El número 68 de esta calle, con máxima protección arquitectónica, es un soberbio edificio del XIX que espera una segunda oportunidad
Paradojas de la vida, la espléndida obra, La vivienda malagueña del siglo XIX, Arquitectura y Sociedad, en dos tomos, del profesor de la UMA Francisco García Gómez, fue presentada hace 13 años en el Ayuntamiento de Málaga.
La obra, una ambiciosa tesis doctoral sobre las casas malagueñas de 1800 a 1900, sirve para que ahora constatemos el poco brío municipal a la hora de poner coto a la depredación inmobiliaria, en esos tiempos en los que las constructoras tuvieron un margen de maniobra bastante alejado del interés general, en una Málaga cegada por el boom del ladrillo. La (por otro lado estupenda) Oficina de Rehabilitación del Centro no pudo llegar a tiempo en muchos casos.
Sin embargo, el libro también sirve como llamada de atención para los edificios que todavía pueden salvarse. Fijémonos por ejemplo en un espléndida vivienda que se levanta en la calle Carretería. Fue edificada en la segunda mitad del siglo XIX, consta de bajo, entresuelo y dos plantas y se encuentra en el número 68 de esta calle, que tiene enfrente la plaza de San Francisco y que también da a la calle Nosquera.
En el catálogo de edificios protegidos del Centro algún responsable municipal aquejado de hipercorrección lingüística ha convertido la calle Carretería en Carreterías, en plural, y así consta desde hace años en el PGOU sin que nadie se haya preocupado de corregir el exceso de celo.
Pero lo importante es que esta bonita vivienda, de un porte impresionante, sigue con la misma protección arquitectónica, lo que nos da muchas esperanzas de que, algún día, pueda recuperarse.
Si ustedes se dan una vuelta por la desconocida calle Carretería, desconocida por la colección de magníficos edificios que por alguna extraña razón no captan nuestra atención –quizás se deba al constante tráfico– , verán que en el número 68 hay mucho por hacer.
Pese a su aspecto actual, con un amplio abanico de desconchones, podemos intuir el espléndido aspecto que tuvo esta vivienda en sus años mozos, con las dos últimas plantas con balcones de artísticos hierros forjados y un cierro central espectacular.
Algún día este edificio saldrá del olvido y será un superviviente nato de los años de intenso maridaje entre la política malagueña y el sector inmobiliario, un maridaje que ahora mismo prepara la traca final con la vergonzosa operación de Hoyo de Esparteros.
Barrer para casa
¿Existe Andalucía como región en la cabeza de los malagueños? En el Día de Andalucía un servidor sigue viendo que se mantienen viejos tópicos y precauciones frente al vecino y que, básicamente, cada provincia e incluso cada ciudad trata de barrer para casa desde el punto de vista político, un comportamiento que se repite en España entre las comunidades autónomas y que alcanza su cénit patriótico-ególatra en ese clasista derecho a decidir de los ungidos nacionalistas catalanes. Feliz 28 de febrero.