Todos somos víctimas del terrorismo. Los verdugos porque se envilecen, las víctimas porque mueren o resultan mutiladas física y psíquicamente, las familias de las víctimas porque quedan destruidas, los testigos porque contemplan horrorizados la maldad… Se piensa poco en los efectos psicológicos de estas atrocidades. En el miedo, el pesimismo, la tristeza, la inseguridad, el pánico, la psicosis, la angustia, las pesadillas…Todo es dolor. Todo es destrucción.
¿Qué mundo estamos construyendo? ¿Qué tipo de ciudadanos y ciudadanas estamos formando? ¿Hacia dónde nos dirigimos por estos caminos de irracionalidad y de perversión? Me preocupa el mundo que dejamos a nuestros hijos. Me preocupa también el tipo de hijos que estamos educando para el mundo. “Que el hombre no se muestre indiferente ante el terrorismo es la razón de la existencia”, dice en estos días aciagos Juan Luis Arsuaga.
¿Por qué se repiten estos actos con una frecuencia tan desesperante? ¿Por qué hace acto de presencia el horror de esta forma tan despiadada? ¿Por qué corre la sangre de inocentes a raudales en escuelas, calles y lugares de ocio y diversión? ¿Por qué esta dolorosa cadena de 129 muertos inocentes que han llenado de oscuridad la Ciudad de la Luz? Hay muchas causas y razones, seguramente. Una de ellas es el fanatismo. Los animales no son fanáticos. La única especie que tiene fanatismo es la nuestra.. El campo de expresión genuino del fanatismo es la religión. Fascislamistas, llama a estos desalmados Bernard-Henry Lévy en su contundente artículo publicado en El País el pasado día 16 con el título “La guerra, manual de Instrucciones”.
Las religiones anteponen su moral a la ética. Si tuviesen en cuenta la ética, en lugar de aplicar su moral particular, no se habría quemado vivos a los herejes, ni se hubiesen bendecido las guerras (cínicamente llamadas santas), ni ahora padeceríamos este gran horror al grito de “Alá es el más grande”. Si se tuviera en cuenta la ética, nadie podría sostener que morir matando infieles es conquistar el Paraíso donde esperan al suicida 72 bellas huríes. (Por cierto, ¿qué premio tienen las mujeres cuando se inmolan? Al parecer, garantizan la unión con su marido para siempre).
El término fanático procede de fanum: templo. El término fanáticus se asignaba a los sacerdotes presos de un delirio sagrado. Designa una actitud de defensa exaltada y excluyente de una causa, así como el empleo de todos los medios para imponerla. El fanatismo no permite el término medio y divide a los hombres en amigos y adversarios, fieles o infieles.
“La religiosidad monoteísta occidental, comparada con la espiritualidad oriental, es tierra abonada mucho más fecunda para el fanatismo: frente a los libros sagrados de los hindúes o budistas, que predican la paz interior y prohíben matar animales, las religiones hebrea, cristiana y mahometana son cuna y escuela de violencia”, dice Jorge Vigil en su “Diccionario razonado de vicios, pecados y enfermedades morales”. No quiero con esto decir que el islam tenga afinidad alguna con el mal. Existe un islam manso, misericordioso, apasionado por la tolerancia y la paz. Es para congratularse que aparezcan muchos musulmanes diciendo: “No en mi nombre”. Parece que los imanes de las mezquitas de París condenarán los atentados. Es hora de que desde dentro del islam se condenen los atentados y de que los yihadistas sean calificados -desde dentro, repito- como terroristas.
Nietzsche, en el marco de la crítica a la moral de la resignación afirma que “el fanatismo es la única fuerza de voluntad de que son capaces los débiles”. Para Voltaire, el fanatismo es “efecto de una conciencia falsa, que sujeta la religión a los caprichos de la fantasía y el desconcierto de las pasiones”.
