Hace unos días la ciudad de Málaga recibía la decisión dura y desagradable de las personas esas que mandan en el fútbol. Hombres. La cuestión fundamental es que, los que organizan los torneos y dan los dineros, no quieren que haya equipos informales, mal pagadores y con perfiles poco profesionales en su caravana. Bien por ellos. Si ponen el peculio pueden decidir quién juega y quien no. ¿Verdad?
El resultado de sus reflexiones vomitaba algo bastante triste: no quieren al Málaga. No. Lo dejan claro como el agua. ¿Cómo va a ser eso? Pues siéndolo, amigo. No quieren al equipo que juega a la pelota vestido de blanquiazul en sus torneos. No lo quieren ni hoy, ni mañana ni pasado. Incluso ni dentro de cinco años. Y además, harán todo lo posible para que, tomando dichas decisiones, ningún jugador bueno quiera participar en el Málaga cuyo proyecto de objetivos quedaría reducido a la Copa del Rey. Fenómeno.
A simple vista, y haciendo un análisis simplón, uno puede pensar que son estos caballeros unos tontos del culo. Solamente comparando las deudas y problemas de algún que otro equipo con los del Málaga uno puede llegar a pensar que hay instalado un pack de dureza extra para tratar a nuestro equipo en comparación con el resto. Pero claro… igual eso es lo que decía al principio… Un análisis simplón.
Por desgracia, seguimos hablando del Málaga como un equipo nuestro. Por desgracia seguimos pensando que esto va más allá de la mercadotecnia del deporte. Y por muchísima desgracia, la gente se moviliza y se agarra al lacito y el manifiesto para exigir derechos y justicias… Justicia en el fútbol… Ojo… Que pedimos cosas muy rarunas…
Pero nadie se fija en nada. Solamente va al bulto. Si hace unos meses la gran mayoría de la gente se metía con la Junta o el Ayuntamiento cuando el Jeque dijo aquello de Qatarí que te vi y amenazó con irse, hoy se reproduce algo parecido metiendo la cuchara aún más profunda en la parte más blanda de los corazones malagueños y malaguistas.
¡Manifiesto por el Málaga! ¡Fírmalo! ¡Únete! ¡Que no nos pisoteen! Les ha faltado poner ¡No pasarán!
En fin… que está muy bien. Si yo no digo nada. A mí me gusta que la gente se haga una pelota y luche por aquello que crea. Bravo. Pero me llama la atención que esa fuerza e intensidad no les sirva para despertar del sopor y entender que, aún siendo malos los de la UEFA, el dueño moro de nuestro equipo es informal hasta decir basta en los negocios en los que juega a día de hoy en la provincia.
Estaré locuelo. Pero miro a un lado y veo al jeque. Miro a otro lado y veo a Hacienda, al Ayuntamiento, a la Junta de Andalucía, al Ayuntamiento de Marbella, Consejeros, Alcalde. ¿Seguro que lo sensato es defender al amigo Al-Thani?
¿Por qué no se crea un manifiesto real por Málaga y por el Málaga? Mirad qué fácil. Podemos poner que la empresa, aún siendo gestionada desde el quinto pino, es Europea y no puede llevarse como un rebaño de cabras. Porque las cabras se cansan. Aún recuerdo a Pellegrini hace unas semanas diciendo que a finales de Octubre de este año meditó marcharse. Tenemos a los jugadores moscas porque se les paga mal y tarde y van pasando de promesa incumplida a mentirijilla para darles cuartelillo.
¿Alguien habla del funcionamiento interno del club? ¿Cuánta gente sale y entra por no soportar ese descontrol?
A mí me gusta mucho el Málaga de ahora. El Málaga potente. Ganándolo todo y siendo muy bueno. Claramente se debe al olor a dinero. El fútbol es dinero. Podemos hablar del día que pepito ganó a manolito siendo uno pobre y otro rico. Pero ahí queda. En anécdotas. En el momento en que esto se desmorone del todo es más que probable que el Málaga vuelva a la normalidad de los equipos normales. A las calamidades y apreturas.
Pero ahora es aún peor. Ahora se viven esas mismas apreturas y presiones pero llevando una vida altísima.
El moro ha regalado un Hummer pero da 5 euros de gasolina al mes. La maquina no tira…
Pero esa parte no la vemos. Miramos para otro lado. Somos niños chicos cuando se enteran de que los reyes son los padres. ¡Anda anda! ¡Eso cómo va a ser! Pues lo es… pero mucho mejor decir que no. O mejor aún, echar la culpa a otro.
Pero olvidemos el fútbol. Que al mezclar sentimientos nos cuesta más trabajo discernir. ¿Y el puerto de Marbella? ¿Qué pasa con la Marina de Bajadilla?
