Primera victoria contra los vándalos con corbata

18 Jul

El monstruo de Hoyo de Esparteros nos da un respiro, a la espera de que la oposición coja la versión 2.0 del Málaga Palacio por los cuernos y la volee

También el general Germánico, que en gloria esté, sintió una alegría indescriptible al vencer a los bárbaros en las intrincadas selvas germanas y recuperar las águilas perdidas por Varo y sus legiones romanas. Pero los lectores de Tácito y por qué no de Robert Graves recordarán que Germánico terminó como la mojama a causa de una ligera indisposición gástrica inducida.

La del jueves en la Comisión de Urbanismo fue una victoria en toda regla contra el vandalismo institucional, el Urbanismo marrullero y cateto capaz de amoldar el Centro Histórico al gusto del último arquitecto VIP.

La triquiñuela inmoral de Hoyo de Esparteros parece haber actuado de espoleta y en esta Málaga que durante años tuvo fama de ciudad adormecida, capaz de dejarse construir barrios colmena a mansalva, caricaturas de Manhattan y de asistir a demoliciones en cadena a mayor gloria de asustaviejas e incultos con dinero, han surgido como setas colectivos de profesores de Historia de Arte, arquitectos, estudiantes, expertos y amantes del Patrimonio que han denunciado esta operación propia de una ciudad subdesarrollada: modificar las reglas de juego para dejar sitio como sea al hotel Málaga Palacio, versión 2.0. Pese al disfraz y al arquitecto VIP de última hora cambia el collar del perro pero hasta las pulgas son las mismas.

Las protestas de todos estos colectivos, sumado a la falta de puntualidad británica de la constructora a la hora de pagar, lograron el pasado jueves una primera victoria contra los vándalos con corbata: toda la oposición -una moción de Málaga para la Gente- ha pedido al Ayuntamiento que mantenga el edificio de Strachan Viana-Cárdenas, antiguo Gobierno Civil de Málaga, con un precioso interior que el arquitecto VIP iba a hacer fosfatina, a cambio de reproducirlo en una esquina, absorbido visualmente por el hotel Mole.

Está por ver si en el próximo pleno Ciudadanos mantendrá esta postura tan esperanzadora o si terminará atraído por el lado oscuro de la Fuerza. Está por ver si el edificio del mismo autor de la calle Larios, alias la pensión La Mundial, recuperará la protección arquitectónica y se salvará de verdad y si el monstruo con cinco plantas de más continuará o al reformarse el Pepri se adoptarán soluciones menos chusqueras para Málaga. Ahí está, para asombro de los vándalos, la propuesta mejorada del hotel Posada del Patio, un edificio de varios cuerpos que hasta tiene el detalle de no ofrecer una horrorosa pared medianera junto al Museo de Artes Populares como planteaba la versión inicial. Un hotel ejemplar que nada tiene que ver con la faena urbanística de aliño a dos pasos del Mercado de Atarazanas.

Ha sido una victoria, sí, un gesto esperanzador que aglutina a muchos malagueños cansados de unas formas impropias de diseñar la ciudad, pero hasta Germánico, vencedor contra los bárbaros, terminó como el Rosario de la Aurora. No hay que buscar enemigos externos: lo mandó a criar malvas su propio entorno. Los vándalos siguen entre nosotros y lucen corbatas y el escudo de la ciudad.

2 respuestas a «Primera victoria contra los vándalos con corbata»

  1. pues a mi me parece un error no remodelar la plaza echando abajo este mamotreto de edf que es feo pero feo de cojo… saludos

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