En una jornada 2.0, aunque analógica, CADE y la Asociación de la Prensa de Málaga, dieron un mensaje optimista a los periodistas: Especialización
CADE –Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial– es una oficina técnica de la Junta de Andalucía, que trabaja a la sombra del Parque Tecnológico de Andalucía –PTA–, orientando y dando facilidades a los emprendedores, sobre todo jóvenes, para que se inicien en el proceloso mar de los pequeños empresarios. Unidos al coordinador de esa oficina, Alberto de Acevedo, la Asociación de la Prensa de Málaga ha organizado y realizado una jornada con la intención de poner a los periodistas malagueños sobre la pista de las posibilidades que tiene esta nueva forma de informar, que se asienta en el mundo de la comunicación virtual.
La discusión sobre la encrucijada de la prensa mundial es tema de foros internacionales, tesis doctorales, debates académicos e intercambio de opiniones entre blogueros que se han abierto camino en el ciberespacio tras perder sus puestos de papel en los periódicos tradicionales. Es un fenómeno mundial y no sólo español o europeo. La crisis juega su baza en contra del periodismo de toda la vida. Caída de la publicidad, ese soporte económico indispensable, tanto a la baja del número de lectores, sobre todo en el target juvenil, subida de los costes generales de operaciones: sueldos, distribución, papel, energía, etc., planta el panorama para el cierre. Los periodistas en la calle han buscado el refugio de la comunicación virtual 2.0, a algunos, dicen, le ha salido bien.
En la sede de CADE, la mañana del pasado viernes 9 de marzo, un grupo de expertos y aventurados periodistas-empresarios del 2.0, dieron las claves para lanzarse a esta aventura, que puede ayudar a salvar el periodismo que conocíamos hasta ahora, y, sobre todo, a los que se inician en este mundo que está cambiando, pero no está acabado todavía.
Alfonso Alcántara Gómez un especialista, como él mismo se autodefine, en esto de las 2.0 y que es asesor de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, se extendió con ejemplos visuales y comentarios apropiados sobre ese universo que se abre, en realidad ya está más que abierto, a los periodistas que están ante la necesidad de reinventar su oficio con nuevas herramientas. Él y los que intervinieron después coincidieron en dos conceptos básicos o sobre los que se apoya este desarrollo de la comunicación personal, empresarial y social: Segmentación y Especialización. Hay que conocer dónde está mi público objetivo, con claridad y precisión, y saber a fondo lo que hay que comunicar. Dos bases que no son ajenas ni nuevas para las Teorías de la Comunicación, pero que son imprescindibles para manejar estas nuevas formas del contacto 2.0.
El concepto 2.0 se refiere a una nueva arquitectura de participación en la RED. Lo definió Dale Doughterty en 2004 indicando que los sitios Web se quedaban insuficientes para las nuevas necesidades de los creadores de contenidos y su afán por comunicar-se. Los sitios Web, hasta ahora, habían servido para observar pasivamente esos contenidos. De lo que se trata ahora es de interactuar a lo grande. Caen las barreras y fiel al espíritu de la red, la principal norma es permitir la expansión: El medio al servicio del mensaje.
Tras las preguntas de los participantes, cuatro decenas de periodistas jóvenes, abrieron el panel Álvaro Abad Briales, un periodista-empresario (COCOM), que se levantó, casi cayó y volvió a levantar su oficina. Rafael Uceda Vañó, también periodista y llevando su propia empresa al socaire de la navegación virtual y Ángel de los Ríos Cabello, que es el responsable de Comunidad de SUR. Escuchar sus experiencias como periodistas que se han reinventado, desde los conceptos básicos y clásicos hasta el uso de estas aplicaciones que ofrecen las nuevas tecnologías, da esperanza y abre caminos.
Entre tanta desesperanza, tanto titular de crisis tras crisis, tanto ajuste al cinturón sin agujeros ya, elecciones van y vienen, el dedo acusador de la UE, los créditos bancarios desaparecidos y la debacle maya de 2012, escuchar a estos emprendedores que trazan nuevos caminos sobre el periodismo de toda la vida, dan ganas de aplicarse y seguir aprendiendo que el presente tiene aún un futuro.