Ni el honorable Rufus T. Firefly, benefactor de Libertonia, interpretado de forma memorable por Groucho Marx en ‘Sopa de ganso’, habría previsto para su admirada patria un proyecto tan rompedor como el que la empresa concesionaria del Muelle Uno propone para el Puerto de Málaga.
Nuestra ciudad, ensimismada en esa ola de riqueza que se alzó sobre nosotros en los años 60 tras casi siete décadas de olvido y deterioro, se dedicó a levantar una muralla de edificaciones horrendas para tapar el mar, igual que otra horrenda colección de bloques, coronada en los 60 por un hotel que terminó por ocultar la visión de la Catedral.
Ahora, la mentalidad ha cambiado y los malagueños hasta se avergüenzan de esa ‘eclosión urbanística’ que tanto nos desgració.Y sin embargo, hay que decir que tantas décadas dando la espalda al mar, tantos años de debates y propuestas y resulta que la gran operación urbanística del siglo XXI podría incluir un Carrefour. Esta es al menos la ‘apuesta’ de la empresa concesionaria. El ‘super’ en cuestión se levantaría casi al comienzo del Paseo de los Curas, obviamente en la zona portuaria.
Con todos los respetos para la cadena de supermercados y parafraseando con igual respeto a Ortega y Gasset, habrá que decir eso de “¡No es eso, no es eso!”. De hecho, nuestros políticos populares y socialistas se han puesto de acuerdo en criticar la propuesta y eso porque a lo mejor no le ha dado tiempo a hablar a los políticos de IU.
En caso de que ese importante equipamiento ocupara sus reales en el Puerto, habría que plantear la pregunta del millón: ¿Habrá descuentos en yogures?
Ya que ganamos para la ciudad un espacio que debería ser “un referente” (otra de las palabras más manidas por los políticos de Málaga), aquí va una riada de ‘usos de referencia’ para ese espacio, en la misma ‘línea rompedora’ del supermercado: Macromercería, saladero de bonito, zoo de nutrias, campo de mármol para canicas, plató perpetuo de ‘Sálvame de Luxe’, colmenar de abejas, circo romano, sambódromo, Campamento Benítez, casino, hotel tirolés, fábrica de betún, puerto seco, campanario, bebedero de cabras, Museo?Nacional de Mari Carmen y sus Muñecos, Centro de Interpretación del Gran Cañón del Colorado….
Crucemos los dedos para que ni el supermercado ni ninguna de estas propuestas ‘marxistas’ (con aires de los Hermanos Marx) nos caigan encima a los malagueños en el Puerto. No nos las merecemos.
Ironía y suciedad
Pegado en el exterior del restaurante de los Baños del Carmen puede leerse este irónico comunicado:?“Ha sido por pura casualidad. La semana pasada nos hemos dado cuenta de que todavía existen personas que tiran los papeles al suelo”.
Si, finalmente, ponen el supermercado, o cualquiera de las propuestas ‘marxistas’, es porque ‘sí nos las merecemos’. De momento, la mediocre ciudad que padecemos nos la hemos ganado a pulso. Un saludo y gracias, señor Alfonso.
No sé qué pondrán. Y no creo que lo haya sabido nunca el señor E. Linde, ya por otros pagos, tengo entendido. Pero tu escrito es genial. Gracias por seguir al pie del cañón : el de la conciencia de la ciudad, que te debe cuanto escribes. (Perdón por la paráfrasis o cuasi de don Antonio Machado; pero tú te la mereces).