Lo normal y lo que toca.

En circunstancias habituales, lo normal sería que escribiera sobre las posibilidades del Unicaja en la Copa del Rey de Las Palmas que se desarrollará del jueves al domingo próximo, ver si los lesionados Nemanja Nedovic o Jeff Brooks volverán a tiempo al equipo para ser útiles en la maquinaria de Joan Plaza.
Eso lo normal, lo cierto es que a la hora que escribo no puedo decir con seguridad si el evento se va a celebrar o no, puedo tener el pálpito en positivo y que el jueves veamos la lucha del Unicaja y el Real Madrid, o ponerme negativo y esperar que los dirigentes de nuestro baloncesto (ABP de un lado y ACB del otro) sigan demostrando que la torpeza y la inutilidad de algunos miembros de la raza humana no tiene límites.
Que a dos días de uno de los torneos más emocionantes y exitosos que se conocen tenga en la cabeza preguntas como ¿para qué sirve la ABP?, o ¿quién decide en los asuntos de la ACB?, me parece patético, aunque pensando en frío, es el espectáculo que siguen dando los que dirigen nuestro deporte, no tiene otro calificativo.
Es digno de estudio que el baloncesto sobreviva con tanta guerra interna, tanta carencia entre la clase dirigente y tener que convivir con los factores externos que hacen una continua complicación, como crecer a la sombra de ese monstruo llamado fútbol, es para calificarlo de milagro.
Y mientras tanto, lo que importa queda en un segundo plano. Ronda de declaraciones de los capitanes de las plantillas ACB diciendo si secundan o no la huelga, adivinando cómo y de qué manera se pone en el compromiso de fastidiar algo tan grande como la Copa del Rey a las plantillas de ocho equipos, prescindiendo del resto de la competición, filtrándose por ahí que otro movimiento sindical es posible, todo esto mientras que la patronal, o sea, el rival natural de cualquier unión de trabajadores, no tiene cabeza visible y está en la mayor crisis de su historia, porque tampoco se le adivina solución en un plazo razonable.
Ciertamente tenía la pretensión de hablar sobre las posibilidades de nuestro Unicaja frente al Real Madrid, ver si era posible que el entrenador no se viera descolocado con la actuación del equipo en algún cuarto señalado como ocurrió el pasado sábado en Vitoria, adivinar si lesionados de ambos equipos se suman o no a la contienda, incluso me hubiera gustado haber sido más optimista aún (rozando la locura), pensar en qué rival vendría mejor para una hipotética semifinal, pero para variar, en el momento que hay el mínimo resquicio, la posibilidad –por pequeña que sea- de fastidiarlo es cuándo aparecen los que se suponen que han de velar por su buena marcha.
Tal vez sería todo más fácil si se limitara a lo que pasa en la cancha, que hablásemos sobre quién va a parar a Luka Doncic, o si se va a intentar hacer valer la superioridad que el año pasado demostró Giorgi Shermadini cada vez que hubo un Real Madrid-MoraBanc Andorra, pero tenemos que estar más pendientes de todo lo ajeno al juego por lo que lo condiciona.
No quiero dejar de ser optimista, aunque sea nada más por el argumento de jugárselo todo a un solo partido y que el juego del equipo, salvo en momentos puntuales ha ido evolucionando hay que ir y ponerlo todo con la ilusión que la ocasión merece, pelear hasta el final, y si se pierde, seguir peleando que queda mucha competición, y el objetivo final, ha de ser volver a la Euroliga el año que viene, y si se sigue manteniendo, todo pasa por quedar tras los equipos que tienen licencia A, los dos de fútbol y el Baskonia, así de simple, y así de complicado.
Ojalá todo lo referido al margen del juego quede en nada y un ataque de cordura haga que sólo hablemos de jugadores en la cancha y tengamos una gran Copa del Rey, con partidos decididos por escasa diferencia, con sorpresas y con el campeón que queremos todos al final de la semana, pero eso sí, no olvidemos que después estaremos hablando de lo que tenemos para los siguientes siete días y los que vayan viniendo.
Por cierto, si alguien no adivina que significan las siglas ABP que representan al sindicado de jugadores, no es “Aprendizaje basado en problemas”, respuesta que da el buscador de internet al teclear esas tres letras, es “Asociación de Baloncestistas Profesionales”. Suerte en todo, para todos.