Para ir de rico y no quedar como un mentecato hay que tener posibles.
De partida se piensa que, en el caso contrario, para ir de pobres hay que serlo. Error. Por regla general, incluso para ir de paupérrimo desenfado hay que tener cubierto el sustento básico pues, de lo contrario, acabarás viviendo de aquello que has montado bajo el disfraz del altruismo.
En Málaga sucede que la cultura está canina. Raquítica. Muerta en vida. Mandando ella misma Whatsapps a clavos ardiendo para poder agarrarse a ellos. Y aún así, difícilmente aparecen y cuando lo hacen suelen ser falsos.
De igual modo, los movimientos sociales barra ciudadanos barra libres barra altruistas punto, se ven avocados al fracaso incluso cuando brillan de manera deslumbrante y es que, en la mayoría de los casos acaban prostituyéndose al mejor postor.
En ambos casos, cultura y movimientos sociales, nuestra ciudad está presenciando cómo irrumpen en estos sectores elementos externos con el único fin de pervertirlos. Igual un día toma las riendas de ellos un partido político convirtiendo las asociaciones en chiringuitos publicitarios electoralistas, que lo mismo aparece un iluminado –o varios- y alzan la bandera de la comuna cultureta progresista con el único fin de echar el rato y contarle a los demás que han leído a Engels.
Ningún problema. Cada uno es libre de invertir –o tirar- su tiempo donde quiera. A unos les da por practicar running –correr de toda la vida-, a otros por echar las horas en una cofradía y hay quien decide ponerse la careta de ayudante de prójimo sin alzacuellos y trabajar por una civilización más justa. ¡Qué bien! O que mal. Pero resulta que en Málaga hay quien no ha sabido controlar las gestiones y además de ser okupas de edificios, se han convertido en pequeños dictadores desde el búnker –sin ser suyo- del buenrrollismo.
Un claro ejemplo de eso está sucediendo a día de hoy con La Casa Invisible. Este lugar nace cuando un grupo de personas decide okupar –ahora se dice okupar con k, antes se decía meterse en una casa que no es tuya y quedártela- un edificio en calle Nosquera con fines estupendos. Bravo por ellos con respecto a los fines. Mal por ellos con respecto a lo quedarse con lo que no es tuyo. A robar a Sierra Morena.
Esta iniciativa contaba con la sonrisas de todos y las palmaditas falsas de los políticos tras ver que era imposible echarlos a patadas. Para que se hagan una idea, imaginen si de repente el consistorio hiciera la vista gorda con su multa por aparcar mal, o les perdonara una factura de agua, una luz cogida sin permiso o un graffiti en un local privado. Je. Ni en sueños sucedería salvo que tengas papás comunistas con contactos o seas objeto de deseo para cualquier político de segunda fila que consiga que el alcalde se haga la foto con varios tipos y parezca que es un señor moderno.
Todo correcto. La milonga de siempre y la injusticia para muchos. Según ellos –copiado de su web “La Casa Invisible nace de un gesto de desobediencia civil ante la falta de equipamientos socioculturales y unas políticas públicas que han primado el enriquecimiento de unos pocos antes que el bienestar de la ciudadanía”.
Correcto. –A ver si tengo un rato y hago un gesto de desobediencia civil y me alargo al corte inglés a por un jamón Joselito ante la falta de equipamientos ibéricos de bellota en mi cocina-. Es broma. Es bueno hacer cosas por los demás. Es bueno practicar la bondad suprema y el trabajo por el prójimo. Bravo.
Pero aquí ha pasado algo. Y algo feo. Y es que un espacio –cogido sin ser suyo, repito-, que nació con esas premisas tendría que seguir subsistiendo. Pero no todo huele a flores por allí. Desde su inicio se ha venido conociendo que había quien tenía intereses más allá de lo ajeno. Y sucede que, cuando alguien se asoma a ver qué se cuece, se encuentra con el guantazo. O en este caso, el escupitajo.
Hace unos días, tras publicar un compañero de El Observador –Alberto R. Aguiar– una noticia en la que quedaba en entredicho el interés real de este grupo de personas cada vez que mueve un dedo, nuestro amigo Alberto saboreó en poco espacio de tiempo, lo que es quitarle un chupete a un niño. O lo que es mejor, observar cómo si le quitas al cochino el barro, éste se mosquea y muerde. Qué curioso. Claro, hay otra versión de los hechos –ofrecida aquí http://lacolmenamalaga.wordpress.com–, según la cual Alberto participaba en el proyecto y que, después, lo traicionó, confiando información confidencial a El Observador; también dicen que las personas que se encontraron con el periodista siempre tuvieron con él «una actitud dialogante», y que las frases que se han publicado han sido «sacadas de contexto». Cada uno que crea a quien estime conveniente; yo creo a mi compañero Alberto.
Poco después de sacar los colores públicamente a las personas del entorno de La Invisible, Alberto tuvo que soportar cómo un grupo de veinte personas, a pocos metros de la puerta de este lugar, presuntamente lo rodeaban, amenazaban, insultaban e incluso escupían.
Qué moderno. Qué sano. Qué vergüenza. Yo escribo estas líneas simplemente para denunciar públicamente que en Málaga y bajo el amparo y permiso de las administraciones, se está ayudando a mantener una entidad que acoge a personas que realizan este tipo de prácticas. Ni más ni menos.