A día de hoy nuestro amigo jeque no ha hecho absolutamente nada. Ni para él ni para los demás. Ganó el concurso ¡Qué casualidad! Y no ha dicho aquí estoy yo. El actual y supuesto concesionario del puerto no hace absolutamente nada. No paga a quienes mantienen aquello, proveedores, seguridad, control… Tampoco cobra los amarres. Nada. Cero. Pero tampoco comienza el proyecto del gran puerto de España. No mueve un dedo. Debe dinero a la Junta. Incumple con Marbella. Deja mal a la ciudad. Nos deja mal a todos. Con cara de tontuelos. ¿La razón? No la sabemos aún. Aunque todo apunta a que, vestido de rico, se te dan bastantes cosas. Y una vez las tienes, si las revendes, sacas buenos duros en el trueque. Y hacer lo que se dice hacer…poquito. ¡Pero viva el Jeque!
Málaga se ha echado un novio. Grandote. Fuerte. Muy limpio. Todas las amigas le dicen: ¡Qué novio tan apuesto! ¡Qué planta! ¡Se ve que tiene posibles! Pero a la abuela no le gusta… La abuela lo mira de reojo… baja las cejas y rumia mientras gira la cabeza lanzando mensajes negativos… Igual deberías comenzar a no dejarnos llevar por la pompa. Apartar el espumillón dorado que tape las calamidades de un tipo algo pícaro. Cuidado.
Hagamos un manifiesto que nos defienda de verdad. Un manifiesto que nos deje bien a nosotros. Que no sea utilizable por los demás. Un escrito que diga que estamos por encima de los malos. Los de fuera y los de casa. Igual nos equivocamos si empujamos contra el que no es. Igual quedamos como tontos.
Yo soy más raro. Yo no voy a firmar nada que tenga que ver con el fútbol. No por nada. Es respetable hacerlo. Pero en algo donde sentir los colores cuesta 75 euros y 20 euros extras si quieres que ponga un nombre y un número me resulta sospechoso. ¿Apoyo? Todo el del mundo. Y ánimo y alegría al ver algo con los colores de mi tierra. ¿Defender a uno que se ha comprado esto para jugar a quién sabe qué cosa? Ni harto de vino.
Pero respeto absoluto a quien lo haga. Respeto a los que lo ovacionan al llegar al campo. Respeto a todos. También a los que dicen que no juegan con él porque no les da la gana. Igual si fuéramos un poco más duros con gente de ese tipo iría mejor la cosa.
Puede incluso que si supiéramos ponderar quiénes son los realmente malos y perjudiciales seríamos más respetados. Hace unas horas el amigo Daniel Rovira afirmaba algo a través de Twitter muy interesante y es que en Málaga, como en gran parte del mundo, hay injusticias más grandes que las cometidas con el jeque, que seguro serán ciertas oiga, pero que dudo sean las más importantes en este momento. Mezcla curiosa entre asco y vergüenza encontrar a decenas de políticos dando lametones al Málaga CF, al jeque y a toda la tropa. Curiosa calaña que se queda callada cuando a las señoras les cobran cinco euros por coger una ambulancia, cuando no miran mientras se roba a mansalva en las administraciones más cercanas o mientras observan cómo sus compañeros de partido prevarican día sí y día también. Pero no pasa nada… aquí lo importante es el tema de jugar a la pelota. Buenísima imagen de Málaga. Una de las capitales con mayor índice de paro y con la cola de gente comiendo en Santo Domingo cada día más grande. Pero amigo, adelante, que seamos conocidos por las protestas del Málaga.
Babas caídas de los que promueven el asunto. Y de los que se lucran por ello. Y babas del dueño, porque mientras maneja como le viene en gana la ciudad le hace la jugada para continuar.
Y es que el nota este no paga ni a la de tres. Cuando alguien le exige lo más mínimo eleva su mano derecha, pone el pulgar en la nariz y mueve todos los dedos la mano mientras grita: “¡Qatarí que te vi!”
Y nosotros con el manifiesto…
Viva Málaga.
De aquellos polvos, estos lodos……
http://honeyonetwone.wordpress.com/2012/08/02/sacame-la-cuenta-que-me-voy/
Por fin alguien que piensa… ergo est.
Eres racista? porque utilizar el término «moro» cuando de más se sabe que es muy despectivo,cuida tus palabras.
Puta Málaga, a ver si desaparecen ya, jajaja que pena de club, llevado por un moro y ni los malagueños lo quieren, ahora sois todos del Málaga, ya mismo os volvereis a poner la camiseta del madrid y el barca. No hay una ciudad más cateta que Málaga.
SEVILLA HASTA LA MUERTE.
Amigo Portillo, moro es todo aquel que no esta bautizado.
Juan Cano: viendo lo que escribes me da asco, he mirado el el archivo de socios de mi Sevilla F.C. y no eres socio.
Los Sevillistas apoyamos al Málaga en esta etapa de exitos.
Lo del Moro es otro asunto que queda muy claro en sus actuaciones com se refleja en el articulo.
Creo que no te llamas Juan Cano,,eres Celia Villalobos, que duerme con un Sevillano, pero nos odia ¿porque?