El mismo Voltaire, en El filósofo ignorante, dice: “Veo que hoy, en este siglo que es la aurora de la razón, algunas cabezas de esa hidra del fanatismo vuelven a renacer… Por lo que a mí respecta, creo que la verdad no debe ocultarse ante esos monstruos, lo mismo que no debemos abstenernos de tomar alimentos por temor a ser envenenados”.
Me pregunto qué les enseñó la escuela a los terroristas, cómo ha sido posible que su mente evolucione hasta esos extremos de crueldad y de irracionalidad. Me pregunto por los caminos que ha recorrido el corazón de esos fanáticos para llegar a esos extremos de maldad y de insensibilidad ante el dolor ajeno. Me pregunto por la fuerza y la estrategia de los proselitistas que captan para una causa de tan marcada crueldad a personas que en la infancia estaban cargadas de inocencia. Me pregunto por su fe, como sentimiento irracional. ¿Por qué derroteros llevan los “formadores” a esas personas a planificar, organizar y perpetrar estas masacres? ¿Quién les ha metido esas ideas en la cabeza? ¿En nombre de qué Dios se puede matar así de cruelmente? ¿En nombre de qué causa?
Hoy hemos salido, profesores, alumnos y personal de administración y servicios, a las puertas de las Facultades de Ciencias de la Educación y Psicología de la Universidad Málaga para manifestar nuestra repulsa hacia el terrorismo y nuestra solidaridad con las víctimas. Mientras ese mágico minuto transcurría en el silencio compungido, me preguntaba por las medidas que se toman para evitar futuros atentados (o para castigar los cometidos). Muchas de ellas de carácter inmediato y violento. Bombardeos, acciones de guerra, misiones destructivas… Una espiral de violencia que no tendrá fin. Uno de los terroristas gritó en la discoteca Bataclan que se trabaja de una venganza por lo que estaban haciendo con ellos en Siria. Respuestas inducidas por las vísceras, por la venganza, por la rabia, por el dolor…Hollande dice que “no se trata de contener sino de destruir el Estado Islámico”. Así de sencillo y de claro: de aniquilarlo. Pero luego llegarán nuevos atentados. Es la guerra. ¿Dónde se cierra esta espiral maldita, este círculo vicioso? ¿Cuándo la hidra dejará de multiplicar sus cabezas? El perdón es de Dios, dicen algunos, nuestro deber es mandar a los terroristas con Él.
Pensaba en otras medidas de más largo plazo y de mayor eficacia de las que pocos hablan. Pensaba en la erradicación del discurso del odio y de la exclusión. En la superación del fanatismo. Pensaba en la educación. En la educación, no en el adoctrinamiento que han sufrido los fanáticos. Una educación para la tolerancia, para la paz, para la solidaridad, para la compasión, para el respeto a la dignidad de todos los seres humanos. Creo que la hidra del fanatismo solo puede ser derrotada por la educación. Aprender a pensar y aprender a convivir son los únicos venenos mortales para ella.
Entrañable Maestro y Amigo Miguel Ángel: Un saludo cordial y mi gratitud por el artículo que nos regalas, como todos los sábados.
Abordas varias cuestiones, porque esa «hidra» es compleja para la razón y la conciencia ética, y para las personas de corazón bien predispuesto.
No cabe duda de que los hechos del fatídico 13 N no obedecen a algo puntual, sino que son (por racionalizar lo irracional de los atentados) fruto de un cúmulo o concatenación de muchas «malas» cosas de este Occidente neoliberal ensimismado y arrogante. Todo es sorprendente para desgracia: ¿Qué y quiénes atrapan a esos jóvenes que se aniquilan con explosivos (no «autoinmolan», que implica un cierto valor semántico de altruismo)? ¿Qué hemos hecho como individuos y como ciudadanos representados (o no) por los gobiernos? Resulta aterrador todo: que jóvenes de entre 18-30 años hayan sido los criminales; muchos,jóvenes occidentales islamistas (que no «islámicos»). Muy arriesgada -considero- la reacción visceral del presidente: ¿No hay otras vías, como constituir coaliciones internacionales de paz, intentos de diálogo indirectos? No olvidemos que la industria occidental de armas es un factor clave.