Hay que repartir entre todos, eso es cierto. Pero hay quien no lo merece. Y en este caso está más que claro que ellos no. No voy a entrar en asuntos facilones y que todos conocemos sobre si, presuntamente, allí se cobra o no cada vez que se realiza un evento. No voy a entrar en preguntar si, presuntamente, alguien está viviendo de la casa invisible. No voy a preguntar por tantos por ciento. No voy a preguntar si se intenta, presuntamente, movilizar a estudiantes para okupar nuevos sitios y ampliar el chiringo. Que no. Que yo no voy por ahí.
Que cada uno vaya a lo suyo y se entretenga como quiera. Ya sea engañando, vendiendo un riñón o robando cobre. Que a mí me da igual. Lo que molesta y nos daña a todos es que en Málaga al amparo de ciertas actividades y movimientos maravillosos se oculten insectos. Y lo que más repatea del mundo es ver cómo gente que se supone muy por encima del resto en valores, educación y aperturismo, acaban siendo los más radicales.
Si esto llega a suceder de manos de gente cercana a una organización ultra conservadora, arcaica y con vestigios de ultratumba, no estaría escribiendo sobre ello. Seguro. ¿Dónde está ahí la novedad?
La invisible se está volviendo muy visible y previsible cada vez que sucede algo que no les conviene a algunos. Y lo más lamentable es que, cuando uno considera oportuno escribir u opinar sobre ellos siempre salta una voz, sensata, que te advierte de los peligros que puede suponer hacerlo. ¿En qué mundo vivimos?
Escribo esto por tres razones: Primero porque no se debe atacar al mensajero, segundo porque la gente solidaria, aperturista y buena nunca se comporta de esa manera y tercero y más importante, escribo esto porque me la gana defender a un «camarada».
A mí no escupáis. A mí no me acorraléis. Ni me amenacéis. Por favor os lo pido.
Viva Málaga.
Patético artículo, carente de información, fuera de la realidad, sin argumentos….El tal Alberto, era parte del proyecto de liberar un nuevo espacio en la ciudad…el tal Alberto utilizo la información recogida en reuniones y por la lista de correos…el tal Alberto es un chivato, insensato, cobarde…que a más de dar la cara, cuando le vienen las consecuencias de su traición…lejos de comportarse como una persona integral y asumir su culpa….va llorando cual niñito de papa su pena….
La casa invisible no tiene nada que ver con este asunto, aunque las reuniones se consumaran en este espacio…esto lo pusimos en marcha gente de distintos colectivos, mareas, etc…que no conociamos de nada a este niñito…que se presenta, como de una publicación de la universidad…y al final sale rana…y se queja por cuatro insultos propios de quien se siente traicionado y utilizado…vaya con el niñito…si fuese un grupo de esos de los que hablas arcaico, de ultraderechas y demás….lo iba a contar el tal alberto por escrito, porque la boca ya la tendría más que partía…por suerte da con personas con más valores, educación, ética…que él.
Ni LA CASA INVISIBLE, tiene nada que ver con esto….ni todas las que estábamos involucradas en el nuevo proyecto de Okupación…hemos participado de los insultos al niñito esto….más que nada porque no estábamos…no por falta de ganas, a este aprendiz de periodista amarillo, casposo, vendido¡¡¡¡¡…se creerá el muy cretino que esta haciendo periodísmo de investigación…será inútil…
La invisible es un proyecto, necesario e imprescindible en la ciudad…y parece que por esto arremetéis contra ellos…pero vuelvo a insistir,,,nada que ver con las que preparábamos la liberación del espacio.
Haz periodismo del bueno…contacta con las personas que estábamos preparando aquello, con los que han participado en la increpación…contrasta…y después informa…de eso es que se trata.
Casposo artículo!!!!!! Falto de rigor, argumentación y veracidad…
Desde pequeñitos ya estáis adoctrinados a contar mentiras…
Buscad la información y el sentido común…menudo personaje el Alberto…con la carita de bueno con intenciones de activista periodístico y social que llego a las reuniones de la Okupación….y menudo farsante…
esperemos que no sea el modelo de perodísta cuasi rosa…que nos espera…Periodísmo ético Ya…
Qué habrías hecho tu en nuestro lugar??? Qué haces tu cuando un tío viene de colega y de buen rollo y acaba destronzando un proyecto que a muchos nos llevó más de tres meses prepararlo…y que contaba con tanta gente involucrada…
Qué habrías hecho….??? con tanta ilusión puesta en esto…para que venga un payaso de este tipo…a ponerlo todo patas arriba, porque le viene en gana…
A poner en el punto de mira judicial y policial a tantos compás….eso no es agresivo…y cuatro insultos de niños…siiii…nooooo???? pero que amarillos y cutres sois…..pero que sensible cuando os rozan la piel…pero no cuanto atacáis a muerte a las demás….dedicate a la prensa rosa…que va de este rollo¡¡¡¡¡¡
La próxima vez podrías escribir del PELOTAZO URBANÍSTICO que perpetrará ayto y FUSIONADAS en Plaza de Camas. Escandalosa cesión de suelo público a una cofradía….