Si es guiri trate de localizar a Pablo Picasso

6 Mar

El Centro recibe a turistas desnortados ante la absurda ausencia de carteles indicativos en dos de los lugares más próximos al Museo Picasso y la Casa Natal

Todos sabemos que la imagen de la administración española como un ente amorfo, grande y torpón es una caricatura que en algunas ocasiones coincide con la realidad.

Nuestros políticos malaguitas tratan de contrarrestar la evidencia con una catarata de frases huecas pero positivas. Recordemos, sin embargo, que la mayoría de ellos no se ha ganado el pan con el sudor de la frente fuera del partido, así que es complicado que conozcan qué ocurre «al pie de la calle» o utilizando su propia jerga afrancesada, «a pie de calle».

Todo esto viene a cuento porque se acaba de inaugurar la plaza de la Judería, la nueva vía que une la calle Granada con Alcazabilla y El Pimpi –un negocio boyante que algunos vaticinan que a lo largo de este siglo, como quien no quiere la cosa, terminará por ocupar todo el Centro Histórico–.

La apertura de esta calle más que un proceso urbanístico ha sido un proceso geológico, de hecho, la gran falla de San Andrés tardó menos en formarse que en llevarse a cabo el plan de la Judería. Recordemos que el plan de la Judería consistió básicamente en demoler la Judería de Málaga por la llegada del Museo Picasso.

Incluso este trozo de la calle Granada se vio alcanzado sin necesidad, así que además de un par de adarves medievales, la ciudad perdió una casa del siglo XVII, de la que sólo se salvó una torre, convertida hoy en negociado turístico.

Diez años después de que se marcharan vecinos y comerciantes, estos ya empiezan a regresar al lugar del crimen y con ellos los políticos, que hace unas semanas que se hicieron la foto de rigor.

De lo que de momento no hay ni rastro es de señales informativas. Esos detalles nimios se dejan siempre para el final, así que no traten de buscar un cartel con el nombre de la plaza de la Judería. De acuerdo que esas cosas llevan su ritmo administrativo, pero lo más inconcebible es que nadie del Ayuntamiento haya puesto, hace un par de meses un cartel justo en la bajada de esta calle del Pimpi que indique que a la izquierda se va al Museo Picasso y a la derecha a la casa natal de la plaza de la Merced.

Como todavía nadie ha colocado el cartel informativo, son decenas los visitantes que bajan a diario esta calle completamente despistados, sin tener ni idea de por dónde tirar.

Más preocupante es el cartel informativo del cruce de la calle Granada con la calle San Agustín. El cartel está roto, uno ignora desde hace cuánto tiempo, así que sólo informa de la dirección en la que se encuentran el museo casa natal, la plaza de la Merced y la iglesia de Santiago. Nada dice del Museo Picasso, que está justo enfrente, a unos metros.

Con este panorama los turistas están más preguntones que nunca y con razón. Ahora que se venden las excelencias turísticas de Málaga en Berlín, harían bien nuestros representantes en acordarse de lo que ocurre al pie de la calle o a pie de calle y reparen cartelitos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.