Hace muchos años que los zoológicos más avanzados eliminaron en la medida de lo posible las jaulas para dar a los animales el mayor terreno posible para su desarrollo.También los árboles necesitan al menos ‘la condicional’ para su crecimiento, y si bien un parque urbano no es un bosque, qué menos que hacer todo lo posible para que lo parezca.
Como alguna vez hemos comentado en esta sección, el ‘barrilito’ de los jardines frente al Puerto había sido embutido hacía años en una verja, que le protegía de los ataques vandálicos.El vándalo en versión malagueña es un espécimen que no sólo destroza sino que además vocifera en una lengua primitiva y hace el caballito con la moto, de ahí que a nadie extrañe que sea capaz de ‘atacar’ árboles indefensos.
Ejemplares de mamíferos malaguitas ya troncharon ramas de árboles en los jardines de Ben Gabirol hace un par de años en algún tipo de ceremonia de iniciación a la ‘burricie’. El mismo barrilito padeció alguna pintada infecta, así que la ‘verja’ protectora fue en su día una medida comprensible y hasta embellecedora. Pero este árbol, conocido en sociedad como la ‘Chorisia insignis’, sigue expandiéndose con el afán de continuar con el título de mejor ejemplar de Europa, así que la remodelación del jardín ha venido al pelo para soltarle lo que cada día era más una ‘cincha’ de hierro.
Si ustedes se dan una vuelta por los jardines del barrilito o del poeta Alfonso Canales, verán que el árbol ha ganado en prestancia, reforzada también por el suelo alrededor del ejemplar, diferenciado del resto del jardín con unos elementos de madera que quedan muy bonitos. Sólo queda esperar que nuestra ‘fauna local’ no haga de las suyas y ‘se nos suba a las ramas’. El barrilito merece seguir creciendo en libertad y en un entorno civilizado.
Buenas perspectivas
No dejamos la cuestión de las plantas porque en el jardín de La Concepción están esperando impacientes el ‘desarrollo’ de esta primavera.A pesar de las intensas lluvias de los últimos meses, el sistema de drenaje ha funcionado a la perfección y el jardín botánico apenas ha sufrido daños, quitando algún ciprés. El resto está en perfecto estado de revista y ‘bien nutrido’, así que si no hay ‘golpes de calor’ y la primavera se comporta como una suave marcha hacia el verano, tendremos un jardín de la Concepción como pocos años se ha visto, cuajado de vida y de flores.
La novedad
Según nos comenta un amable lector, el pasado pregón de Semana Santa fue el primero en el que apareció la palabra ‘equipamiento’, al hablar del equipamiento cultural. Esta palabra, tan usada por los políticos como ‘soterrar’, ‘apostar’, ‘centralidad’, ‘poner en valor’ o ‘impulsar’, nunca antes había aparecido en el pregón por excelencia. El mundo cambia.