Esta mañana invadirán el entorno del Thyssen los participantes en la XVII edición del Certamen Nacional de Pintura Rápida José Mª Martín Carpena.
El extraño trajín que hoy sábado, desde hora temprana, nota usted en el Centro, no se debe a ninguna huelga a la japonesa. Tampoco se debe al desembarco coordinado de siete cruceros, cuya única diferencia con uno hotel de Benidorm radica en que flotan y abusan de las moquetas.
En la Málaga de los museos, la que en tiempos de Wamba fue testigo de la marcha de Pablo Ruiz Picasso para buscarse una horizonte artístico mejor, a lo que hoy asistimos es a una frenética pero pacífica contrarreloj del arte.
Hace ya diecisiete años que la Asociación de Vecinos El Martinete organiza el Certamen Nacional de Pintura Rápida José María Martín Carpena, que hoy se despliega por entorno del Museo Carmen Thyssen, aunque en las primeras ediciones, hasta 2009, los pintores sacaron sus bártulos para retratar el barrio de Huelin y de paso, la transformación de esa zona de Málaga, que dio un cambio radical justo en esos años.
A propuesta del alcalde, Francisco de la Torre, en 2010 el certamen se trasladó al Centro Histórico y con ello se hizo mucho más popular. A partir de ahí, el ritual es el mismo todos los años: de 8.30 a 11.30 cualquier pintor con ganas de retratar Málaga puede inscribirse en el auditorio del Museo Carmen Thyssen de la calle Compañía. Recibirá un plano con las calles del entorno del museo que puede pintar y deberá tener el cuadro listo a las 5 de la tarde, en la calle Nueva y la calle Compañía, para que pueda valorarlo el jurado.
La Asociación de Vecinos El Martinete cuenta, tras tantos años de certámenes, con una preciosa pinacoteca que se ha convertido en una artística acta notarial de los cambios de la ciudad en este arranque de siglo.
El Ayuntamiento apoya con tres premios de un total de ocho, la iniciativa, que suele reunir a pintores de toda España, muchos de ellos expertos en pintar contra el tiempo. Los participantes, por cierto, tienen hoy entrada gratis para ver el Carmen Thyssen.
Resulta gratificante pensar que las prisas de hoy no se deben a los contratiempos laborales, a marchas de protesta o a ese mezla de estrés y abrupto recogimiento interior que aportan los teléfonos móviles. Se debe a la determinación de plasmar Málaga al aire libre hasta las 5 de la tarde. Felicidades a todos los que lo hacen posible.
Brevas de san juan
La víspera de San Juan se ha ido transformando en una cogorza colectiva en las playas de Málaga en muchos sectores de la población.
Hace algunas décadas no estaba tan generalizada. La fiesta tenía un carácter familiar y se mantenían algunas tradiciones como comer brevas esa noche, pues eran consideradas las uvas de fin de año de esa fiesta de los júas. Algunas fruterías de la ciudad llegaban a vender hasta una furgoneta de brevas…