Plaza UMA: El conocimiento universitario al servicio de los ciudadanos

La nueva herramienta de la Universidad de Málaga tiene como objetivo establecer un diálogo en el que la comunidad universitaria ayude a resolver necesidades sociales y territoriales.

MARÍA DOLORES MEDINA

Los directores de secretariado son los encargados de validar las propuestas que llegan al portal de Plaza UMA, que a finales de febrero había recibido ya 13 peticiones.

La Universidad de Málaga ha puesto en marcha este curso ‘Plaza UMA. Ciencia para la Sociedad’, una nueva herramienta que arrancó en noviembre con la colaboración de la Diputación de Málaga y que tiene como objetivo servir de mediadora entre la sociedad civil, el tejido productivo e instituciones y la universidad. Una iniciativa que se materializa en un portal en el que la universidad recibe a diario peticiones y necesidades por parte de los ciudadanos e instituciones de toda la provincia.

«Este proyecto surgió en el marco de una iniciativa europea de ciencia para la ciudadanía; la idea original era tener una especie de escaparate para que la universidad enseñara y ofreciera todos sus conocimientos a los ciudadanos e instituciones que necesitasen resolver algún problema», explican desde la organización. El objetivo es poner en valor y dar a conocer cuáles son los medios de la universidad para que puedan ser aplicados a las necesidades del entorno.

El público al que se dirige el proyecto son instituciones como ayuntamientos, asociaciones, ONG, centros formativos, empresas o colegios profesionales. En este sentido, la idea es que la UMA, que realiza diversos proyectos acerca de un amplio abanico de temas, pueda proyectar esa información de forma que pueda ayudar a las instituciones que lo necesiten. «Lo que hemos hecho ha sido visitar cinco comarcas de la provincia. De esas, hemos recogido una serie de retos e inquietudes que se quieren realizar en las diferentes empresas y los hemos analizado para así poder ponerlos sobre la mesa y desarrollar una solución», señalan los directores de secretariado de las facultades de la UMA, encargados de validar cada propuesta.

Plaza UMA ha recibido hasta final de febrero 13 peticiones de colaboración de localidades como Villanueva de la Concepción, Carratraca o El Burgo.

Las soluciones para cada petición se realizan a partir de varias fórmulas. La más común es relacionar el problema o necesidad que se plantee con una carrera y desde ahí, encontrar trabajos, realizados o no, que puedan poner solución al problema en cuestión. «Estos trabajos pueden ser de fin de grado, realizados por alumnos, también pueden organizarse proyectos integrados, que pueden tener programas específicos de formación, doctorados o proyectos pequeños relacionados con estudios de viabilidad», explican. Los trabajos y proyectos son realizados tanto por profesores de la comunidad universitaria como por alumnos.

En cuanto a los programas específicos de formación, el equipo de Plaza UMA ya tiene algunos proyectos organizados. «De momento tenemos pensado un proyecto en Algarrobo para un cultivo subtropical que debe ser tratado. Para ello, pondremos al servicio de quien lo desee un curso de formación para saber cuidar este tipo de plantaciones, en este caso un árbol», apuntan los organizadores del proyecto.

Plaza UMA debe su nombre a una idea tan básica como las clásicas «plazas de pueblo». «En ellas la gente se reúne, comparte, aprende y busca en muchas ocasiones soluciones, de ahí que decidiéramos poner este nombre al proyecto», aseguran. Esta herramienta que aún continúa dando sus primeros pasos ya tiene organizadas diversas actividades en las que, no solo se ofrecerán soluciones a través de trabajos, sino que además, promocionarán información a través de conferencias, reuniones y en su web, https://www.uma.es/plazauma/.