Termino: no me gusta el recurrente y recurrido binomio antitético «civilización/barbarie» con el que algún político despacha unos hechos complejos. Si esta Vieja Europa es baluarte del cristianismo, se dice, habría que recordar la frase bíblica de que el mal no debe vencerse con el mal.
Muy bien, Miguel Ángel. Aprender a pensar y aprender a convivir es todo uno; no podemos tomar partido tan fácilmente como han hecho algunos. ¿Cuántas muertes ha producido el bombardeo de Francia en Siria? Ni idea, ni noticias, ni banderas con crepones.
Hace tiempo dije que soy respetuoso con todas las maneras de pensar, porque tengo que respetarme todas las maneras de pensar que he tenido, incluso la etapa en que pensaba de otra manera muy distinta. Podemos decir que hasta los integrismos son respetuosos, siempre que no nos desintegren la convivencia.
No es de fiar lo que dice un ministro (nuestro tenía que ser) que si fuéramos patriotas como los franceses, otro gallo nos cantaría. Pienso que el gallo sería portugués o francés o teutón. Además todos sabemos que el gallo español se lleva el pienso y lo que no es pienso (y no por la manera ética de pensar) a Andorra y a otro paraísos fiscales. Los franceses (no todos) nos han legado la palabra chovinismo. El chovinismo o chauvinismo, también conocido coloquialmente como patrioterismo, es la creencia narcisista próxima a la paranoia y la mitomanía de que lo propio del país o región al que uno pertenece es lo mejor en cualquier aspecto. Los hijos de la patria, así como los padres de la misma, todos se han creído que son los enviados de Dios.
Pienso que el patrioterismo como hijo predilecto del patriarcado nos ha metido en vena el transgénico del fanatismo. Aunque bien mirado no es más que un cultivo del laboratorio del capitalismo y su economía de guerra, que tiene a la Tierra sitiada por fuera, con las armas, y por dentro, con la crueldad.
Lo que dices, en conclusión: aprender pensar y aprender a convivir.
Querido Maestro!
Otra vez nos toca en lo más profundo de nuestro ser la sin razón y la ira de unos horribles pensamientos que han causado los terribles hechos ocurridos en París.
Violencia extrema,que ha dañado a los ciudadanos de a pie,siempre los más perjudicados.
Lo que está pasando no se entiende por cabezas normales que no saben expresar con palabras y hechos que tanta maldad pueda adentrarse en un alma humana.Humanos no son los que realizan este tipos de barbarie!
El mayor problema que yo veo es que utilizan a los niños para que sean los mejores adeptos.
Que pena, que desolación!
Los niños deberían ser intocables!
Es sin duda como usted dice la educación,en la casa .en la escuela, en la calle la que tiene que dar ejemplos de amor y de repulsa ante esta masacres.
Todas las personas de maneras individuales tenemos el deber de sembrar en los pequeños que tenemos a nuestro alrededor mechas de afectos y de paz, pinceladas de sonrisas y alegrias en su corazón.
Me incorporo otra vez a su blog,después de algunas semanas ausentes.
Sin más me despido con un afectuoso y cordial saludo.
Un humano, europeo, francés, español, gallego hoy en proceso de Erasmus, en la Facultad de Formación del Profesorado de Lugo escribió al final de su «oración»
«Pienso que el docente tiene un papel enorme en esa lucha en contra del oscurantismo, y debe saberlo antes de empezar con su carrera».
Lo cual representa que ya antes han debido ayudarle a él mismo en ese proceso (incluso desde el momento en que ha sido concebid), lo que extiende la responsabilidad (la ética) a todos, y no circunscribe la acción (moral) solo a los próximos.
Gracias Miguel Ángel por estar siempre en el sitio que crees debes estar y ayudarnos a intentar ser algo mejores.
