¡Eres un animal!

6 Ago
"Eres un cerdo" / EFE
"Eres un cerdo" / EFE

Resulta curioso pensar cómo utilizamos esta expresión que me sirve de título (u otras similares como “¡eres una bestia!”) para agredir a nuestros semejantes. A veces los insultos se formulan con especificaciones: eres un cerdo, un burro, una zorra, una foca, una vaca, una hiena, una urraca, un loro, una víbora, una rata, un perro… Digo que es curioso porque, a fin de cuentas, nosotros también somos animales. Racionales, pero animales. Los animales actúan movidos por instintos, sin maldad alguna. No me cabe duda, viendo algunos comportamientos de los seres humanos (violaciones, asesinatos, torturas, engaños…), de que la maldad humana está muchas veces planificada y ejecutada milimétricamente. Recuerdo un poema en el que varios monos están en un árbol viendo cómo los hombres se pelean y se matan entre sí. Se niegan a aceptar que esos seres sanguinarios sean descendientes suyos. Qué vergüenza para su especie.

En pocos días he visto una película (tributo de paternidad) y he leído una novela que tienen un final casi idéntico. Los dos cierres tienen que ver con el amor a los animales. Ha sido una feliz coincidencia que me ha llevado a escribir estas líneas. Me refiero a la película “Los pingüinos del señor Popper”, del director Mark S. Walters y a la novela “El vals lento de las tortugas”, de Katherine Pancol.

La película es una obra simpática y bastante mala técnicamente de Walters, director que había filmado antes otras obras más inteligentes como “Chicas malas” o “Ponte en mi lugar”. Los pingüinos tienen que decidir al final de la película con quién quieren estar. Si con el cuidador del zoo que les muestra unos apetitosos pescados o con la familia del señor Popper que les promete afecto sin límites. Los seis pingüinos titubean, parecen seguir el instinto que les arrastra hacia la comida pero acaban caminando hacia quienes les ofrecen afecto.

En la novela “El vals lento de las tortugas” (segunda parte de “Los ojos amarillos de los cocodrilos”) la entrañable protagonista Josephine, encuentra un perro vagabundo de imagen muy poco agraciada. Lo recoge. Lo lleva a cada. Convive con él. El perro se convierte en un apoyo esencial de su vida. Un buen día se encuentra con un individuo que dice ser el antiguo propietario del perro. Ante el tremendo dilema éste propone hacer una aprueba que determine con quién estará el perro. Se separan los dos pretendientes. El primer propietario le muestra al perro un paquete de galletas que, al parecer, son una delicia para el perro. Josephine solo puede mostrar su cariño. El perro sale disparado hacia las galletas. Ella, que ha recibido un durísimo golpe con la decisión del can, se aleja triste y desilusionada. Y de pronto oye una carrera acelerada del perro que la ha seguido. Se vuelve con enorme alegría. Y allí está el perro con el paquete de galletas en las fauces.

Creo que el respeto y el amor a los animales es un termómetro moral de la sociedad. Tratarlos sin miramientos, con dureza, con crueldad, es un síntoma preocupante de insensibilidad. Cuando veo cómo se repiten algunas costumbres de extraordinaria violencia contra los animales (cabras que se arrojan desde una torre, peleas de gallos que acaban con la muerte, toros que son torturados en las plazas para diversión del personal…) me pregunto por el desarrollo moral de nuestra cultura. Cuando veo que se abandonan perros en el verano porque van a complicar las vacaciones de sus dueños o a grupos de niños que apedrean a los gatos por el simple placer de verlos sufrir, cuestiono el nivel de sensibilidad de nuestra especie. No me gusta ver sufrir a los animales.

En las familias, en las escuelas, en la sociedad en general es preciso desarrollar procesos educativos que inspiren el mayor respeto y el mejor cuidado de los animales. No comparto la opinión de quienes dicen que son tantas las necesidades de los seres humanos, que es una pérdida de tiempo y de recursos todo lo que se haga por los animales. Es muy probable que quienes tienen sensibilidad los animales la tengan también, incluso mayor, para las personas. Ya sé que, como en todas las cosas, hay extremos que no son aceptables. No me parece de recibo, por ejemplo, que haya clínicas multimillonarias para perros mientras se mueren de hambre millones de niños y de niñas en el mundo.

