Tres candidatos inician hoy la carrera hacia el Rectorado
El 1 de diciembre la comunidad universitaria está convocada a las urnas. Realizamos un cuestionario de cinco preguntas a los tres candidatos (Adelaida de la Calle, Miguel de Aguilera y Ricardo Redoli).
1. ¿Cuáles son los principales problemas de la UMA y cómo piensa resolverlos?
2. ¿Qué quiere ser de mayor la UMA? ¿En qué tiene que especializarse para afrontar la competencia? ¿Cuál debe ser sus señas de identidad?
3. ¿Cómo puede la UMA atraer inversión privada y no depender de los presupuestos públicos? ¿Cómo debe devolver la UMA esa confianza a la sociedad?
4. ¿Cómo aplicar el Plan Bolonia con los mismos recursos?
5. ¿Qué tiene que hacer la UMA para aumentar la empleabilidad de sus egresados?
Adelaida de la Calle: «Presidir la CRUE ayudará a que seamos un referente»
Catedrática de Biología Celular en la Universidad de Málaga, aspira a la reelección
Nueve años de vicerrectora. Ocho años de rectora. Adelaida de la Calle se presenta a la reelección de la UMA ostentando el cargo de presidenta de los rectores españoles. Presenta su acción de gobierno como aval.
1. Tengo que empezar diciendo que la Universidad de Málaga ha crecido y avanzado de manera extraordinaria en la última década. El talento de esta comunidad nos ha permitido llegar a ser lo que somos, una institución conocida y reconocida en España y en el extranjero, con dos campus, una gran ciudad universitaria en crecimiento y una amplísima oferta de titulaciones de grado y posgrado. Yo creo que la UMA tiene hoy una deuda muy importante con su capital humano, que es el que ha tenido que esforzarse todos estos años para ofrecer una formación y una investigación de calidad.
La UMA padece ahora mismo los problemas de una institución que ha crecido mucho y muy rápido, porque siempre es difícil acompasar el crecimiento con las necesidades de personal y equipamientos. Asimismo, necesitamos hacer un esfuerzo para completar y mejorar nuestras infraestructuras. Pero gozamos de solvencia económica, lo que nos permitirá acometer estas actuaciones con garantías de éxito.
2. La UMA es una universidad joven que ha sabido hacer bien las cosas para situarse en una posición ventajosa frente a otras universidades españolas. Que la Universidad de Málaga presida la CRUE ayudará a convertirla en un referente de universidad pública, con el horizonte de la excelencia como meta hacia la que seguir trabajando.
El Campus de Excelencia Internacional Andalucía Tech, el único de estas características que existe en el cuadrante sur peninsular y que alberga titulaciones novedosas como Bioquímica, Ingeniería de la Energía o Estudios de Asia Oriental, ya es un activo de especialización, un rasgo distintivo que singulariza a la UMA y que la coloca en una posición de fuerza en el panorama universitario nacional. Quiero que la Universidad de Málaga se convierta en un auténtico motor económico, poniendo su conocimiento a producir.
3. La UMA, como universidad pública, debe seguir dependiendo de presupuestos públicos. Corresponde a los gobiernos central y autonómico invertir en educación y destinar incluso más recursos a investigación y desarrollo, porque es la mejor forma de superar épocas de crisis.
Pero como ya hemos demostrado a lo largo de estos años, sabemos atraer recursos externos, que suponen un apoyo importante para la docencia y la investigación. De ahí que hayamos incrementado los acuerdos de cooperación con los sectores productivos, y pensamos seguir haciéndolo, como también seguiremos apostando por las acciones de patrocinio y mecenazgo en la UMA.
4. En estos años, si ha habido alguna demora, nosotros hemos sido capaces de utilizar los recursos propios para ayudar a financiar la investigación. Y, si fuera necesario, seguiremos haciéndolo. En cuanto al Plan Bolonia, está suponiendo un cambio profundo en el conjunto de las universidades, un cambio que implica a toda la comunidad universitaria, a nuestra capacidad de reciclaje académico e investigador. Pero también depende de la financiación: hay que adaptar el modelo de enseñanza-aprendizaje, hay que diseñar planes de estudios con mayor presencia de créditos prácticos, pero también hay que disponer de fondos para la adquisición de más equipamientos. Y por otro lado, hay que motivar al profesorado reconociéndole el esfuerzo extra que esto supone, pues se ha hecho muy rápido y con escasos recursos.
