectos centrales» me refiero a que la casi totalidad del cuadro consiste en ese mismo (o muy similar, mejor que «mismo») tipo de formas en negro o en rojo, ocre, etc.

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