La existencia de zoos que privan a los animales de su libertad natural, la exhibición de animales en circos, la experimentación con animales en laboratorios, la explotación de animales en granjas, la práctica de la caza mayor y menor, la existencia de animales de compañía (mal llamados mascotas), las corridas de toros… ponen sobre el tapete la cuestión de los derechos de los animales. ¿Tienen derechos los animales similares a los que tienen las personas?

Hay derechos que se reconocen porque se tienen y hay derechos que se conceden a través de la legislación. Los seres humanos, mediante la capacidad de razonamiento y de consciencia hemos acordado que somos depositarios de derechos inalienables. No sucede los mismo con los animales.

Creo que los animales tienen derechos, aunque no sean idénticos en su naturaleza y origen a los de las personas. En primer lugar porque tienen inteligencia y emociones, en segundo lugar porque tienen capacidad de sufrimiento. En tercer lugar porque tienen valor. No rompemos un cuadro de Goya porque sabemos que tiene valor.

En un interesante artículo de Adela Cortina, titulado ¿Tienen derechos los animales?, responde a la pregunta que viene formulándose desde el primer tercio del siglo XVIII: “Así dicho, la respuesta no puede ser hoy más palmaria: sí, claro, tienen los derechos que les conceden las legislaciones de un buen número de países, que cada vez precisan más el trato que debe dispensarse a los animales; un trato que, como mínimo, exige no provocar sufrimiento inútil”.

Como es sabido, en 1977 se proclama una Declaración Universal de los Derechos del Animal, que pretende equipararse a la de 1948 sobre los derechos humanos. Se compone de 14 artículos, referidos fundamentalmente al derecho a la existencia, a la libertad, a no sufrir malos tratos y a morir sin dolor.

Lord Byron escribió sobre la tumba de su perro el siguiente epitafio: “Aquí yacen los restos de alguien que poseyó la fuerza sin la insolencia, el valor sin la ferocidad y la belleza sin la vanidad”. Es probable que el tamaño de la lápida no diera para más.

Nos vendría bien a todos y a todas hacer un esfuerzo para que los animales puedan tener a nuestro lado una vida placentera y una muerte sin dolor. Todo lo que hagamos en ese sentido será bueno para ellos, pero también nos mejorará a nosotros ya que nos hará más sensibles y más justos.

15 respuestas a «¡Eres un animal!»

  1. Buena llamada de atención. Maltratar a los animales es un indicador de barbarie. Cuidar a los animales es una forma de mejorar el mundo.

  2. No tengo mucho que aportar al artículo. Tampoco quiero escribir ese breve párrafo inexpresivo tan característico de los comentarios a los artículos. Recomiendo la lectura de Gerald Durrell, Mi familia y otros animales, absolutamente maravillosa: es la perspectiva, en relación a los zoológicos, del hermano del autor de El cuarteto de Alejandría y de paso un viaje refrescante a Corfú. Por otra parte, para que todos recordemos quiénes somos (una especie más), una película algo olvidada: En busca del fuego, de Jean Jacques Annaud. De este mismo director os va a encantar también El Oso, un canto a la vida, el respeto a los animales, a los ecosistemas. Y por último, vía hemeroteca, recomiendo que recordeis lo que se está haciendo en el Amazonas: una destrucción masiva, constante, sistemática con el beneplacito, faltaría más, de todos los poderes fácticos.Uno de los pulmones del planeta se está extinguiendo ante la impasibilidad absoluta del mundo entero. En fin, buen mes estival y no os perdais, vivais donde vivais, una puesta de sol en el sereno mediterráneo. Abrazos.

  3. É interessante como as pessoas se preocupam com o “pulmão do mundo” que aos poucos está sendo destruido, mas não se preocupam em fazer a sua quota parte para evitar que a vida no “Planeta Azul” não se deteriore. É como se um fumante viesse falar da saúde dos pulmões alheios. Por qual motivo não questionam a exploração desenfreada de petróleo que vem contribuir para a poluição desregrada do ar que respiramos? Por que não questionam a matança de golfinhos, de baleias? Por que não andam de bicicleta e preferem seus carrões confortáveis? Seus interesses maiores estão em jogo, trata-se de um caso raro de visão unidirecional, ou há nisso tudo uma permissivadade desse mundo que está em estágio de impassibilidade parcial?

  4. El artículo sirve para dar un buen tirón de orejas a aquellas personas que sin escrúpulos se deshacen de sus mascotas.
    Una vez más, se demuestra la falta de concienciación de la sociedad por los animales (igual ocurre con el medio ambiente). Todas las personas sabemos que tener un animal en casa es una responsabilidad, aún así, compramos las mascotas y poco a poco se pierde la ilusión por ellos, convirtiéndose en una carga,lo curioso es que jamás sucede lo contrario.

