Oficialmente se ha acabado ahora, aunque llevemos ociosos y penando con el final de liga desde hace demasiado tiempo, el final de la temporada ACB 2018/2019 fue el pasado viernes con la victoria del Real Madrid en el Palau Blaugrana. Y mientras los blancos disfrutan de la quinta liga en ocho temporadas de la «era Pablo Laso», aquí nos centramos en pensar si un hipotético juego interior formado por Carlos Suárez, Rubén Guerrero, Deon Thompson, Volodymyr Gerun y otro jugador provoca más miedo entre los aficionados cajistas o los rivales, pero lo cierto es que otro curso ha acabado y antes de ir a por otro, sería conveniente ver las notas de cada partícipe.
Ya he mencionado que el Real Madrid ganó al FC Barcelona en la final habitual, a pesar de la fortaleza prevista y demostrada a ratos por los blancos, éste ha sido el único título de la temporada, y aunque los catalanes consiguieron la Copa del Rey, la sensación que me ha quedado es de mayor fiabilidad en los de la capital del reino.
En semifinales quedaron Valencia Básket y Tecnyconta Zaragoza, ambos, por motivos muy diferentes han cerrado la temporada con un gran sobresaliente. Los levantinos, con el triunfo en la Eurocup y revalidar su presencia en la Euroliga, han refrendado de manera palpable la situación que los coloca como mejor alternativa a los equipos de Licencia A en la primera competición continental, más cerca de lo que se cree del Kirolbet Baskonia y a gran distancia del Unicaja, que un lejano día quiso ocupar ese sitio.
Los aragoneses han ido creciendo de manera paulatina en la Liga, llegando al play off casi al final y dando la sorpresa y disfrutando de todo un fin de fiesta glorioso.
El resto de la zona de play off lo ocuparon con sensaciones dispares Kirolbet Baskonia, Unicaja, Divina Joventut y BAXI Manresa. Los vascos tenían una prueba muy exigente esta temporada con la Final a Cuatro de la Euroliga en casa, y la apuesta fue fuerte, pero entre lesiones, una decisión de cambio de entrenador que no acierto a razonar aún y mucho cansancio, el año ha sido de los que tienen mal recuerdo.
En Málaga salvo lo que ya tenemos oído y repetido, no creo que podamos estar contentos con lo que hemos visto, más allá de tener en cuenta que la situación del club y la gloria pasada es algo que no va a volver. Este año tiene pocos detalles gratos para el aficionado verde. Tanto badaloneses como manresanos pueden estar felices, los verdinegros parece que están en la senda nuevamente de crecimiento tras vagar por el desierto varios años, y los de rojo, tras volver del infierno de LEB, no sólo no pasaron apuros, sino que estuvieron muy por encima de lo esperado.
En tierra de nadie se quedaron Iberostar Tenerife, Morabanc Andorra, San Pablo Burgos, Herbalife Gran Canaria, Montakit Fuenlabrada, UCAM Murcia, Monbús Obradoiro y Movistar Estudiantes. A los dos equipos canarios se les hizo muy largo el año, los de Tenerife tuvieron buenos momentos de juego, pero no terminaron de ser sólidos. Y en Las Palmas, una gran enseñanza con respecto a la Euroliga y pensar que basta con buenas intenciones: el forzar una plantilla corta y veterana en muchos jugadores casi los lleva al descenso. Tener hasta a tres entrenadores tampoco ayudó.
Algo parecido ocurrió con Andorra y Fuenlabrada, unos bien, alcanzando la semifinal de la Eurocup, pero fuera de Copa del Rey y play off, y los madrileños con tres entrenadores y muy cerca del abismo demasiado tiempo. Tanto Burgos como Obradoiro tuvieron momentos de éxito y otros de mucha duda, el presupuesto da para lo que da, pero creo que necesitan cierto cambio estructural, de hecho, los castellanos ya tienen a Joan Peñarroya para comandar su nuevo proyecto.
UCAM Murcia y Movistar Estudiantes se salvaron y la nota no puede ser buena, los madrileños si llegan a estar en cualquier otra ciudad estarían criticados hasta la saciedad, y llevan mucho tonteando con el desastre. Los murcianos tal vez se creyeron que formaban del grupo de play off demasiado pronto y rindieron por debajo de lo que tenían, el experimento del debutante Javi Juárez demostró ser fallido y muy arriesgado.
Por último los descendidos Delteco GBC y Cafés Candelas Breogán compitieron desde el primer momento por no caer, cosa que al final no pudieron evitar aunque no se rindieron nunca, en San Sebastián con una plantilla muy corta, casi sin respaldo del público y dependiendo de jugadores lesionados intentaron rehacerse, pero habían perdido mucho terreno. Los de Lugo han vuelto demasiado rápido al infierno, una pena para un histórico, pero la base de club estable la tienen, a ver si tienen suerte y vuelven rápido como han hecho Real Betis Energía Plus y RETAbet Bilbao Básket. Que haya otro equipo en Andalucía, siempre es una buena noticia.
Fin de curso.
25
Jun