Le pregunté a mi amigo Hamid, psicólogo de origen marroquí, que dónde hacían los musulmanes cordobeses, como él, las oraciones los viernes. Me contestó que en la plaza de Colón. “¿En la plaza de Colón? ¿Al aire libre?”, le inquirí un tanto extrañado. “No allí hay un pequeño templete blanco que mira a La Meca, como lo hacen los templos musulmanes, como bien sabes”.
Me quedé verdaderamente sorprendido, porque ese pequeñísimo templete siempre lo había visto, pero no sabía que era el lugar al que tenían que acudir a realizar sus oraciones porque no lo pueden hacer frente al mihrab de la Mezquita de Córdoba, el mayor templo de origen árabe-musulmán de todo Occidente.
Algunas cosas más:
Hace unos años, una turista que visitaba la Mezquita se arrodilló delante del mihrab para orar y fue inmediatamente detenida.
En el año 2006, la diócesis de Córdoba inmatriculó por 30 euros la Mezquita (que tiene en su interior una catedral católica), siguiendo una ley franquista que Aznar actualizó. Este hecho ha sido denunciado por la Plataforma Mezquita-Catedral y Europa Laica, llevándolo incluso al Parlamento europeo.
Aunque no se declaran beneficios, se calcula que la Mezquita de Córdoba (segundo monumento de España más visitado tras El Alhambra de Granada), son de 10 u 11 millones de euros anuales, que no revierte en el pueblo, sino en las arcas eclesiásticas.
Por otro lado, La Mezquita (que el obispado ha cambiado su denominación por Catedral de Córdoba), es un bien público usurpado por la Iglesia católica, teniendo el rango de Patrimonio de la Humanidad desde hace tres décadas.
En la actualidad, el obispo de Córdoba, el señor Demetrio Fernández, pretende que se quite una puerta-celosía diseñada por uno de los grandes arquitectos cordobeses, Rafael de la Hoz, en la década de los setenta, para que pasen todas las cofradías por la Mezquita durante la Semana Santa (¡Hay mayor provocación hacia los musulmanes y hacia el pueblo de Córdoba que no ‘comulga’ con la prepotencia del señor obispo!).
ICOMOS, organización consultora que tiene por finalidad la protección de los monumentos nacionales, lo ha denunciado a la Unesco, para que se pronuncie sobre este atropello.
Más de cien profesores e intelectuales de distintos países y universidades también se han pronunciado contra la apropiación de la Mezquita por parte de la Iglesia católica.
Élie Barnavi, director científico del Museo de Europa de Bruselas, en su magnífico libro titulado “Las religiones asesinas” (que yo recomendaría encarecidamente su lectura), nos dice que “todas las religiones son políticas”, en el sentido de que luchan por afianzar su poder político, económico y social.
Tras lo expuesto de modo un tanto fragmentario, me pregunto: ¿No sería adecuado tratar también las intolerancias, los privilegios e, incluso, los fanatismos en los que se encuentran insertas las distintas religiones de cada país, también en el nuestro, o solamente lo hacemos cuando hay otras más fanáticas aún allende las fronteras?
Estoy de acuerdo con Miguel Ángel cuando habla de que debe de haber una ética cívica común que deberían respetar las distintas confesiones religiosas, pues en una sociedad plural lo que debe existir es una Ley de Libertad de Conciencia en la que tengan cabida tanto las creencias religiosas como las expresiones de los que tienen un pensamiento laico y humanista.
Y es aquí hacia donde tenemos que llegar: hacia un Estado laico (no “aconfesional” con reconocimiento de la Iglesia católica, como sucede en España) en el que haya una clara separación entre lo público, que debe ser totalmente neutral, y las creencias religiosas, que deben ser privadas. (¿Hablamos algún día de la religión en las escuelas públicas?)
Así sería posible la convivencia de todos, independientemente de sus ideas y creencias. Pero esta es una ardua lucha que hay que mantener, aunque el horizonte sea bien lejano.
