Con la victoria el pasado domingo en la Copa Andalucía y la disputa el próximo fin de semana de la Supercopa ACB, la apertura oficial de la nueva temporada ACB está en puertas para el Unicaja y el resto de los equipos de la competición española.
Con una pretemporada con sólo dos victorias conseguidas por los chicos de Joan Plaza, el Unicaja ofreció en el último test, ante el Baloncesto Sevilla, una cara similar a las derrotas ante Cholet, Le Mans, ASVEL y Khimki. Han tenido como denominador común que ha habido momentos de desconexión, los cuales han decidido los partidos por situaciones puntuales, hay ocasiones en las que basta para ganar, en otras, no es suficiente.
Toda vez que a estas alturas de la temporada, más que resultados importan las sensaciones, que el calendario impida la posibilidad de poder trabajar con la plantilla por culpa de lesiones, selecciones o la incorporación tardía de jugadores, comprimir la calidad del trabajo del entrenador provoca que la cifra habitual de seis semanas de pretemporada sean casi un sueño imposible, además si con posterioridad a la incorporación de un jugador importante, se tiene la desagradable sorpresa de venir en mal estado o con una lesión no esperada –como en el caso de Richard Hendrix-, se pone todo más complicado.
No obstante, lo ofrecido por el equipo en el último encuentro tuvo buena cara por los conocidos, con instantes brillantes de la mano de Germán y Kuzminskas, con el respaldo de Vázquez y Markovic comenzaron a decidir un choque en el que los nuevos ofrecieron buenas sensaciones con la lógica falta de acoplamiento por parte de los Jackson, Smith, Díez o Hendrix, el cual, pese a la duda que va a arrastrar por su situación física, dio una buena impresión.
Es demasiado prematuro decir algo, y casi siempre recurrimos a esperar al mes de diciembre para ver en qué sitio se coloca el listón de las aspiraciones del equipo, pero como esto funciona de esta forma, el viernes, para el encuentro que abre el primer título que se disputa esta temporada, enfrente estará el Real Madrid que no tendrá nada que ver con el que se enfrentó en Alhaurín de la Torre, y será el equipo que ha ganado los últimos cinco títulos que ha disputado (Supercopa, Copa del Rey, Liga ACB, Euroliga y Copa Intercontinental), se añade dentro del plantel de Pablo Laso, cuatro miembros (Fernández, Llull, Reyes y Rodríguez) que además suman el Eurobásket con la selección. No parecen los blancos el rival ideal para presentarte en tu cancha, pero seguro que el espectáculo que veremos el viernes será magnífico y digno de dos grandes equipos, así como el FC Barcelona y el Herbalife Gran Canaria que serán los otros contendientes.
Los motores ya se ponen a punto, sin ir más lejos, el primer rival de la Euroliga, el Brose Baskets alemán le ha ganado la Supercopa de su país al EWE Oldenburg, a la vuelta de tres semanas, la temporada estará funcionando a pleno pulmón, habrá que pedir que la fase de acoplamiento lógica que ha de vivir el grupo con la mitad de miembros nuevos con respecto a la plantilla del año pasado sea breve, y que el inicio sea bueno para poder acometer una temporada complicada, pero para los que nos limitamos a verlo, apasionante.