Con el Ferragosto ardiendo, la mar malagueña, aunque manchada de nata marrón, está en reposo. Las olas de la política apenas agitan la marejada, las putas de la calle se multiplican, The First Lady, Michelle Obama viene, y toda Málaga está contra el Súper en el Puerto. Feliz calor
La hija del farero. No, no es una película de John Houston, sino el apelativo con que ya se conoce a María Gámez. Candidata oficial del PSOE, no oficiosa, a disputar la alcaldía a Paco de la Torre, actual alcalde y favorito ganador. Y aunque su vida real tiene frisos de ficción, ahora se enfrenta al primer gran reto de su vida política: ganar en una plaza fuerte del PP. La ha perseguido la suerte. Estudió y terminó el bachillerato gracias a un benefactor anónimo; concluyo Derecho, mediante el esfuerzo personal de estudiar trabajando; entró en la administración pública tras ganar sus oposiciones; llegó a la política de carné en 2004 por la vía de los técnicos y, en apenas seis años, ya es candidata a presidir Málaga, ganando la pre-carrera electoral a cinco candidatos de postín. Si vence a de la Torre, sería un crack esta chica de 41 años, hija de un farero de familia numerosa. Si no gana, tendrá que asumir ser la cabeza del grupo de la oposición, durante cuatro años consecutivos y esperar a la próxima carrera municipal. Tesón y paciencia lo tiene demostrado, lo demás está por verse. No accede en buen momento, con los sondeos más negativos de la historia para el PSOE andaluz, la cuesta malagueña será un camino plagado de obstáculos.
Sangre y arena (Blood and Sand). No, tampoco es la película de Rouben Mamoulian, basada en la novela de Vicente Blasco Ibáñez, sino el sainete de un grupo de políticos de Cataluña, empeñados en borrar todo lo que huela a España, desde la peineta al faralao, desde el flamenco a la paella, desde el castellano a los toros de lidia. El próximo paso puede ser cambiar los colores de su senyera, que son los mismos que la española, le damos la idea gratis. Es curioso que en unos treinta años de gobierno de CiU nadie se ocupara de los toros en Cataluña, y ahora hayan sido fulminantes y tan coordinados en su votación. Olé, adéu a los toros.
Palmera malagueña. Sin ser una creación que se subastará en Sotheby’s, la Art Auction House más antigua y prestigiosa del mundo, el cartel de la Feria de este año, cumple con la tradición de ilustrar, sin muchos riesgos artísticos y en la línea de cada pintor, la efeméride más importante de la ciudad, tras la Semana Santa. Una palmera africana vestida de faralaes, que se asoma a la bahía en fiesta. Un cartel más, que año a año, con contadísimas excepciones –el de Lorenzo Saval, entre otros–, nutren una colección de figuración repetitiva sin ninguna propuesta para la historia del diseño gráfico de carteles.
Putas en las calles. Se pongan como se pongan los vecinos y los poligoneros, estas mujeres seguirán pululando por las esquinas. Mientras este problema social y económico no se resuelva desde sus raíces, las chicas seguirán haciendo la calle de día y de noche. Las mafias de la carne sexual no descansan y el negocio, en plena crisis, es próspero. Si los legisladores a nivel nacional no le meten la mano a este problema, pensando en cómo legalizar a esas trabajadoras, como se ha hecho con éxito en otros países del entorno europeo, la cuestión no se resolverá. Los ayuntamientos sólo pueden tomar medidas coercitivas, pero que nunca serán suficientes ni arreglarán el asunto permanentemente.
Welcome Mrs. Obama. Si es que los servicios de seguridad de la Casa Blanca no lo impiden, tras la propaganda diaria y gratuita en todos los medios de comunicación españoles y del resto del mundo, la señora Michelle LaVaughn Robinson Obama y su hija Sascha, vendrá unos días a Marbella a prestigiar y dar lustre a la joya de la corona de la Costa del Sol. No está mal, pues falta hacía que los anglosajones (americanos e ingleses) se dejen caer al sol marbellí, para acabar con la mancha negra del Gilismo, ‘nunca mais’. Lo que falta por preguntarle a Michelle es Why did you choose Marbella? Y como el andaluz tiene esa sintonía con la actualidad, esa gracia para aprovechar las oportunidades, que se nos escaparon en ‘Bienvenido Míster Marshall’, los vecinos de Estepona han invitado a doña Michelle a visitarles, total está al lado del Hotel Villa Padierna, vayan al enlace si desean leer la invitación: http://www.bandamusicaestepona.com/478-a-la-atencion-de-la-sra-obama.html