Daños contenidos en el camarín barroco perdido

24 Dic

La Junta enladrilla este joya de 1713, desconocida para la mayoría de los malagueños y que se encuentra en un moderno corralón en El Perchel.

El milagro, para empezar, es que un objeto artístico siga en pie en el zarandeado y demolido barrio del Perchel tres siglos después de su construcción. Pero a veces los milagros se producen, aunque sean desconocidos para la mayoría de los malagueños. La Opinión informó en octubre de 2013 de que un camarín en ruinas sobrevivía en una promoción de viviendas sociales en El Perchel, en el número 6 de la plaza de la Imagen.

Se trata de una torre octogonal de unos diez metros de altura, lo único que queda del primer convento de las monjas de la Divina Providencia, más conocidas como las catalinas, las que luego se fueron a la calle Andrés Pérez, al otro lado del río, hacia 1775.

Originalmente, antes de que llegaran las catalinas, era parte de una ermita de la famosa hermandad del Rosario de la Aurora, por eso en el interior de la torre se conserva un precioso camarín barroco repleto de molduras, adornos florales y versos a la Virgen de la Aurora. La obra, por cierto, está relacionada con el equipo de Felipe Unzurrunzaga, el autor del camarín de la Victoria.

Dicho todo esto, el camarín estaba hecho unos zorros y la torre, al pique de un repique, como alertaban los vecinos, muy preocupados por los cascotes que caían al patio, en el que jugaban muchos niños.

Tras la publicación, la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía anunció por entonces medidas «urgentes» de protección que un año más tarde no se habían iniciado. 2015 sin embargo nos ha traído por fin la contención de daños del edificio. No hay dinero para rehabilitar pero sí al menos para impedir que la torre se venga abajo. El autor de estas líneas se pasó hace unos días por el moderno corralón, construido a finales del siglo pasado, y comprobó que la torre octogonal se ha transformado en un búnker que difícilmente se vendrá abajo, aunque se aprecian algunas plantas pugnando por trepar por esta obra de 1713, el año en que los ingleses se quedaron con Gibraltar. Ya ha llovido desde entonces, aunque sea poco.

En cuanto al precioso camarín, una maravilla pese a la suciedad y los escombros que había en su interior, ha sido tapiado. Y todas estas medidas, suponemos, a la espera de décadas mejores en las que se pueda abordar la rehabilitación de esta joya desconocida del barroco malagueño y, por supuesto, para poder mostrarla algún día a los malagueños.

Astronomía navideña

La lustrosa iluminación de la calle Larios de estos días, más que un homenaje a la Navidad está más cerca de la Astronomía, con ese cielo curvo de lunas y estrellas que habría encandilado a los antiguos habitantes de Mesopotamia.

Y claro

Feliz Navidad y hasta el sábado 26.

2 respuestas a «Daños contenidos en el camarín barroco perdido»

  1. Debería estudiarse la posibilidad de transportar el camarín a otra ubicación donde la podamos apreciar todos los malagueños.

  2. ¿entonces la luna creciente no es un guiño a la luna creciente musulmana? (por el que dirán, y ser políticamente correctos)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.