  5. Extraordinario, Miguel Ángel, este canto de amor a la naturaleza, a los animales.
    Personalmente, viendo lo que se ve en este mundo,la raza humana, ¿se puede considerar realmente racional?

  6. El compaginado de sentimientos y coherencia es siempre difícil, y si se les concomita en algún parangón, no será extraño que al poco unos estén en la cresta y el otro en el valle o viceversa. He preferido decir “coherencia” para evitar hablar de otros términos como jerarquía, gradación, pirámide efectiva, etc., que con los sentimientos propiamente dichos no casan del todo bien. Una máxima por encima de todo: amor a los animales. Esta es la mayor. Pero, claro, por humanos no somos perfectos, y viene la menor: los contextos culturales y emocionales donde ejercemos de amantes. Yo creo, señor Santos, que el llamar a los demás con nombres del género animal, es un fenómeno cultural, y un atributo, quizá mezquino, del lenguaje, donde las figuras retóricas, las onomatopeyas y otras composiciones se prestan al descrédito semoviente; pero, en mi opinión, lo importante no es tanto nuestra conducta sobre el particular, sino la contención, reprensión y castigo que imponga el ordenamiento. Infligir un castigo a un animal puede ser amparado por la tradición costumbrista, pero la normativa debe de estar al quite y sancionar. Para mi es lo más importante, porque la cultura se cambia entre los siglos, y las normas jurídicas entre las legislaturas. Además, he hablado de coherencia porque en los sentimientos algo de esta habrá de haber. Sentimientos sin coherencia es pura pasión instintiva, y coherencia no afectiva es robótica; las dos formas son malas sobre el hombre y la biología. Y paso a la verbigracia. No me parece lógico que haya quien esté en contra de los toros y a favor del aborto, o en contra del aborto y a favor de la pena de muerte. Pero claro, el debate se vicia en su propio demiurgo, y la lógica y la coherencia pasan a depender de los contextos como dije antes. Habrá quien diga que el aborto no entraña sufrimiento, otros que digan que el toro mantiene la raza de lidia, y otros que digan lo contrario. Todo parece indicar que la sucesión instinto-razón-computación, la evolución quizá, no va a despejar el enigma de los afectos y su relación con la coherencia. Por eso, señor Santos, yo no me preocupo tanto del uso metafórico o vocativo de los términos animales; lo que me preocupa es que los comportamientos inciviles no estén positivizados y perseguidos en los códigos jurídicos en muchos lugares del mundo cuando se comenten contra los animales y los hombres. No pergeñar el daño a los demás, además de no traducirlo en actos, en sí mismo deberían ser una competencia básica de la escuela. Un saludo.

  7. Me parece interesante su comentario, Sr Jiménez. Pero yo no veo contradicción entre estar contra los toros o contra la pena de muerte y a favor del aborto.
    Bueno, a favor del aborto creo que no está nadie. Todos y todas los partidarios de que se pueda practicar consideramos que es una dura y triste decisión. No hay persona en el feto, a mi juicio. Se trata de proteger a la madre (pensemos en una violación o un embarazo no deseado, en riesgo de laa vida de la madre…). La violencia y el daño vienen si no se practica el aborto. También para ese proyecto de persona que está abocada a vivir una vida sin condiciones favorables.

  8. DONNA
    También yo “tengo un amor pequeño y luminoso como el de un niño”.
    Hace apenas unas fechas ha cumplido siete años; el que suscribe, 54. Era uno de esos seres raros que cuando veía suelto un perro se cambiaba de acera: un extraño suceso de infancia me marcó esta psicosis que hice extensiva a todo tipo de animales.
    Hace muchos años en nuestro balcón, donde convivían los geranios, hicieron su nido de amor una pareja de palomas. El huevo era de un blanco muy puro. Les dejamos construir su casa sobre la cuenca de una humilde maceta vacía. Un día tuve que recoger al pequeño palomo del suelo y devolverlo a su lecho: fue un auténtico triunfo.
    Intenté no trasladar mi enfermedad a nuestro hijo: deseaba desde siempre un perro. Nuestra casa era muy pequeña; mi temor por el ser “irracional”, enorme.
    Pasaron muchos años y yo seguía allanando las aceras un día sí y otro también. Finalmente, decidimos dar el paso. Nos la dieron con apenas treinta días. Fui incapaz de tocarla dentro de su cestita. Si me lame y logro aguantar ese contacto creo que podré seguir adelante, me decía. Además ya no hay vuelta atrás. Muy torpe en ciertas destrezas manuales, el instinto me lanzó y le hice su primera casita con unos cartones.
    Su llegada coincidió con una gripe del alma que se introdujo y aposentó más de lo debido y de una manera muy peligrosa:
    En la oscuridad y el vacío, caminando entre la miseria
    que me desnuda cada día
    Gorrión de vuelo bajo que picotea recuerdos
    de un pasado tuyo – nuestro – de calles y esperanzas
    que no volverán. (…)