Un cordial saludo a todos los que siguen este blog, desde la ciudad que vio la luz del gran filósofo árabe-musulmán Averroes, al que convendría conocer para entender que hubo una vez un período de brillantez en la cultura musulmana, antes de que naciera, por ejemplo, el wahabismo, integrismo que intentan difundir “nuestros amigos” de Arabia Saudí, país donde el fanatismo y el terror están instalados.
HOLA A ToDOS LOS AMIGOS DE MIGUEL ANGEL.
OTRA VEZ ME HA PASADO,SOY UN TORPE;No sé qué tecla del portátil he tocado que todo lo que tenía escrito en una hora se ha ido al mundo de los pensamientos.
RESUMIENDO E IDEAS FUERZA.
Respeto a la dignidad de todos los sres humanos.
Todos somos vítimas del terrorismo.¿Quién es el culpable de su existencia? ¿La mano ejecutora o la mano que no se ve?
¿Qué mundo estamos construyendo? ¿ quién construye el mundo? ¿ quién es el que toma las decisiones de hacia donde debemos ir? ¿ Se va hacia donde se dice que se va?
El fanatismo no permite el término medio. O estáis conmigo o contra mí; o me votáis a mí o a la nada, a la inesperiencia, a la pérdida de lo avanzado. ¿hacia dónde?No hay término medio. Fanatismo.
Escuho la radio. Es momento de que todos opinen. Pedro Sánchez: CON LA RAZON VENCEREMOS AL FANATISMO COMO HEMOS VENCIDO A ETA. Bien. ¿Con la razón de quién? ¿Hay una única razón?
Miguel Angel, la escuela no lo puede ni lo explica todo. La educación tampoco. Ante situaciones muy similares y pasando por los mismos lugares, se dan respuestas e individuos muy distintos.
Vivimos en un mundo de violencia. Violento no es sólo matar o ser matado.¿ Qué sociedad es más violenta, (qué mundo), la que usa el que llamamos terrorismo ola que usa elque llamamos ejércitos en cumpimiento de ódenes. Ambos matan. Ambos son unos perfectos mal educados. No dejan lugar a la comunicación para buscar la paz.
A ver si de lo que voy a comentar ahora se sonsaca lo que quiero comparar. Hoy hay un Madrid-Barsa y un Deportivo Celta. Se habla de altas medidas de seguridad.Policías ,caballos,gente dirigida como ganado…
Hay una industria de las armas que genera mucho dinero y crearía mucho paro; de alguna forma hay que controlar la superpoblación. Estamos llenos de información interesada por quien paga esos medios, sus dueños, y eso nos hace crearnos ideas erróneas dado que hay cosas que nose dicen ni se repiten como otras: nuestro modo de vida está en peligro, es atacado; nuestro deber es defenderlo. De los otros nos se dice nada o se miente.LA PAZ NO INTERESA. ES BARATA. NO VENDE.Pensemos en cualquier cosa, si interesa el follón, la frase, el accidente…ya no llega la ficción, es mejor la realidad televisada, escrita, discutida.
No echo la culpa a la mano ejecutora, sino a quien tiene el poder. ¿quién? ¿Ah? ¿y yo qué sé? PERO CREO QUE NO FUERON A ESCUELAS DE BARRIO Y TAMPOCO SON UNOS ANALFABETOS.
Hubo momentos en que salimos a la calle y gritamos NO A LA QUERRA, caso cero. Lo digo por los que piensen que al estar en una democracia mandan quienes nosotros escogemos. NOS MIENTEN POR EL VOTO, DE VOCA Y DE ACTITUD, DE IMAGEN; LUEGO INCUMPLEN LO PACTADO, NO NOS REPRESENTAN. La mayoría en todo el mundo SUFRIMOS ALGÚN TIPO DE VIOLENCIA Y SOMOS GENTE DE BIEN Y DE PAZ. UN RECUERDO PARA SUSO JARES.
¿Nos pondremos de acuerdo en cómo debe ser ese mundo al que debemos llevar a nuestros hijos? ¿ Son capaces de llegar a un acuerdo sobre ese mundo en una sola nación los partidos políticos? ¿Y en un colegio los profesores?