5. La Universidad ya es la mejor opción para encontrar trabajo, las cifras así lo avalan. El paro es 1,3 veces menor entre quienes tienen el privilegio de tener un título universitario que entre los que no lo tienen. La formación superior es, hoy por hoy, el medio más seguro para acceder a un empleo cualificado y bien remunerado.
Con todo, esto no es suficiente. Necesitamos seguir mejorando el nivel de empleabilidad de nuestros egresados, y la mejor manera de hacerlo es colaborando estrechamente con los actores sociales y económicos, conociendo sus demandas y necesidades y tratando de adecuar nuestras enseñanzas a ellas, sin olvidar que la primera misión de la Universidad es transmitir y generar conocimiento. Una Universidad con presencia internacional, competitiva y con buenas relaciones con el tejido productivo, es necesariamente una buena opción para el alumnado, y esa es la Universidad que en estos años hemos diseñado y afianzaremos.
Miguel de Aguilera: «Tenemos que mejorar nuestra posición en los ranking universitarios españoles»
Catedrático de Comunicación Audiovisual, se presenta por primera vez
Tras 30 años dedicados a la docencia y de haber sido mano derecha de Adelaida de la Calle como director de Comunicación de la UMA durante su primer mandato y buena parte del segundo, Miguel de Aguilera se presenta a rector.
1. El mayor de ellos, el más visible y que ejemplifica algunos de los demás, es la falta de un liderazgo académico que fije un rumbo claro y nítidamente académico, que se concentre en el trabajo universitario y en los retos y oportunidades que la UMA precisa. Hace falta una mayor presencia en el despacho de la UMA, sentando criterios y recibiendo y oyendo a la comunidad, y gobernando con el conocimiento de lo que es la Universidad.
También se pueden mencionar la falta de suficiente transparencia. Es necesario repensar para mejorar la eficacia en materia de gestión económica, simplificar procesos administrativos y las tareas colaterales a la enseñanza que todos los profesores tenemos que tener. Y debemos mejorar nuestra posición en los ranking universitarios españoles.
2. Es nuestro proyecto está apostar por una estrategia de alianzas que impulse la internacionalización de nuestro profesorado, ligada a la atracción de investigadores de reconocido prestigio. Creo que no estamos aprovechando las oportunidades que nos están llegando a nivel internacional. Por otro lado, diría que nuestra universidad es generalista. Ahora mismo hay un marco definido por una alianza con la Universidad de Sevilla que hay que respetar. Es una vía de especialización a través de Andalucía Tech, que se ha logrado con el esfuerzo de todos. Las prioridades que ahí se establecen son las TIC y las biotecnologías. Me parece bien, pero añadiría el peso de sectores de nuestra economía importantes y con muchas posibilidades, como son, sobre todo, el turismo y también la hortofruticultura. El concepto dominante y definido por el equipo de gobierno actual es bastante estrecho y tiene que completarse con una serie de aportaciones de otras áreas de conocimiento, fuertes, sólidas y arraigadas en la UMA.
3. De la financiación actual de la UMA, el 18% proviene de la matriculación. El 10% proviene de fuentes externas (contratos de investigación) y el resto son transferencias, es decir, el dinero que envía la Junta. Por eso hay que mantener la mejor sintonía posible con la nueva consejería que surja tras las autonómicas de marzo y cambie el gobierno andaluz. Habría que racionalizar el gasto, reduciendo los gastos sociales, en los que ha habido demasiado afición, y hacer más efectivos los procesos de tramitación del gasto en el Rectorado. Ese 10% de recursos externos esencialmente se deben a la facturación de la OTRI. Hay que potenciar los vínculos con el sector productivo, desarrollando una investigación muy vinculada a la transferencia de conocimiento, para incrementar el desarrollo de la investigación aplicada. También desarrollaremos un plan de mecenazgo.
