«Hay que ser un poco Quijote para montar una empresa hoy en día»

Mantiene que los empresarios y su capacidad emprendedora son, posiblemente, la mejor herramienta para salir de la crisis. Lleva diez años al frente de su propia empresa, Nerea Arqueología Subacuática y es un ejemplo de cómo una pasión y una idea puede convertirse en un modo de ganarse la vida.

¿Qué ha aportado usted a los cursos de la UMA?

Mi experiencia. De cómo una idea que me apasionaba se convirtió en una empresa que, aún hoy, sigue generando riqueza y empleo. Un repaso de nuestros hitos y problemas que hemos sufrido durante ese tiempo para ejemplificarlo a los alumnos. Cómo de algo tan bonito, como la Arqueología, se puede sacar una empresa que aporte beneficios.

Hablaba de crear empleo, algo casi imposible en estos momentos ¿Son las empresas las herramientas para lograrlo?

Sin duda. La empresa es la solución. En cualquier sitio del mundo desarrollado, la empresa es la pieza clave. Sin embargo, aquí, en España, tenemos unas complicaciones que, desde luego, no ponen en valor a la empresa. Para que ésta prospere, debemos tener un ámbito competitivo y un marco legal que ayude, igualmente, a la empresa. Y, en este sentido, aún queda mucho camino por recorrer. Los emprendedores, hoy en día, son héroes.

¿Pero hay iniciativa emprendedora?

Claro que la hay. En España somos muy creativos. No somos ni mejores, ni peores que el resto de Europa, por ejemplo. Luego podemos. Pero pedimos que se nos valore más como empresarios.

¿No es fácil emprender en España?

No es tan fácil y, aún así, hay emprendedores porque es la salida a la crisis, porque es la salida a la vocación profesional e, incluso, porque las políticas universitarias invitan al emprendimiento. Pero luego te encuentras con una serie de problemas, como de financiación, que hay que solventarlos.

¿De qué trabas habla?

Son muy concretas. Medidas de carácter fiscal, como facilitar el pago del IVA a las empresas una vez se hayan cobrado todas las facturas; medidas de carácter social, como una justicia rápida y eficaz; un mercado laboral mucho más dinámico… entre otras, pero son medidas que, si no se retocan, corren el riesgo de acelerar la muerte de las empresas, que es lo que está pasando.

Y por si fuera poco, la crisis…

Sobre todo, nos afecta en lo que a financiación se refiere. Nuestra piedra angular. No hay dinero circulante y, entonces, las empresas pueden hacer pocos proyectos. No se nos facilitan créditos para poder llevarlos a puerto

¿Qué tal su experiencia como presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Málaga? ¿En qué momento se encuentra?

Cogimos la Presidencia de la AJE Málaga en el peor momento pero no deja de ser un reto. Algo que nos encanta, por otra parte, a los propios empresarios. Hay que ser un poco Quijote para montar una empresa, máxime, para dirigir una organización empresarial en estos momentos tan complicados. Pero los socios confían en nosotros y yo estoy muy contento porque estamos aplicando medidas de sentido común: acercar al socio todo tipo de servicios para que sean más competitivos, hacer nuevos canales de negocio, abrir el mercado a AJE Andalucía y España. Medidas de carácter estratégico, en definitiva.