El Centro de Arte Contemporáneo expone estos días una completa y original exposición de Gilbert & George (no confundir con los letristas Gilbert & Sullivan ni tampoco con Gilbert y Ellice, unos locos navegantes).
Esta pareja de artistas está considerada los Vittorio y Lucchino del arte moderno británico aunque en su caso, no ha tenido que italianizar su nombre para darse a conocer.
Seguro que una de las razones por las que estos famosos artistas exponen su obra en Málaga se debe al ‘continente’, el antiguo Mercado de Mayoristas, hoy sede del CAC y recientemente incorporado al Patrimonio Histórico Artístico de Andalucía, puesto que la pareja reniega de los museos.
De hecho, el firmante pudo contemplar una muestra de los británicos hace un par de años en la Tate Gallery, la antigua fábrica de Londres (en la capital inglesa y en buena parte del mundo civilizado las fábricas y los silos dignos de conservarse suelen tener una segunda vida y no son demolidos por sistema).
Cierto que el malagueño medio está ‘genéticamente’ predispuesto contra el arte moderno. Sus genes sólo admiran al círculo de Denis Belgrano y a todo pintor contemporáneo que, inmutable en el tiempo, repita los cánones de la pintura decimonónica?(por otro lado muy buena, pero hay arte más allá del sigloXIX).
Desde luego, entrar en el universo artístico de Gilbert & George merece la pena. El espectador recibe una caótica, irreverente y desternillante sucesión de imágenes en la que los artistas son los protagonistas. El dúo tiene el suficiente sentido del humor como para reírse y hacer arte con las ‘esencias patrias’, en este caso de Gran Bretaña y al mismo tiempo para reírse de sí mismos, algo que llevan haciendo desde los años 60.
A medio camino entre las cabeceras de las películas de los Monty Python y una estética rebuscadamente ‘kistch’, Gilbert y George consiguen que (para bien o para mal, según el espectador) su obra sea difícil de olvidar.
En todo caso, quede constancia de que el CAC está recibiendo a unos primeros espadas del arte. En Málaga hasta el 16 de mayo.
Caudillos
Las Loterías y Apuestas del Estado han incorporado en muchos de sus despachos pantallas de vídeo que ofrecen las noticias del día. Un servidor echó ayer la Primitiva en la calle Granada a primera hora de la mañana y hay que decir que la administración central no ha sopesado el daño psicológico que ayer provocó en los usuarios la aparición en la pantalla del caudillo venezolano, escoltado por un retrato del manipulado Bolívar.
Ningún inocente comprador de loterías merece empezar la jornada con imágenes y frases de Hugo Chávez, Almadineyad, Berlusconi o estadistas de talla neuronal parecida. Los usuarios de loterías y quinielas sólo queremos tentar la suerte. Un poco de humanidad.