    Ella fue quien me levantaba cotidianamente de la cama, me enseño su amor desmedido y…poco a poco salí. Talibán: no hay ningún centímetro de su piel que no reconozca y acaricie diariamente. Suspiro tierno de la vida cuando le acaricio sus orejas.
    Gracias, hermano mayor, amigo y maestro, por todo. La senda física, posiblemente se borró, pero ya ves que basta un poco de aire para reavivar el fuego.
    Pero también gracias a todos vosotros los que dais vida a este adarve tan entrañable.

    P.S.:El paso del tiempo sigue haciendo bueno eso de que el mundo es un pañuelo: he conocido a tu prima Pilar.

  9. No tuve espacio para incluir en el artículo una simpática anécdota que tiene que ver con la inteligencia de los animales:

    – Qué listo es tu perro, le dijo Aristóteles a Platón cuando vio a éste jugando con él una partida de pòker.
    Y Platón le aclara a su maestro:
    – No tan listo como parece, cada vez que le llegan buenas cartas mueve el rabo.

  10. HOLA MIGUEL ANGEL! YO SIENTO EL AMOR HACIA LOS ANIMALES. HE REGALADO UN CANARIO A UNAS SOBRINAS PRECIOSAS Y LO HE TRAIDO EN EL COCHE DE SEVILLA A MALAGA. EN EL CAMINO NO HE DEJADO DE PREOCUPARME POR EL PAJARITO,QUE TUVIERA AGUA, ALPISTE Y COMPAÑIA. CADA DIA DESCUBRES UNA FACETA DE TU VIDA Y EN ESTE CASO MI AFECTO LLEGA A LOS ANIMALES.CUANTA ALEGRIA! FELIZ VERANO MAESTRO.

  11. Sí, sería bueno que nos comportáramos de manera más parecida a los animales, pero parece que en nuestro planeta ya no hay vuelta atrás, con tanto progreso, consumismo, y ese sistema perverso, averigüen ustedes cómo se hace el picadillo de hígado, que clase de vida tienen esos patos, que desde que nacen se los cuelga del cuello con un goteo de alimento balanceado con alto contenido graso, y alí se están sin moverse hasta que son sacrificados, para que podamos comer el “paté”, es una vergüenza humana, una aberración, son seres vivos, sienten dolor y necesitan moverse, desplazarse para buscar su alimento…mejor ni sigo, por que me dan ganas de llosar… y eso de “amar a los pajaritos”, ¿qué clase de amor? Tenerlos presos de por vida, entre barrotes, ¿han pensado en la condena perpetua de los pájaros enjaulados? Han sido creados para para VOLAR y ser libres, o es que acaso no entenderemos nunca los humanos el significado de la palabra libertad? ¿Hasta cuándo vamos a sentirnos amos absolutos, dioses-demonios, dueños de la vida de los animales, a los que consideramos seres inferiores sólo porque no pertenecen a nuestra especie? No seguiré, porque me exalto, y no quiero ofender nadie, sólo pido que piensen en los animales como seres vivos y sensibles, a los que les ha tocado en suerte 8o desgracia) por algún tiempo y circunstancia compartir con nosotros este pequeño planeta.

  12. Saludos desde el contaminado Chile, bueno más aún por las lacrimógenas y aguas con químicos, nada de agradable la represión a manifestarse libremente.
    Frente el tema planteado, desde la educación, sólo crear conciencia… hace un par de años con los chicos en la escuela trabajamos un tema que tiene que ver con la protección y cuidado de GAIA, alusión a la propuesta de Mago de Oz, grupo Heavymetal. aqui dejo fragmentos de letras de algunas canciones:
    Se despertó bañado en sudor
    Y un frío interno, le estremeció
    Se hizo la luz, y en su cama junto a él…
    ¡¡Vio a esa mujer!!

