La UMA teme que la Junta pague a los investigadores después del periodo de verano

El Gobierno andaluz asegura que la partida está aprobada pero desconoce cuándo se ejecutará

La Universidad de Málaga se muestra pesimista y no cree que la Junta de Andalucía sufrague la deuda que mantiene con los investigadores hasta después del verano. Después de que La Opinión de Málaga publicase el pasado domingo, día 24, que el Gobierno andaluz debe desde el pasado mes de marzo algo más de  2,7 millones de euros a un total de 28 grupos de investigación de la institución académica malagueña, desde la universidad reconocen que no esperan que las ayudas se materialicen hasta después de la época estival.
«Dudo mucho que vayamos a tener noticias antes de septiembre u octubre», aseguró ayer el vicerrector de Investigación de la UMA, José Ángel Narváez, quien señaló que hasta el momento «no han tenido ninguna notificación» al respecto.
En este sentido, indicó que todos los datos relativos a las distintas universidades andaluzas «los maneja la Consejería», y teniendo en cuenta que la Administración «está de vacaciones» consideró difícil que se produzca de forma inmediata alguna novedad.
Ante estas circunstancias de crisis y de recortes, la Universidad de Málaga se ha visto obligada a adelantar a cada grupo, al menos, un 10 por ciento del dinero que le adeuda la Junta para evitar que el trabajo de los investigadores se quede paralizado.
«No nos hemos planteado qué haremos si definitivamente la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa no nos abona la subvención antes del mes de octubre», afirmó el vicerrector de Investigación de la UMA, quien señaló que la mayoría de los equipos afectados por este retraso se dedican especialmente a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
No obstante, Narváez confió en que para esa fecha «tengamos información al respecto», porque «si no fuera así nos encontraríamos con un problema bastante serio».
«Hemos tenido que adelantar el dinero a los investigadores para que puedan seguir funcionando porque sin dinero no pueden continuar trabajando», lamentó el vicerrector de Investigación, que puso de manifiesto la necesidad de que ese dinero sea devuelto, «ya que la situación de la UMA tampoco es muy boyante en esta época de crisis».

Junta de Andalucía
Por su parte, el secretario general de Universidades, Francisco Triguero, precisó que la partida en cuestión está aprobada y pendiente de pago, aunque admitió que desconoce cuándo podrá ejecutarse. No obstante, señaló que la UMA aún dispone de remanentes de ayudas anteriores que no han sido usufructuados por los propios beneficiarios.
Así, insistió en relativizar la importancia de la partida que todavía no ha pagado a la UMA. En este sentido, Triguero aclaró que la cantidad no puede relacionarse en ningún caso con la supervivencia de los grupos, ya que éstos, aseveró, se sufragan con líneas más ambiciosas concedidas en función de su competitividad.
El responsable autonómico de universidades incidió en que la financiación que reclama la UMA es «complementaria» y se otorga comúnmente para afrontar pagos que no pueden justificarse por otras vías. En este sentido, recordó que los grupos de investigación obtienen el grueso de sus fondos a través de líneas que premian la excelencia y los resultados y que éstas son concedidas tanto por la Junta como por el Gobierno y el sector privado. Rosalía Romero/Lucas Martín