Ha tocado tener paciencia durante mucho tiempo. Desde principios de diciembre pasado, momento en que nuestro Unicaja enganchó tres partidos consecutivos ganados (Hereda San Pablo, Urbas Fuenlabrada y Coosur Real Betis) en la competición ACB, ha tenido que ser ahora para que, tras la victoria en Santiago de Compostela, la visita de los verdiblancos haya supuesto ver dos triunfos del equipo malagueño.
A un partido bastante serio, el disputado en Galicia, ha sucedido otro resuelto con bastante solvencia, estas dos victorias sirven sobre todo para tener a tiro al rival de mañana, el Surne Bilbao Básket y tener dos victorias de margen sobre el grupo que está en la pelea por no bajar de categoría.
Está claro que son dos triunfos ante equipos que están por debajo en la tabla, que lamentablemente, el Coosur Real Betis tiene una pinta bastante mala, y que justificó de sobra su posición de último clasificado, ojalá puedan levantar cabeza y salvar la categoría.
Aunque se pueda decir que quizá eran rivales propicios, el equipo está jugando de mejor manera, los refuerzos se ven más integrados con el paso de los días, y hay momentos de los partidos que el equipo parece que ofrece más equilibrio que en todo lo visto anteriormente en este curso.
Centrándonos exclusivamente en la ACB, el Unicaja tiene la oportunidad de cerrar y alejar el peligro del descenso, y con algo más de tranquilidad pensar en otras cosas, no sé si en el playoff, porque es una opción algo complicada, pero al menos por pelear y acercarse a un objetivo más acorde con el presupuesto y la realidad actual del club.
Para ello, ahora que el calendario de la competición española se pone complicado en los diez envites que faltan, se hace necesario que el equipo demuestre que quiere y que puede estar más arriba, de esas diez jornadas, al Unicaja le toca jugar frente a ocho equipos que están por encima en la clasificación, sólo los partidos ante Morabanc Andorra y Hereda San Pablo Burgos figuran frente a rivales peor clasificados.
El arranque de este último tramo de competición tiene mañana miércoles al Surne Bilbao Básket, el partido de ida fue concretar que Norris Cole estaba fuera del equipo y una derrota más en la marcha errática que aún nos sigue torturando. El equipo bilbaíno que viene a Málaga llega con un varapalo importante al caer en su cancha en el derbi ante el Baskonia con un contundente 62-90, aunque ya firmarían los Jayson Granger y compañía repetir cada jornada la exhibición que mostraron el domingo en Miribilla.
El mes de abril que se le pone por delante al Unicaja es tremendamente complicado, entre ocho y nueve partidos entre ACB y FIBA BCL con la eliminatoria de cuartos de final frente al BAXI Manresa. Que el mes próximo es crucial para enmendar mínimamente la plana y dejar la temporada como algo decente y no lo que llevamos viendo hasta ahora, es algo que nadie pone en duda.
¿Qué Unicaja veremos? Ni idea, ni los rivales van a ser del nivel del Coosur Real Betis, ni este Unicaja tiene por qué parecerse al conjunto que tantos disgustos ha dado, aunque desde luego, si este Unicaja no es fiable para los propios, tampoco debe de serlo para los extraños, seguro que quienes tienen cerca enfrentarse a los de Ibón Navarro, tampoco han de estar tranquilos a la hora de enfrentarse, sobre todo si se cree en la posibilidad de formalizar el cambio.
A lo mejor, me estoy poniendo en modo “malaguita”, de esa manera que nos vemos en el infierno con una derrota y camino de la gloria con un triunfo, pero creo que necesitamos ilusionarnos y tener alguna buena noticia, para ello, quizá mejor empezar ya.