Málaga no es la única ciudad de España en la que un colectivo pide que las plazas sirvan para algo más que para pagar por sentarse y tomarse una caña y unas tapas. La semana pasada la asociación de vecinos del Centro Antiguo hizo una importante llamada de atención al Ayuntamiento, para que cambie, aunque sólo sea una vez, de modelo.
Recordaba la presidenta María José Soria que hasta la fecha, todas las plazas del Centro recuperadas para uso ciudadano han sido ocupadas en su mayor parte por terrazas de bares, que tienen todo el derecho del mundo de hacer negocio y animar la plaza pero, ¿es este el único camino posible?
Después de las experiencias de la plaza del Obispo, de la Flores, del Carbón, de la plaza de San Pedro Alcántara, ¿debe copiarse el mismo modelo en la futura plaza de la Merced?
La ‘tendencia natural’ de un Ayuntamiento es recaudar dinero y eso lo consigue con las licencias de ocupación de la vía pública. La asociación de vecinos, sin embargo, sugiere ‘una moratoria’, un ‘parón biológico’ para esta plaza tan cargada de historia en la que reposan los restos mortales de José María Torrijos y sus seguidores.
Lo que piden los vecinos del Centro es que también se piense en ellos y recuerdan la necesidad de contar al menos con una plaza en la que los niños puedan jugar, y en la que se respire tranquilidad y se pueda pasear. Difícil propósito en Málaga. A un servidor la iniciativa le parece osada, por que no es políticamente correcta, pero muy constructiva.
Todavía no sabemos cómo será el proyecto definitivo de reforma. Lo que sí está confirmado por el concejal de Urbanismo Manuel Díaz es que la plaza estará al nivel de la calle y que se peatonalizarán dos de sus lados.
Queda por ver si desaparece o no el murete exterior y la verja, añadidos en la remodelación de 1858. De desaparecer, la plaza de la Merced sería demasiado ‘tentadora’ para el Ayuntamiento como para no permitir terrazas.
Dado que las necesidades económicas del Consistorio son tan serias como las lógicas demandas de la hostelería, quizás la respuesta esté en el término medio y en hacer todo lo posible por no convertir este plaza ‘picassiana’ en terreno reservado únicamente para el negocio privado con la salvedad de unos metros cuadrados para los paseantes, como ocurre en otros rincones.
Concierto benéfico
La banda del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga organiza el próximo domingo, 28 de febrero, a las 19.30, en el auditorio de la Diputación (calle Pacífico, 54) un concierto benéfico a favor del comedor de Santo Domingo.Participarán las bandas de cornetas y tambores de Nuestro Padre Jesús Cautivo, Nuestra Señora del Carmen y la del Real Cuerpo de Bomberos. El precio: cinco euros. Pueden comprarse las entradas en las tiendas ‘Nazareno’ (Carretería, 2) y ‘Ojeda’ (San Juan, 8).