Uno de los pocos rastros físicos del Protectorado Español de Marruecos puede verse en el colegio infantil Martiricos, conocido desde 1927 como El Colegio del Mapa, por el imponente mapa físico en relieve que reproduce la España de Primo de Rivera, con el Marruecos español.
Se cumple este año un siglo del acuerdo entre Francia y España para repartirse nuestro país vecino, un acuerdo que se prolongó durante 44 años y que dejó una huella española que todavía es profunda en el Rif, así como una enorme pérdida de vidas por la Guerra de África.
Para conmemorar este hito en la Historia de España con tanta relación con Málaga se han programado a lo largo de esta semana un buen número de actos gracias a la participación de la UE, Cooperación Transfronteriza, el Ayuntamiento de Málaga, el Ateneo y el Centro de Estudios Hispano-Marroquí.
Uno de los protagonistas de esta conmemoración es el fotógrafo Pepe Ponce, vocal de Fotografía del Ateneo, un enamorado del antiguo Protectorado que ha conseguido organizar en la institución de la calle Compañía, en los últimos años, varias exposiciones con las fotografías más cautivadoras de este periodo de la historia del norte de Áfica.
Y como no para de recuperar artistas del pasado y hasta escudriña con paciencia franciscana viejos tomos de los años 20 de La Unión Ilustrada en busca de datos y fotos de ese rincón de Marruecos, ahora se suma a la conmemoración organizando una gran exposición, que fue inaugurada el pasado martes con el título de Fotógrafos en el Protectorado, y que incluye las mejores obras de Francisco García Cortés, Vicente Moreno, Juan López Duerto, así como el archivo de Mohamed Hakoum, este último con preciosas instantáneas de la Chauen de los años 20 y 30 del siglo pasado.
Las historias de estos fotógrafos son también dignas de mención. José López Duerto pasó cuatro años de mili en Tetuán y no olvidó esta ciudad española en su viaje de novios. Sus fotos muestran la medina de Tetuán en el lejano verano del 43.
Francisco García Cortés, soriano de la cosecha de 1906, tuvo un estudio fotográfico en Tetuán y otro negocio fotográfico en Chauen y fue durante muchos años el fotógrafo oficial de la Alta Comisaría de España en Marruecos, falleciendo en Málaga en 1976.
Y en cuanto a Vicente Moreno, nacido en Tetuán en 1932, su familia se traslada a Chauen siendo adolescente y es ahí donde ve pintar a Mariano Bertuchi, despertándose en él la afición por la pintura y luego por la fotografía. Las fotos de esta muestra están repletas de una magia medieval en la que paisajes de otros siglos se mezclan con la presencia de familias españolas. Desde 1980 vive en Málaga tras instalarse durante largos años en Venezuela.
Hay que felicitar a Pepe Ponce y a los promotores de toda esta iniciativa por rescatar este mundo tan vinculado con Málaga, una ciudad que guarda en sus calles, familias y monumentos, un recuerdo todavía muy vivo de ese Protectorado que sobrevive en la memoria de muchos y en el Colegio del Mapa.