Unicaja 2016/2017: ilusión, regeneración y alguna incógnita

El nuevo Unicaja 2016/2017 genera ilusión en los aficionados, en los dirigentes verdes y también en los expertos consultados por La Opinión de Málaga. Se aplaude la rapidez para conformar el nuevo equipo, la polivalencia de muchos de los recién llegados y la capacidad ofensiva que a priori presenta este nuevo proyecto.

Como es normal, también hay algunas dudas, los típicos debates abiertos antes de que el balón se lance al aire. La opción de que Kyle Fogg pueda jugar de base más que de escolta, la falta de centímetros en el juego interior o la fiabilidad de la pareja de ala-pívots –Brooks-Suárez–, son las mayores incógnitas que habrá que despejar en los próximos meses.

El nuevo estatus europeo del equipo (en Eurocup y no en la Euroliga), la capacidad de la afición para volver a llenar mayoritariamente las gradas del Martín Carpena o la necesidad de una relación más fluida que el curso pasado entre Joan Plaza y los gestores cajistas, son otras cuestiones sobre las que los expertos inciden antes del inicio de la pretemporada, la semana de la Feria.

Juan Carlos Bonilla. Columnista de La Opinión de Málaga
«Las llegadas parecen del gusto de Plaza y ante eso, nada que objetar»
Ha sido una sorpresa grata que el Unicaja haya llegado a final de julio con la plantilla cerrada. El trabajo del club para tener rematado el plantel con tiempo en buena parte es porque la lista de preferencias se ha ajustado bastante. De la temporada pasada, ocho salidas y seis llegadas. A priori las salidas menos deseadas, las de Kuzminskas y Thomas, aunque yo incluiría también la de Markovic, sobre todo porque los repuestos me suscitan cierta duda.

Para dirigir al equipo Joan Plaza ha conseguido uno de sus más repetidos deseos, Oliver Lafayette, aunque las últimas temporadas del base no han sido las mejores. Junto a él, Alberto Díaz con la esperanza de crecer y ser más importante, además de una de las grandes dudas: Kyle Fogg. Impenitente anotador en equipos de perfil bajo tiene ante sí reivindicarse en un gran escaparate. La duda se acrecienta porque aquí se le quiere de base y lo mejor que ha aportado ha sido jugando de escolta. La tarea es conseguir que haga jugar al equipo… y después él.

En el exterior, una novedad y tres conocidos. Nedovic y Smith repiten, también lo hace Díez, que debe dar un paso al frente y despejar dudas. La competencia que va a tener con Adam Waczynski debe de ser menos dura, pero no lo tendrá fácil con un jugador que quizá esté más de escolta, pero de la dualidad del puesto ya sabemos en Málaga.

La posición de cuatro es capital en el baloncesto actual, por lo que se le exige, por lo que han de generar para el juego de conjunto, lo decisivo para la ocupación de espacios… casi para todo. Ahí, junto a ese foco de discusión que se ha convertido de qué juega Carlos Suárez debuta otro hombre que juega muy bien de alero, Jeff Brooks. ¿Versatilidad?, mientras que no sea inconcreción me vale. En los pívots, dos novedades y un tipo de juego diferente. Tanto Musli como Mbakwe tienen que confirmar las expectativas, dejando detrás la poca solidez anterior del balcánico y la lesión de rodilla del americano.

Mejorar el año no es complicado, pese a las ausencias, pero las llegadas parecen del gusto de Plaza, y ante esto, nada que objetar.