No sé cuál será vuestra respuesta, pero la mía es pesimista
Cuantas más opiniones leo o escucho, más desconcertado estoy.
Si siento tristeza porque han asesinado vilmente a 130 personas (hasta el momento) en París y, además, pongo un filtro en el facebook con la bandera de Francia. Y debo ser un hipócrita porque Francia bombardea de forma indiscriminada a los sirios y producen también muertes, por qué no decirlo, asesinatos viles entre la población, porque he de imaginar que las bombas inteligentes, por muy inteligentes que sean, no atinarán directametne en los yihaidístas. Se nos dice que han muerto infinidad de niños, pero como no hay un dispositivo mediático con el de París, no podemos corroborarlo.
Sí, siento tristeza por el pueblo pasino y me solidarizo con el pueblo francés. Es humano. Y siento tristeza porque son mis vecinos, porque están cerca, porque muchos de nuestrso hijos/as están estudiando por media Europa. Creo que es ético y civilizado sentir empatía con un pueblo con el que hemos estado rivalizando a lo largo de nuestra historia.
Dicho ésto, eso no significa que esté de acuerdo con la decisión tomado por los políticos franceses.
También siento tristeza por las personas que mueren en otros lugares del mundo de forma violenta, inhumana, vil,… Lo siento de otra forma. Igual sucede en nuestra vida cotidiana, no se siente la misma tristeza por la muerte de un familiar que por la de un desconocido y no por eso se es un hipócrita.
Efectivamente el que mata en nombre de cualquier religión es un fanático. Estas muertes las producen unos fanáticos supuestamente islamistas, porque no dejo de oir y leer que el islam es otra cosa muy distinta. Las otras, las de los bombardeos, presuntamente son laicos. Los cristianos en otras épocas también mataban en nombre de Dios. En la actualidad muchos hombres matan a sus mujeres y no les preguntamos qué religión procesan,los terroristas de ETA mataban en nombre de independencia, se mata a un hincha de otro equipo de fútbol… El caso es que para matar siempre se tiene una razón. La muerte, el asesinato no tiene razón alguna, sea por la motivo que sea.
Miguel Ángel habla de la educación como el arma más potente para frenar los fanatismos. Pues que educación más mala estamos dando porque no hacertamos a frenarlos en ningún sitio.
Pero claro, seguro que debo estar equivocado, cada vez que leo o escuho algo nuevo me doy cuenta de mi prejuicios producto de la ética con la que se me ha educado.
lapsus al borrar una idea anterior, queería decir acertamos…
Todos tenemos derecho a ganarnos la vida como nos dejan. Quiero decir que no le echo la culpa al mensajero. A veces tenemos unos intereses muy pequeñitos que nos obligan a tragar nuestro orgullo y pensar en nuestra pequeña familia que come y requiere de nuestra presencia.
FORMA DE SENTARSE A HABLAR DE PAZ, A COMUNICARSE, A LLEGAR A ACUERDOS DE MÍNIMOS:que quien tiene el poder de decisión para la guerra o cualquier posición privilegiada de diálogo, se ponga él en primera fila o mande a sus hijos e hijas a primera línea del conflicto.
Estos hechos dan carta blanca para más recorte de libertades en nombre de la seguridad, para generar mas miedo ante el que no es igual que tú(de rico), el que no se mueve en tus clubes.
Creo que la esencia de toda religión es la paz, ayuda, humildad,hospitalidad. Qué palabra, cuando decimos es un pueblo muy hopitalario. Luego pasa lo que pasa con las Élites, no de las bases, como en cualquier organización sea religiosa, política o sindical.