4. Acabar con la política de coste cero. Es un error. Entiendo que la situación económica es difícil, pero ahora mismo hay una mayor carga laboral del profesorado que provoca una reducción de la calidad de la enseñanza y de la investigación. Hay que unir los vicerrectorados hoy separados de Profesorado y Ordenación Académica. Hacer también una planificación adecuada de la oferta de postgrado. Hay unos 56 másteres oficiales que puede que no sean necesarios y que consumen una gran cantidad de recursos. Delimitar de forma clara las obligaciones docentes para hacer un reparto más justo y revisar el plan de ordenación docente y el cómputo de la docencia en créditos europeos para establecer unos criterios más objetivos y uniformes comunes a todos los centros.
5. Que quien venga a la universidad sea porque su proyección y vocación pase por la formación universitaria o descanse y se apoye en eso. Pero como la gente es práctica, hay que potenciar la posibilidad de salir de aquí llegando lo antes posible al mercado laboral en condiciones favorables. Hay que estrechar de verdad la relación con las fuerzas productivas y mejorar también la vinculación del trabajo universidad-empresa con los beneficiarios de este trabajo, que son los estudiantes. Es una pata esencial y hemos pensado en un vicerrectorado de Estudiantes-Inserción Profesional, aumentando las prácticas en empresas y creando servicios de orientación.
Ricardo Redoli: «Hay que buscar conciertos con las grandes universidades»
Catedrático de Filología Francesa, lo intenta por segunda vez
Ricardo Redoli vuelve a la carga. Dice que De la Calle no ha cumplido un pacto tácito al que llegó con él hace ocho años y por eso se presenta de nuevo a rector. Es el candidato sorpresa del proceso electoral.
1. Hemos de dotar a la UMA de una imagen al exterior que realmente tenga credibilidad. Cuando se habla de la excelencia, es posible que algún grupo de investigación la logre y sirva de garante, pero en general no llegamos al notable. Es nuestra obligación aplicar la calidad de la enseñanza a los alumnos, no sólo desde el punto de vista de la investigación, sino también de la docencia. Hay alumnos que no tienen clase porque no hay sustituciones. Debe haber un colchón de docentes sustitutos para dar respuesta a la perentoria necesidad que tienen los alumnos de recibir clases. Si a las bajas se suman las ausencias de profesores que participan en coloquios, conferencias, mesas redondas o seminarios… Además, hay que mejorar las infraestructuras y los accesos.
2. No tiene más remedio que consolidarse en el Plan de Bolonia, que es deficiente en relación a la preparación de nuestros alumnos. Apostaría porque los egresados puedan salir siendo doctores preparados para la investigación. Cuando hablamos de especialización se tiende a dejar de lado las Humanidades, cuando tendrían que estar por encima de todo. En Japón están arrasando. Para ser jefe de cualquier empresa, te exigen el dominio de un idioma extranjero y de una cultura específica. La informática y telecomunicaciones están en manos de una selecta minoría. Tenemos que ir todos a una y con un objetivo común.
3. Los convenios con centros y universidades oficiales nos llevarán a los conciertos con las instituciones privadas. No hay más que mirar cómo funcionan las universidades americanas, que la mayoría son privadas, que tienen por una parte la propia subvención de los alumnos y fundaciones y una parte mínima es estatal. Aquí es al revés. También se puede lograr a través del intercambio de investigadores y docentes. Aunque en este momento la crisis reina por encima de todo y ahora sería muy difícil conseguir inversión privada. Aunque todo va a estar relacionado con el nivel de calidad que tenga la universidad. ¿Dónde están los convenios con las grandes universidades?
4. Hay dos tipos de investigación. En aquellas carreras de mayor disciplina práctica, vendiendo buenos artículos. Si sacas algo que vale realmente la pena va a tener financiación. Málaga ha sido puntera en muchas cosas, como la energía fotovoltaica… Pero Bolonia creo que es lo más barato que se ha inventado desde el punto de vista económico y de la enseñanza. Sólo hay que decir la «m» con la «o» y la «t» con la «o»: moto. Bolonia es un bodrio, la equivalencia que se quiere hacer mediante adaptaciones no es posible. Me consta y lo sé que Bolonia en Francia se sigue a medias. Y en Bélgica no se aplica al cien por cien. Y los ingleses pasaron olímpicamente del proceso.
5. Poco puede hacer en esta época en la que no hay pastel para todos. Es la pregunta inmediata aunque no con una solución inmediata, sino a medio o largo plazo. Decir otra cosa sería muy demagógico. Sería aventurado dar una solución con la situación que estamos.