    Fue como aquel beso que no dio
    Como ese “Te Quiero” que negó
    Llegó la hora de echar cuentas y el lloró.

    Tú representas a todo ese horror
    Que enferma y mata el planeta.

    Al condenarme abortaste también tu perdón…

    Yo soy el aire, la brisa y el mar
    Y el Amazonas que herido
    Sangra por vuestra ambición,
    Yo soy parte de el.

    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás.

    Toda su vida ante el desfiló
    Vio su niñez, no se reconoció
    en Su inocencia murió por su ambición
    ¡¡La asesinó!!

    Aparecieron en su mansión
    Un ciervo anciano y un halcón,
    Un bosque quemado y un sauce llorón
    Esto es un juicio y este el tribunal
    Que ha de condenar tu usura
    El ozono es el fiscal y una ballena el juez
    Un río contaminado en pie
    Hace pasar al jurado
    Formado por la justicia, el amor
    Y algún pez.

    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás.

    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás.

    Busca una nutria a su amor y ve
    Que la acaban de asesinar,

    Ha muerto a golpes de sin razón,
    Solo querían su piel
    Y no entiende porqué, si ellos tienen piel
    Matan por otra tener,

    La intentá despertar, pues va a amanecer
    Y han quedado en ver salir el sol.

    Has de pagar y este tribunal
    Te condena a un árbol ser
    Y cuando tengas sed, sólo de beber
    Lluvia ácida tú tendrás
    Y la nutria lloró, pues vio que su amor
    De nuevo tenía piel
    Y el sol se despertó y corrieron a ver
    Un nuevo amanecer…
    ¡¡Y el mar sonrió!!

    Cuentan que tras una tormenta ayer
    El viento derribó un árbol
    y que su tronco, de casa sirvió a un castor.

    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás.
    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás.

    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás

    Todo mal que me hagas, a ti te lo harás
    Pues la Tierra es tu hogar
    Y al igual que amar, también se castigar
    La venganza de Gaia tendrás

    La venganza de Gaia tendrás…!!
    La venganza de Gaia tendrás…!!
    “todo mal que me hagas, a ti te lo harás, pues la tierra es tu hogar”…
    y en la venganza de Gaia,

    Dragonlfy tiene una canción titulada “MIL LÁGRIMAS!, SI TENEMOS CONCIENCIA Y QUEREMOS UN PLANETA LIMPIO, AMABLE, POR MÁS TIEMPO…sugiero ver el video y la propuesta en el mensaje, Despiértate, sin dejar de soñar,
    Después de hoy, ¿Qué habrá?

    Si al final, muy poco quedará,
    Mil lágrimas caerán.

    Y tal vez, esta vez,
    Siento que voy a perder,
    Cómplice de matar la ilusión.

    Mejor morir que con miedo vivir,
    Sin intentar cambiar.

    Disimular, saber que algo va mal,
    Hipócrita serás.

    Una vez y otra vez,
    No lo puedo comprender,
    Que mires y no quieras entender.
    Que la tierra es tu hogar,
    De los bosques al mar.

    Hoy densas nubes no te dejan ver,
    Ni el aire que respiras, ni el agua para beber,
    No es…

    De lo que hubo ayer,
    Muy poco queda hoy.
    ¡Ayúdame! a calmar este dolor.

    Que tu silencio se haga voz,
    Que nuestro ruego llegue a Dios.
    A no callarse, a esperanzarse,
    Todo está en el corazón.

    saludos, nuevamente desde Chile.

  13. Una sociedad que no tiene sensibilidad para tratar a los animales es más propensa a tratar también mal a las personas.
    Muchos animales están indefensos ante el maltratador. Por eso hace falta más perversidad para hacerlos daño.

  14. Querido Luis Eugenio:
    Gracias por tu hermoso, tierno y vibrante testimonio.
    Gracias por tus generosas palabras sobre el blog.
    Y gracias por servirme de puente hasta mi querida y admirada prima.
    Un abrazo

  15. Miguel Angel.Estoy en Malaga y ayer paseando por el centro de esta maravillosa ciudad di a parar con la sede del diario en el que tu haces estos maravillosos comentarios. Me sente en la puerta con las ganas de verte aparecer,toda una ilusión;pero de ilusiones también se vive.Malaga me recuerda a ti, porque como tu, me da tranquilidad, sosiego, esperanzas,ganas de seguir y de vivir. Buena feria.

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