Me acuerdo de una película que vi en la tele no hace mucho, una vez ocurrido lo de las Torres Gemelas, de un chico del islam con algún tipo de deficiencia que tenía que ver al presidente de EEUU, para decirle que NO ERA UN TERRORISTA,y, aún por encima denuncia a unos radicales que intentaban matarlo.No puedo olvidarme tampoco del mensaje de la película La Misión con Robert Deniro, cuando el niño le da sus armas. Bien es cierto que Jesús dijo que quien a hierro mata a hierro muere. Soy hombre de paz, no puede ser de otra forma, pero si, pongámonos en situación,vemos a uno de nuestros hijos en peligro grande provocado por otra persona,¿nos ponemos las manos en los bolsillos? ¿No hacemos nada?
MI hijo de nueve años está conmigo y en cualquier serie de televisión hay policías, disparos, muertos, y entonces él , como ya se lo tengo explicado mil veces ante sus preguntas me dice ¿es de mentira no?,y yo , pues sí es una película. Ante la pregunta o represalia que pueda estar pensando alguno yo me preguntaría, ¿es mejor ver el telediario o las noticias? Mi respuesta ahí sería sí, son muertos de verdad, además la tele con sus imágenes ya se encarga en que no haya ninguna duda.(me refiero a si me pregunta si los muertos son de verdad)
No es que quiera ser malo, pero no hay mal que por bien no venga. Plazas de hotel anuladas pero mayor audiencia televisiva.Unos tienen que enterrar a sus familiares pero otros consiguen motivos para ganar más dinero, y ganar algún premio profesional por un trabajo bien hecho, un ondas, mejor foto,…nuestro mundo es así.
Mientras yo reflesiono y divago sobre nuestro mundo, el Barsa va ganando 0-2. Nuestro mundo es así. En este momento alguien está bombardeando algún poblado, otros maquinando en dónde hacer más daño con muy poco, otros cómo quitar réditos políticos para las elecciones, otras llevando 40 años in situ ayudando en lo que pueden en un pequeño poblado en busca de quién le puede hacer un pozo.
Un minuto de silencio. El mundo va muy de prisa.¿Qué piensa la gente laica o de cualquier religión en un minuto?
Un minuto puede ser suficiente para vivir o morir, el azar, pero para pensar , honrrar a alguien, o rezar una horación, o escuchar una música apropiada, que menos QUE EL SILENCIO REFLEXIVO DE CINCO MINUTOS. No, el tiempo, el día a día debe seguir.HAGAMOS COSAS, CAMBIEMOS TODO PARA QUE TODO SIGA IGUAL.
Demasiados universitarios. Sí. Y para dar ejemplo los hijos de los ministros van a estudiar FP. ¿Ah no? La escuela,la educación es inferior en fuerza al dinero, al fanatismo (el de aquí), al pelotazo, a la corrupción. Explicarlo me llevaría muchas líneas. Y lo digo no para tirar la toalla, sino para saber en dónde estamos.
Se reían del que propuso algo así como el encuentro de civilizaciones.
problemática cuestión que tiene, a mi juicio, una doble vertiente.
1. ¿Por qué pasan estas cosas? ¿Cómo es posible llegar a tanta perversión?
2. ¿Qué hay que hacer? ¿Cómo se debe actuar después de estos hechos?
Las dos están conectadas. Si se responde bien a la primera estaremos en mejores condiciones de dar respuesta a la segunda.
A bombazo limpio no se solucionan las cosas. Por cierto, nadie habla del numero de muertos en Siria.
Me apunto a la tesis del autor.
Saludos.
Hay que reflexionar sobre las causas y la soluciones. Yo también me temo que los bombazos produzcan poco más que muchos cadáveres y mucho sufrimiento…
Creo que que hay que pensar en otras soluciones. Y no digo que no haya que hacer nada hasta que, por ese camino, se consiga. Pero solo eso, no.
Primero porque puede estar dominado todo por la venganza. Segundo porque no está claro que se pueda acabar así con la fe, el fanatismo y la locura.
Cuánta razón.
Estos fanáticos que siembran la muerte por doquier han sido indoctrinados, no educados.
El indoctrinador no deja libertad al sujeto, le impone los valores, no se los propone.
Por otra parte, no hay causa o patria o dios que justifiquen la muerte de inocentes.
