Los carrera popular de la Carretera de Cádiz, entre El Torcal y La Paz, repite tras el éxito del año pasado, una cita organizada por los propios vecinos
Alguna vez lo hemos comentado en esta sección: los primeros malagueños que en los años 50 tenían la osadía de practicar atletismo por las calles de Málaga, recibían por regla general las burlas del respetable.
Al parecer, la visión de unos jóvenes en camiseta con tirantes y en calzón corto provocaba hilaridad y sobre todo, la guasa se justificaba porque la gente no sabía para qué corrían. «¿Tanta prisa tienen?, ¿a dónde van?», solían decir.
En nuestros días, esa estampa de choteo es sólo el recuerdo de unos tiempos pioneros y algo carpetovetónicos. Correr no es de cobardes y con el paso de los años, las carreras populares se han ido multiplicando, de suerte que en nuestros días, cualquier deportista malagueño podría recorrer el país yendo de carrera en carrera, tal y como hacía la famosa ardilla de árbol en árbol en la España Antigua.
Los corredores tienen desde el año pasado una estupenda cita más en su agenda: la II Carrera Urbana El Torcal-La Paz. Se correrá este domingo 28 de diciembre y ha sido organizada por las asociaciones de vecinos de La Paz y El Torcal, así como por la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Málaga.
Como ayer explicaba a esta sección Víctor Manuel Picón, presidente vecinal de La Paz, la carrera dejó tan buen recuerdo entre los participantes que este año se ha ampliado el número de corredores de 500 a 700 personas. «Este año está teniendo también mucha aceptación», cuenta.
Con 10 kilómetros de duración, saldrá a las 10 de la mañana de la avenida Manuel Torres, en El Torcal, pasará por la calle Pacífico y concluirá en la plaza Mozart, en el corazón de La Paz.
Los corredores recibirán el viernes y el sábado en el bar La Atlántida (calle Antonio Chacón, barriada El Torcal), y hasta media hora antes de la carrera del domingo, una bolsa con la camiseta conmemorativa y algunas promociones.
La inscripción, 7 euros, irá a parar a partes iguales, una vez cubiertos los gastos de la carrera, a las Hermanitas de los Pobres y la Iglesia Evangelista del Torcal. La ilusión de los vecinos por cierto, no parará aquí y ya están pensando en ediciones posteriores, para que además de las cuatro categorías actuales (juvenil, senior, veteranos A y veteranos B) cuenten con una carrea infantil. Todo se andará… y correrá.
Un rincón mágico
Hagan la prueba. Diríjanse a la barriada del Tarajal, ábranse paso, campo a través, hasta llegar a la fábrica de La Corchera (siempre que no esté vallada la parcela, ojo). Entren en la enorme nave de la izquierda hasta situarse en la pared del fondo… allí comprobarán, al paso de los minutos, que es uno de los pocos y escogidos rincones de España a los que no llega ningún sonido, ni siquiera un eco apagado, de la consulta soberanista en Cataluña. De nada.