Por eso también condeno la muerte de inocentes en Siria. ¡Por qué no se sabe cuántos mueren? ¿Por qué no se sabe si mueren niños?
Hay que buscar otras soluciones.
Qué gran artículo y que grandes comentarios.
Que terrible es padecer los terrorismos de Estados y que terrible es padecer los terrorismos de pequeños grupos dispuestos a todo, hasta de dar sus vidas.
Las injusticias son las semillas de todo tipo de rebeliones. El mundo no se rige por la justicia, se rige por el poder y así nos va.
El islamismo no se gobierna por nuestros parámetros, para ellos la religión, la política, las leyes son todo uno. No hay diferencia de poderes. Su concepto sobre la vida, la ética, las relaciones humanas no las ven como nosotros. Yo creo que la solución está en el diálogo entre civilizaciones, llegar a acuerdos y luchar de verdad contra las injusticias vengan del lado que vengan.
Es increíble que con tantos siglos de historia sigamos cometiendo los mismos errores. ¿Es que seguimos pensando que las guerras son la solución? Es curioso, pero gastamos ingentes cantidades de dinero inventando artilugios para matar y apenas gastamos para salvar vidas y desarrollar a los pueblos.
No sé que es lo que hacer a nivel personal, parece que solo nos queda observar atónitos lo que sucede.
Saludos a todos
Los crímenes no nos pueden dejar indiferentes. No se puede mirar para otro lado. Cuando mueren inocentes hay preguntarse qué es lo que sucede y hay que ponerse a trabajar para evitar que sigan muriendo.
Lo sucedido en Paría es muy grave. Y lo es mas si se considera que pueden repetirse los hechos y que nadie puede sentirse seguro en ninguna parte.
No podemos construir una sociedad en la que los niños no puedan sentirse felices y seguros.
Me parece terrible que se invoque el nombre de Dios para matar. ¿Qué perversión ha sufrido el pensamiento y el sentimiento de los teroristas?
Y la gran pregunta: ¿QUÉ MAESTROS ENSEÑAN ESAS COSAS?
Hay que permanecer atentos.
Analizar.
Condenar los atentados.
Elevar la voz. No quedarse callados.
Comprometerse con la educación.
Yo creo, con el autor, que la solución más eficaz a largo plazo.
Pero, claro algo hay que hacer de inmediato.
Pero eso que hay que hacer de inmediato NO ES SOLO bombardear.
Y luego hay que considerar las contradicciones y las hipocresías: la venta de armas. la compra de petróleo…
Hay que denunciarlo también.
La pregunta final de Elsa tiene mucho calado.
Porque esos inductores, esos adoctrinados se suelen quedar en casita mientras se inmolan los jóvenes ilusos que se creen esas historias y esas promesas.
No predican con el ejemplo. Les prometen recompensas eternas en el otro mundo pero ellos se quedan en este para seguir haciendo prosélitos.
Saludos a los seguidores del blog y especiales al autor.
Para pensar.
Para denunciar.
Para actuar.
No podemos permanecer impasibles ante estas masacres. Entre una y otra hay que actuar para no se produzcan más.
Medidas inmediatas y medidas a largo plazo.
De particulars, de ONGs y de gobiernos.
El fanatismo es una enfermedad de la mente. Pero contraída voluntariamente. Los proselitistas se las arreglan para que los seguidores se conviertan en terroristas.
Cuesta creer que haya gente tan perversa que mete en la cabeza de jóvenes sin formación esas ideas tan terribles que les llevan a la muerte. Y, sobre todo, a matar inocentes.
Los proselitistas tienen más culpa que los que matan.
Estoy de acuerdo con Carlos Benavides.
Los proselitistas tienen mucha responsabilidad en las muertes.
Ellos han industriando a su seguidores. Les han metido en la cabeza ideas éticamente reprobables. Les han contado mentiras que ellos se han creído a pie juntillas.
Una locura organizada.
Qué error. Qué horror.